Sábado 11 de abril de 2015
La lista 503F “verde k” para las próximas PASO en San Rafael se presenta como la abanderada del progresismo local dentro del PJ y fuera de éste, aunque lleva como precandidato a intendente a Emir Félix, quien busca su reelección. Mientras que lo sigue como precandidata a concejal Natalia Galamba (Kolina), hija de desaparecidos. La lista está integrada además por militantes de La Cámpora y del Partido Comunista.
La familia Félix se ha constituido en una clara representante de la casta política local.
Omar Félix, fue Concejal del ’95 al ’99, hasta el 2003 fue senador provincial e intendente hasta el 2009, actualmente es diputado nacional. En la intendencia, lo sucedió su hermano Emir Félix. Ambos son hijos del difunto Chafí Félix, quien fuera intendente en tres oportunidades, entre 1964 y 1966, posteriormente entre el 1973 y 1975, y fuera convocado nuevamente en 1982, cuando la dictadura cívico-militar aún gobernaba el país.
El eje recurrente del “relato” del progresismo kirchnerista es la lucha por los DDHH en contra del genocidio acaecido por el Terrorismo de Estado del ’76 al ’83. Félix padre fue convocado a prestar declaración en el primer juicio por crímenes de lesa humanidad, al ser identificado por varios testigos como colaborador de las autoridades militares locales. Lo atestiguado concretamente por María Esther Dauverné fue que encontrándose ella secuestrada oyó como Chafí se dirigió al Mayor Luis Suárez (comandante de la Subzona en 3315 de operaciones del Ejército) y a Luis Stuhldreher (intendente militar capitán) diciéndoles: “estamos a su entera disposición, si necesita algo como nombres o cuerpos, estamos a su servicio”.
El Tribunal dejó sin efecto dicha citación recurriendo al derecho de defensa, previo acuerdo entre fiscalía y querella, ya que supuestamente al ejercer funciones públicas antes, durante y después de la dictadura “no queda claro en qué podría declarar como testigo y en qué como imputado". Además Félix certificó problemas de salud, relacionado a un cuadro de amnesia parcial, mientras se lo veía transitar los pasillos del municipio regenteando la obra pública y visitaba el cajero sin problemas.
Continuando la relación con los represores, durante la intendencia, su hijo Omar designó al frente del Departamento de Seguridad al ex comisario Raúl Oscar Pérez, quien fuera jefe de la Inteligencia policial durante la dictadura, y está siendo imputado en el segundo juicio que se desarrolla actualmente.
Otro eje constitutivo del relato K ha sido el de la ampliación de derechos. Un ejemplo presentado es la sanción de la ley de Matrimonio Igualitario. De los 85 diputados nacionales kirchneristas, 51 estaban dispuestos a votar positivamente (entre ellos el mismo Néstor) y 34 por el rechazo, Omar Félix se encontró entre los de este último grupo. Dos meses después de ese álgido debate en la Cámara de Diputados y un mes antes de que proyecto pasara a la de Senadores, tanto Omar Félix como su hermano Emir, participaron de la autodenominada “marcha contra el matrimonio gay” convocada bajo el lema “salvemos la familia” para la cual el Obispado católico local movilizó todo su aparto eclesiástico de colegios privados y órdenes religiosas, incluyendo a la ultramontana Verbo Encarnado. Allí se leyó una declaración de principios que decía, por ejemplo, que “el matrimonio se funda en el vínculo libre, permanente y exclusivo entre un varón y una mujer” y que “la unión heterosexual es considerada como el ámbito privilegiado donde no sólo se genera la vida humana, sino también la fortalece y humaniza".
En esta misma tónica, cuando se desarrolló la controversial discusión legislativa respecto al Código Civil y Comercial, para cuya reforma los legisladores K tuvieron que acordar con el episcopado argentino suprimiendo del art. 19 la referencia al “seno materno” que hacía el viejo texto de Vélez Sarsfield, suplantándolo por la de “concepción” solamente, limitando de lleno así un posible debate legislativo sobre el derecho al aborto legal, seguro y gratuito. En este caso, el voto a favor de Omar Félix no fue la excepción sino la regla.
Los hermanos Félix, junto a su mano derecha el concejal Mauricio Sat, impulsaron que el Concejo Deliberante local (presidido actualmente por Sat) declarase a San Rafael como una ciudad Pro-Vida y Pro-Familia. La ordenanza claramente expresa que "el cuidado de los derechos de la persona desde el momento de la concepción hasta la muerte natural, conforme se encuentra consagrado en el ordenamiento jurídico, que entiende el derecho a la vida como fundamental e inalienable al ser humano"; exhortando además al gobierno municipal a "proponer, apoyar y colaborar en cada una de las propuestas para dar continuidad a la implementación de programas, charlas, talleres y jornadas que se destinen a concientizar a la comunidad por la importancia de cuidar la vida; y una amplia difusión del contenido de la presente pieza legal por los medios que entienda corresponden".
En base a lo expuesto se entiende como durante el extenso último discurso de apertura de sesiones del Concejo Deliberante, Emir Félix solo dedicó dos párrafos a la situación de las mujeres en el departamento, que son el 52% de la población local. Esto implica ignorar, por ejemplo, los cientos de abortos clandestinos que llegan para ser finalizados en el hospital público local.
En ese mismo discurso, si uno analiza otro de los ítems claves de la retórica k -el de la “inclusión” socio-económica de los jóvenes-, el intendente actual solo se dedicó a enumerar la bajada de planes nacionales parches como Progresar, Jóvenes con Más y Mejor Trabajo, Promover, etc., a la par de la enumeración de distintas actividades juveniles recreativas y de la amplia recepción de niños en jardines maternales municipales, poniendo así el acento más bien en la empleabilidad asistida del joven que en la responsabilidad del Estado municipal en la generación de puestos de trabajo genuinos y en blanco. No resulta extraño. En más de una década de gobierno municipal felixcista, se dedicó a garantizar la rentabilidad empresaria a costa de la continuidad noventista del trabajo joven precarizado, tercerizado y flexibilizado.
Así, la sorpresa inicial deviene en oportunismo por parte de lista 503F “verde k” que mencionábamos al principio, cuando el PJ-FPV provincial derrotado en las últimas elecciones legislativas del 2013 solo marcó una gran diferencia a favor en San Rafael de la mano de los Felix. Cuando de resultados se trata el tradicional pragmatismo peronista limita así el supuesto proyecto político de “profundización del modelo nacional” con que discursivamente presume -de forma- esta lista, haciéndolo retroceder -de hecho- bajo el yugo del cacicazgo Félix. Un deja vu quizás de lo que le va a acontecer -o mejor dicho que ya le está aconteciendo- al kirchnerismo con Scioli para las elecciones nacionales.