Deuda externa. ¿En cuántos bonos o jubilaciones se podría haber invertido lo pagado por el Gobierno al FMI?

El Gobierno realizó, este miércoles, otro pago por la deuda con el FMI por casi US$ 1.900 millones. Las negociaciones para firmar un nuevo acuerdo con el Fondo se encuentran estancadas y el Frente de Todos sigue optando por convalidar el ilegal e ilegítimo préstamo solicitado por Macri.

Por estos días, los trabajadores del Estado recibirán un bono de fin de año de apenas $ 20.000 y en su gran mayoría están cobrando salarios por debajo de la canasta básica que estima el Indec. Los trabajadores precarizados, los monotributistas y los desocupados no recibirán ningún bono, ni tampoco aguinaldo. Con los más de US$ 6.450 millones destinados hasta el momento por el Frente de Todos (desde su asunción) para cumplir con las exigencias del Fondo, se podrían haber otorgado cerca de 13 millones de bonos de fin de año de $50.000. Una suma insuficiente para hacer frente a las necesidades insatisfechas de millones familias que se encuentran en la pobreza, pero que ante la emergencia de la crisis social sería una ayuda importante.

También en estas fiestas la falta de viviendas dignas se mantendrá como un problema crítico. Como evidenció la toma de tierras en Guernica el año pasado, los precios altos de los alquileres y los terrenos dejan a los sectores de menores ingresos con la imposibilidad de contar con un techo propio. En el barrio La Nueva Unión de Rafael Castillo, las familias deberán pasar los días de fin de diciembre bajo la amenaza de ser desalojadas. Si el gobierno de Alberto Fernández hubiese optado por utilizar lo pagado al FMI en la construcción de viviendas, podría haber realizado más de 183.000. La equivalencia surge al tomar como referencia los planes de vivienda del presupuesto nacional, se estima que la construcción de una vivienda tiene un costo de US$ 35.000.

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La política económica, encabezada por Martín Guzmán, tuvo como objetivo de primer orden reducir el gasto público, en sintonía con los planes del Fondo Monetario. Este ajuste recayó con particular peso sobre los jubilados, aquellos que cobran la jubilación mínima (que son la mayoría) apenas si pasan los $ 29.000 de ingreso, cuando la Defensoría de la tercera edad estima la canasta de los jubilados en $75.505. Si el Gobierno hubiese utilizado los recursos que entregó al Fondo en aumentar las jubilaciones, podría haber pagado el equivalente a más de 8 millones y medio de esas canastas.

Cualquier acuerdo con el FMI implica una profundización de la crisis social que ya sumergió a más del 40 % de la población por debajo de la línea de pobreza. Sólo un desconocimiento soberano de la deuda, como propone el Frente de Izquierda, permitiría comenzar a construir otro futuro, uno donde la prioridad sean la vivienda, las condiciones de vida de las grandes mayorías, la salud y la educación.

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