La pelea por esta agrupación ciudadana, Alternativa Anticapitalista de los Trabajadores, se basa en los principios y objetivos que conduzcan a terminar con esta sociedad basada en la desigualdad, la explotación y la opresión. Somos anticapitalistas y, por lo tanto, antimperialistas. Consideramos que tanto oficialistas como la oposición patronal sólo se diferencian en sus modalidades de gestionar el capitalismo: por un lado, la oposición agrupada en el 21F, de corte más en general liberal y que reivindica el régimen de democracia pactada y, por otro, lado el MAS, con un barniz tibiamente desarrollista y manteniendo los objetivos del “capitalismo andino”. Contrariamente desde la LORCI, recogemos lo más avanzado del programa elaborado por el Partido de los Trabajadores el año 2013, que empieza en forma categórica planteando la necesidad de expulsar al imperialismo de Bolivia y América Latina. Luchamos por un gobierno de los trabajadores que en alianza con los campesinos, pueblos originarios y los sectores populares urbanos sea capaz de resolver los grandes problemas pendientes del atraso y la pobreza consecuencias del carácter semicolonial del país. La pelea por la agrupación ciudadana AAT, tiene el objetivo de llegar a cientos de miles de trabajadores y trabajadoras, a la juventud, mujeres y diversidades sexuales, y a los pueblos originarios con nuestras propuestas revolucionarias, buscando abrir espacios de organización y lucha.
En las líneas siguientes expresamos en forma resumida algunas de estas propuestas:
Con respecto a la democracia y la casta política de parásitos
Impulsar que todo funcionario público de nivel jerárquico (jueces, magistrados, ministros, presidente, diputados, senadores, etc.) gane el salario de un obrero fabril calificado, o de un maestro de escuela, o un trabajador de salud, que en ningún caso debería ser menor al salario que cubra la canasta básica familiar. Peleamos para que toda la población goce de un seguro de salud digno, integral y gratuito, con fondos provenientes del recorte de los presupuestos de los aparatos de seguridad y represión del Estado.
Terminar con las jubilaciones de privilegio de parlamentarios, jueces y militares.
Que los jueces y todo el poder judicial sean elegidos por urnas sin preselección parlamentaria que se usa para manipular y condicionar a los electores. Los y las trabajadores tenemos derecho a elegir jueces al servicio de los trabajadores y los pobres, y no como sucede actualmente al servicio de los ricos y poderosos.
Todo funcionario público elegido por voto popular debe ser revocable en cualquier momento que no cumpla con el mandato de sus electores.
Impulsar la pelea para la eliminación de la cámara de senadores, estamento reaccionario y antidemocrático que diluye el peso de las mayorías. Lo mismo con la figura presidencial, herencia monárquica. Es necesario una sola cámara de diputados del pueblo con funciones legislativas y ejecutivas. Con respecto a los trabajadores y el mundo del trabajo
Para crear más empleos y contra la precarización: impulsar la jornada laboral de 6 horas sin bajar el salario.
Basta de dos, tres trabajos. Por una jornada laboral de 6 horas y un salario equivalente a la canasta familiar con escala móvil.
Como medida de emergencia, para defender la fuente de empleo es necesario impulsar la prohibición de despidos así como la expropiación sin indemnización y pase a administración de los trabajadores de cualquier empresa que cierre o despida. Los trabajadores no tenemos por qué pagar las consecuencias de los malos negocios capitalistas como nos los sugiere la Ley de Empresas Sociales recientemente aprobada.
Rechazar toda injerencia estatal en las organizaciones obreras y sindicales. Impulsar una ley que plantee que los trabajadores tenemos el derecho de organizarnos libremente sin ninguna mediación ni injerencia externa para terminar de esta forma con la manipulación por parte del ministerio de trabajo y del propio Gobierno en nuestras organizaciones.
Impulsar la apertura de los libros de contabilidad y el control obrero colectivo de las empresas para verificar la situación de las mismas así como las ganancias que se llevan los capitalistas y que nos permita defender nuestras fuentes de empleo y nuestros salarios. Con respecto al movimiento de mujeres y las diversidades sexuales
Impulsar en forma real la separación del Estado y las iglesias, eliminando las ventajas patrimoniales e impositivas de las que gozan.
Educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar y aborto legal para no morir.
Por guarderías, comedores y lavaderos comunales para avanzar en terminar con la explotación de las mujeres y el trabajo no pagado dentro del hogar.
Por plenos e iguales derechos para todas las diversidades sexuales.
Basta de discriminación a las mujeres y a las diversidades sexuales. Por un real acceso al trabajo, igual salario por igual trabajo.
Por una educación sexual laica y no sexista para combatir patrones culturales atrasados que alientan la violencia y discriminación contra las mujeres y las diversidades sexuales. Te puede interesar: Desde el feminismo socialista, por una alternativa política para las y los trabajadores, las mujeres y la juventud
Con respecto a la educación y la juventud
Basta de financiar la represión policial y militar, triplicar el presupuesto para la educación y la salud.
Becas de estudio para los que trabajan.
Por una educación de calidad, científica, laica, no sexista y gratuita que responda a la realidad nacional y que esté al servicio de los trabajadores y el pueblo pobre, no al servicio de bancos y empresas.
Contra el acoso y la violencia de género en la Universidad, contra la falta de condiciones para las mujeres universitarias, en especial para las madres y trabajadoras estudiantes. Luchar por la Independencia política de las universidades públicas frente al gobierno y las fracciones burguesas de todo tipo.
Democratización del sistema universitario mediante el voto universal igualitario. Pueblos indígenas, campesinos y sectores populares
Consideramos que los y las trabajadores debemos sostener, elevar y pelear por el conjunto de demandas de los demás sectores oprimidos por el capitalismo como son los campesinos pobres, los pequeños productores (artesanos, talleristas, etc.) y comerciantes de las ciudades, así como los derechos de los pueblos indígenas y de las comunidades cuyos territorios están siendo violentados por las trasnacionales y las políticas del Gobierno nacional inspiradas en modelos extractivitas y primario exportadores. En este sentido peleamos por:
La nacionalización de la banca y monopolio estatal del comercio exterior bajo control de los trabajadores para de esta manera poder satisfacer la demanda de créditos baratos de los pequeños productores del campo y la ciudad.
Defendemos el derecho a la autodeterminación de los pueblos y naciones oprimidas del país.
Peleamos por una reforma agraria integral en el Oriente y la colectivización de las tierras bajo control de las y los trabajadores de la agroindustria.
En defensa de los derechos de los pueblos indígenas y la naturaleza. Expulsemos a las trasnacionales y al imperialismo.
Industrialización de los recursos naturales, bajo control de los trabajadores y comunidades campesinas, recuperando la Agenda de Octubre del 2003.