Mundialmente estamos atravesando tiempos complicados y es en esta época donde sobrevivir se convierte en un reto para millones de trabajadores, recrudeciéndose aún más la emergencia de salud cuando tienes que migrar ante la violencia, la precarización y la pandemia.
Viernes 16 de octubre de 2020
En medio de esta pandemia suceden muchas arbitrariedades, violaciones a derechos humanos y una serie de vejaciones sexuales que a veces pasan desapercibidas, por ejemplo, la situación que viven los migrantes como los sudamericanos y centroamericanos que salen de sus territorios en busca del sueño americano, atravesando la cruenta frontera de México hacia EE. UU.
Ante un gobierno xenófobo como el de Donald Trump, que aplica una política anti-migratoria para atacar a nuestros hermanos migrantes, también se lucra con esta situación, ya que están siendo retenidos por el Servicio de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés) por más tiempo en comparación con años pasados, con el propósito de mantener o aumentar la cantidad de presupuesto asignada a la agencia que otorga el gobierno en función de la cantidad de la población detenida, de acuerdo con el exfuncionario del ICE, Kevin Landy.
No se había incrementado tanto el tiempo de retención desde que comenzó la administración de Donald Trump, esto de acuerdo con los datos del ICE. Agregando también que más de 6,400 detenidos han contraído el COVID-19 en los centros de detención de la agencia en todo el país y que 8 de ellos perdieron la vida. Muchas personas han sido detenidas durante más de seis meses, por lo que se ha complicado su estado de salud debido a la pandemia, ya que existe el problema de hacinamiento, en condiciones insalubres, que imposibilita el distanciamiento social y dificulta el control de las infecciones por COVID-19 y otras enfermedades.
El tiempo que los inmigrantes pasaron en detención en Estados Unidos casi se triplicó a tres meses en septiembre de este año en comparación con septiembre de 2016, antes de que el presidente Donald Trump asumiera el cargo. El ICE también declaró que la crisis de salud ha retrasado los procedimientos de los tribunales de migración de EE. UU. y las revisiones de las solicitudes de asilo.
Es importante agregar que alrededor de la mitad de personas migrantes son detenidas y condenadas por delitos de inmigración en EE. UU. como cruzar ilegalmente la frontera varias veces o exceder el permiso de estancia en el país y delitos de tráfico, como conducir sin licencia o en estado de ebriedad, lo que les anula el permiso DACA (Acción Diferida para la Llegada de los Niños, por sus siglas en inglés).
Esta agencia con fines lucrativos ha participado al lado de la policía estadounidense en la persecución de manifestantes con el fin de detectar a migrantes ilegales y canalizarlos a sus centros de detención.
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En California, por ejemplo, el ICE explotó el hecho de que muchos inmigrantes estarían en casa debido a la cuarentena para realizar redadas, devastando comunidades y destruyendo la vida de las personas.
Mientras que, en sus centros de detención, ha rociado un desinfectante químico llamado HDQ Neutral hasta 50 veces al día con el pretexto de la pandemia, lo que dificulta la respiración de los detenidos. También ha habido informes de personas detenidas que experimentan quemaduras en la piel y sangrado debido a la sustancia química que también causa daño ocular.
Como se ve, existe un gran ataque de persecución hacia los migrantes, es claro que la pandemia se usa como pretexto para justificar la prolongación del tiempo de retención, mientras se lucra con la vida de cientos de personas a quienes se les destruye la vida y maltrata impunemente, donde el Presidente Donald Trump tiene gran responsabilidad por impedir el asilo de migrantes en EE. UU., cuando están unas próximas elecciones en puerta, lo que hace evidente su abuso de poder contra los migrantes para culparlos de la crisis económica que ha dejado a cientos sin empleo y con salarios ínfimos, creando una reputación y una ideología de derecha en el marco de su carrera electoral.
Relación bilateral entre Donald Trump y AMLO
Desde su ascenso hemos visto como el gobierno de la 4T ha negociado y cedido a las amenazas de Donald Trump, cuyo resultado ha implicado convertir a México en su muro, cuya principal función es impedir el cruce de las y los migrantes, estableciendo centros de detención para garantizar las deportaciones y el uso de la Guardia Nacional para impedir el paso de las caravanas migrantes en el país, así como el gobierno de Alejandro Giamattei en Guatemala que usó a las fuerzas armadas para echar a la caravana hondureña que salió por primera vez desde el brote de la pandemia, buscando escapar de la violencia, la pobreza, la marginación y muerte.
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No podemos seguir subordinados al gobierno xenófobo de Trump, ni avalar por ningún motivo la criminalización a las y los migrantes, el libre tránsito es un derecho humano, no perdamos de vista que estos trabajadores y sectores del pueblo empobrecido son orillados a migrar ante las duras condiciones que enfrentan.
Pronunciémonos conjuntamente contra el muro y todas las políticas antinmigrantes del imperialismo estadounidense que perpetúan nuestra opresión, no más lucro, ni negocio con la vida de nuestras hermanas y hermanos migrantes, esta es una demanda que mujeres, jóvenes, trabajadores en ambos lados de la frontera debemos recuperar en nuestras manos.
No debemos confiar en los republicanos y demócratas, ni en los gobiernos de ningún partido del régimen, necesitamos una alternativa política distinta que defienda realmente nuestras demandas, una voz que emane de nuestra lucha, sobre la base de la unidad de los trabajadores, las trabajadoras, obreros y obreras de toda América. Necesitamos confiar en nuestras propias fuerzas y luchar por una perspectiva internacionalista de la clase obrera.