Richard Von Appen, quien es presidente de una de las navieras portuarias más poderosas del país, busca ir por la presidencia de la Sofofa. La idea del empresario es conferir una mayor visibilidad a la actividad empresarial y poner de relieve el rol de los gremios regionales y sectoriales. La familia de origen nazi, busca aumentar sus ganancias en desmedro de las y los trabajadores portuarios. En estas elecciones constituyentes es necesario poner al centro la estatización del puerto bajo gestión de sus trabajadores y el pueblo, para poner fin a las ganancias de un pequeño grupo de empresarios y conseguir trabajo, salud, educación y vivienda digna y de calidad para todos y todas.
Lunes 10 de mayo de 2021
La familia Von Appen, de origen nazi y dueña de Ultramar, llegó a Chile en la década de los 40, luego que su patriarca Julio Alberto Von Appen llegara al país desempeñándose como líder de las operaciones nazis en Latinoamérica, tras ser expulsado de Alemania por participar en actividades de sabotaje en la Segunda Guerra Mundial como militante del partido nacionalsocialista de origen nazi.
Su objetivo principal era hacer explotar el Canal de Panamá, para lo cual el estado alemán le proveyó de recursos para montar una empresa naviera con base en Valparaíso. En una de las entrevistas del diario la Hora, admitía su orgullosa filiación al partido Nacionalsocialista Obrera Alemán y detallaba paso a paso su historia para convertirse en el líder del espionaje germano en Chile “Fui y soy militante activo del partido nazi. No lo niego, así como usted tampoco tendría razón para ocultar su filiación política. Pero sobre toda otra consideración, soy alemán y me siento alemán en cualquier punto del globo. Y como alemán sentí en carne propia la rebelión de mi patria contra los que se oponían a la satisfacción de sus más elementales derechos. Sí, siempre mantuve contacto con Berlín y mi partido”.
Radicado en el país, el empresario logró formar un imperio en el mundo de los negocios. En 1952 fundó el holding Ultramar con un capital de US$2 mil, contando en la actualidad con un patrimonio que superaría con creces los US$1.000 Millones. De esta forma la familia Von Appen ha estado ligada al negocio portuario por más de 60 años, con un respaldo en ganancias que bordean sobre los 10 millones de dólares por día ( cerca de 7.000 millones de pesos)
El puerto de Valparaíso para el pueblo
Solo con un día de ganancia portuaria en temporada alta, se podrían construir 2 CESFAM nuevos o más de 3000 jóvenes de la región podrían estudiar con gratuidad. De ahí la importancia de cuestionar hacia dónde van esas ganancias, que hoy se las lleva un grupo de empresarios, quienes no tienen nada que ver con quienes hacen funcionar y ponen en pie día a día el puerto de Valparaíso: sus trabajadores.
Valparaíso se caracteriza por ser una ciudad donde más de 30.000 familias viven en campamentos, lo que significa vivir en condiciones muy precarizadas, donde muchas familias no cuentan con los medios básicos de subsistencia, como por ejemplo el agua potable, alcantarillado o el alumbrado público.
Esta situación de desigualdad y precariedad, que vivimos la mayoría del pueblo trabajador, se contrasta con las ganancias millonarias de la familia Von Appen, dueños de Ultraport. Es por esto que es importante denunciar las ganancias de esta familia nazi.
Necesitamos una propuesta que diga fuertemente :¡ Fuera Von Appen!, Estatización del puerto de Valparaíso bajo gestión de sus trabajadores y el pueblo, para así conseguir trabajo, salud, vivienda y educación de calidad para todos y todas. Es necesario recuperar las ganancias portuarias para el pueblo trabajador, donde sean estos últimos quienes administren toda la riqueza generada por los puertos y le den solución a los principales padecimientos que hoy viven las familias trabajadoras. Esta alternativa la plantea la lista ZR de Trabajadores Revolucionario/as en estas elecciones del 15 y 16 de mayo. Con trabajadoras y trabajadores, estudiantes y pobladores anticapitalistas, que denuncian este régimen de empresarios heredado de la dictadura y hoy se organizan en perspectiva de un gobierno de trabajadores. Por salud, educación y vivienda ¡la plata del puerto para el pueblo!