Río Negro. Empezó la carrera electoral en medio de un fuerte cuestionamiento a Weretilneck

Ni aliado ni opositor se define el partido del gobierno de la provincia JSRN (Juntos Somos Río Negro). Cuando había definido la ofensiva con la conformación del partido y los avales, el asesinato del policía Muñoz, rememora los hechos más impunes de la provincia. JSRN recientemente había sido el receptor de la denuncia por malversación de fondos de publicidades oficiales, criticado duramente por la situación de emergencia por violencia de género en la provincia y el déficit fiscal. Al paro docente se suma el reclamo de los productores frutícolas que el lunes viajarán para manifestarse en Casa Rosada.

Cuanto menos debilitado, es como se encuentra el gobierno provincial de cara a las próximas elecciones, en los tramos de 2017 y 2019, sumado a que varias de los principales apuestas como figuras del partido están vinculados a casos de corrupción, como la intendenta de Allen Sabina Acosta, el ex ministro y actual legislador Ricardo Arroyo o la ministra de educación Mónica Silva. Un panorama incierto, si se tiene en cuenta que Weretilneck confiaba en la posibilidad de la reforma de la constitución para poder acceder a su tercer mandato. Los últimos acontecimientos ponen en duda que pueda volver a derrotar por amplio margen al peronismo como en 2015.

Reclamo de los productores frutícolas

Uno de los síntomas de su incapacidad para mediar entre las partes es su relación con el sector de los productores frutícolas, clave en la provincia y a quienes no logra contentar a pesar de los $50.000.000 que les otorgó para la poda. En el ballotage, su apoyo a Scioli le valió dos semanas de corte de ruta en el Valle. Luego el gobernador redefinió su estrategia y ahora, más cerca de Macri tampoco conquista la simpatía de este sector que se manifestará en Casa Rosada porque las medidas tomadas por nación para favorecer a los productores, como la quita de retenciones, en la provincia se hayan bloqueadas por la concentración del circuito frutícola. Indudablemente la protesta es para reclamar también por el reparto de la devolución de la renta por exportaciones portuarias de SAE de donde sale hacia el exterior el 70% de la producción, ambos reclamos suman 795 millones de pesos por año que antes no ingresaban a la provincia.

Ante esto, el FPV tomó la delantera y comenzó una disputa por la simpatía del sector frutícola o al menos para limar asperezas, criticando al gobierno nacional y provincial y tanteando la reacción de los chacareros, históricamente radicales. El peronismo, que busca retornar, atreviesa una feroz interna entre Soria y Pichetto. Martín Soria, quien el año pasado logró ser presidente del PJ en una alianza con La Cámpora y desterrando a los pichetistas, se vale de cada traspié del gobierno para presentarse como la oposición política, como lo hizo criticando al gobernador por no haber sido parte del amparo contra el tarifazo como el resto de los gobiernos patagónicos. Por otra parte entre la CC-ARI y la UCR aún no pueden consensuar para

la conformación de la alianza Cambiemos, otros radicales, conscientes de su falta de peso propio, apuestan a que JSRN y Cambiemos den respuesta al sector frutícola y tener claridad.

Los trabajadores de la educación también reclaman

Ayer se cumplieron las 72 hs de paro definidas la semana anterior y con la adhesión superior al 90%, exigieron el 20% de recomposición salarial para el segundo semestre. Se movilizaron en Viedma con una bandera también contra el ajuste y el tarifazo, desde todos los frentes el gobierno provincial sufre los coletazos que le implica aparecer más aliado que opositor a Macri. Las denuncias sobre la situación edilicia de las instituciones que llegan a estar sin clases durante meses, se acrecienta. Esta semana a raíz de las denuncias de las familias y de UnTER, la fiscalía inició una investigación sobre la seguridad de 3 edificios escolares de Cipolletii, General Roca (Fiske Menuko) y Bariloche.