Estos días la Lista Forbes daba cuenta de cómo las personas más ricas en el Estado español se han hecho todavía más ricas durante la pandemia. Un informe de Oxfam recoge ahora datos del enorme aumento de la desigualdad social y la pobreza.
Jaime Castán @JaimeCastanCRT
Martes 23 de junio de 2020
La ONG Intermón Oxfam ha publicado su último informe sobre pobreza y desigualdad este martes 23 de junio, recogiendo diversos datos y entre ellos los publicados hace unos días por la Lista Forbes. El texto aporta datos que dan cuenta de que, de nuevo, y pese a la retórica del Gobierno “progresista” del PSOE y Unidas Podemos, con la pandemia unos pocos capitalistas siguen obteniendo grandes beneficios y millones de personas caen en la pobreza y la miseria.
El informe apunta que “entre el pasado 18 de marzo y principios de junio, los milmillonarios españoles de la lista Forbes han visto aumentar el valor de su riqueza en algo más de 19.200 millones de euros (21.900 millones de dólares US). Todos ellos, sin excepción (23 milmillonarios, 18 hombres y 5 mujeres) han aumentado el valor de su riqueza. En sólo 79 días. Esta realidad contrasta con la vivida por una gran mayoría, para la que el mismo periodo ha supuesto un impacto económico y un coste social sin precedentes”.
La población más pobre, el decil con menos ingresos según los cálculos de Oxfam, “podría llegar a perder, en términos proporcionales, más de ocho veces la renta que pierde el decil de renta más alto”. Por lo tanto, no sólo las 23 fortunas más grandes son obscenamente más ricas, sino que las estadísticas del informe señalan algo que es ya de sobra conocido, que la crisis está golpeando con más dureza a las personas que ya vivían en la pobreza incluso antes de la pandemia.
Esta situación se traduce en “un aumento de la desigualdad de la renta neta de 1,7 puntos, medidos en términos del índice de Gini, hasta alcanzar el 34,2 (frente al último registro antes de la COVID-19 situado en el 32,5)”. Teniendo en cuenta que “el año que más aumentó la desigualdad durante la pasada crisis económica, entre 2012 y 2013, apenas lo hizo en un punto”.
Oxfam denuncia además que el conjunto del sistema tributario sigue depositando la carga impositiva en el trabajo y el consumo, frente a la riqueza y el capital. En España la gran mayoría de la recaudación proviene del IRPF y el IVA. En estos momentos el 83% del total recaudado sigue recayendo sobre las familias (trabajo y consumo, esencialmente) frente a una aportación del 12% del impuesto de sociedades. De hecho, el peso que los salarios tienen en la economía del Estado español ya viene de perder 5 puntos con la crisis anterior, suponiendo el 66% del PIB en 2009 al 61% en 2017, como han mostrado los dato de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Lejos de “estar en el mismo barco”, las grandes fortunas y negocios capitalistas siguen haciendo negocio obteniendo beneficios milmillonarios, incluso en plena pandemia. Aumenta la pobreza y la desigualdad rápidamente, sin embargo, el Gobierno “progresista” del PSOE y Unidas Podemos inyecta miles de millones de dinero público a estas grandes empresas y capitales a través de créditos, avales o ERTEs. Mientras tanto, los medios de comunicación conservadores y la extrema derecha acusan a este “gobierno comunista” de aumentar la pobreza, al mismo tiempo que ensalzan la “filantropía” de multimillonarios como Amancio Ortega, que se está enriqueciendo a niveles obscenos con total hipocresía.
Así en este escenario de crisis social, donde buena parte de la izquierda cae en un apoyo al Gobierno como “mal menor”, se está dejando libre el espacio político al discurso populista de la extrema derecha. La izquierda anticapitalista y revolucionaria tiene la responsabilidad de pelear por un programa que cuestione las ganancias del capital y las grandes fortunas a través de la más amplia movilización de la clase obrera, la juventud, las mujeres y las migrantes. Levantar una alternativa política anticapitalista audaz y combativa es la forma de enfrentar a la extrema derecha y de hacer que la crisis la paguen los capitalistas.