Reseña del libro Manual para mujeres de la limpieza de la escritora estadounidense Lucia Berlin
David Voloj @VolojDavid
Viernes 24 de febrero de 2017
Manual para mujeres de la limpieza reúne cuarenta y tres cuentos de los casi setenta que Lucia Berlin publicó a lo largo de su vida. Es la primera traducción al castellano de la obra esta escritora poco conocida hasta ahora, incluso en Estados Unidos. La edición incluye una introducción, un prólogo y un apéndice que destacan distintos aspectos biográficos de Berlin y que, tal vez, expliquen su poca visibilidad en la escena literaria norteamericana.
Las historias que componen el libro se caracterizan por la observación detallada y minuciosa de las relaciones domésticas donde se consume la existencia. En este sentido, resuenan ecos de los cuentos de Chejov, Hemingway, Carver, de esa tradición de escritores realistas que exhiben aquellas tensiones cotidianas con una prosa sencilla y contundente.
Pero el caso de Lucia Berlin es significativo en tanto se focaliza en las contradicciones de distintas mujeres que rompen con el lugar asignado por la sociedad de la época. Una docente termina en la cárcel por tener relaciones con un chico mucho más joven que ella. Una madre naufraga entre su hogar y una clínica para rehabilitación de alcohólicos. Una niña es expulsada del colegio católico por desconocer la autoridad de las religiosas que velan por su educación. Una enfermera carga entre sus brazos a un jockey que, por un instante, se convierte en su hijo de ensueño. Más allá de las diferencias de clase, los personajes femeninos comparten algo: la voluntad de renegar de las convenciones, de chocar con los acuerdos tácitos.
Los gestos de rebeldía que se suceden en los cuentos son mínimos y, aunque en ocasiones no se alcanzan a comprender, se sostienen. Fuertes y débiles a la vez, inestables y tozudas, las mujeres que se dibujan en cada relato pagan un precio muy alto en enfrentar la opresión. Así deviene la soledad, la angustia que lleva al alcohol, la presencia latente de la muerte.
Sin embargo, la carga dolorosa que atraviesa Manual para mujeres de la limpieza convive con un humor sutil, con el asombro por la belleza que habita los márgenes. La mirada de Berlin explora en microuniversos tan asfixiantes como dotados de ternura, donde se hacen visibles otros sujetos marginales, por lo general mexicanos, indios, jóvenes inadaptados.
“La mayoría de los escritores utilizan accesorios y decorados de su propia vida” dice la narradora en ‘Punto de vista’, uno de los cuentos del libro. La protagonista es una escritora que analiza un texto de Chejov antes de ponerse a narrar. Las reflexiones del proceso de escritura, el cruce entre la ficción y la vida, así como el juego con la primera y la tercera persona, pueden leerse así como la síntesis de las búsquedas narrativas de Berlin: “Aspiro a que, a fuerza de minuciosidad en el detalle, esta mujer les resulte tan creíble que no puedan evitar compadecerla”.
Lucia Berlin nació en Alaska, en 1936. Vivió en Estados Unidos, México y Chile. Es considerada una escritora de culto por la crítica literaria internacional. Los avatares de su vida, signados por el alcoholismo, la pobreza y los problemas de salud, convirtieron su nombre en una leyenda. Escribió setenta y siete cuentos, la mayor parte publicados en revistas y libros de poca circulación. Su obra ha sido comparada con la de Faulkner, Carver y Hemingway, entre otros escritores norteamericanos. Falleció en 2004. En 2015, se hizo una selección y edición que salió con el título Manual para mujeres de la limpieza.
Manual para mujeres de la limpieza de Lucia Berlin. Alfaguara, 2016, 432 págs.
