Cerca de las 2 de la madrugada del domingo 15 de noviembre, un grupo de policías permitió a los manifestantes cruzar la Av. Abancay hasta los exteriores del Congreso de la Republica y luego los reprimieron brutalmente. Horas antes, miembros de la Policía Nacional habían asesinado a dos estudiantes universitarios que se movilizaban junto a miles contra el gobierno de Merino.
Domingo 15 de noviembre de 2020
Foto: El Comercio
Los manifestantes llevaban letreros y una bandera del Perú muy grande. Su desplazamiento era de manera pacífica, lo cual fue aprovechado por los policías para tenderles una celada y reprimirlos como han venido haciendo durante todos los días que se vienen dando las movilizaciones desde que asumió la presidencia Manuel Merino.
En esta oportunidad, el Jefe del operativo policial encargado de resguardar los exteriores del parlamento, el Teniente Arias, se acercó a los manifestantes demostrando signos de “paz” y les brindo saludos a todos haciendo que se sienten en las veredas.
Lo cual genero confianza en los jóvenes que se venían movilizando sin causar ningún destrozo ni mostrar signos de violencia. Minutos después, llegaron más policías y con ello la represión y la lluvia de bombas lacrimógenas, detenciones arbitrarias y hechos de agresión contra los manifestantes volvió a darse. Esta escena pinta de cuerpo la forma abusiva como han venido actuando los policías contra los manifestantes, lo cual no tiene nada de democrático.
Cabe mencionar que para las 11 de la noche del sábado 14 ya se habían registrado dos fallecidos producto de la represión policial. Por todo esto, es importante que exijamos juicio y castigo a los responsables políticos y materiales de todos estos actos brutales de represión policial.
