150 asistentes en la obra de Teatro Cordones Industriales, del Colectivo Tarea Urgente en la Toma de Casa Central de la Universidad de Chile. Ante el suceso decidimos entrevistar a Victoria Hernández, actriz de la obra, que nos hablará de la obra en el actual contexto de movilizaciones.
Jueves 11 de junio de 2015
¿Qué los llevo a presentar la Obra Cordones Industriales en la Toma de Casa Central?
Varias cosas. En primer lugar como la obra tiene un mensaje de reivindicación histórica de un movimiento obrero, de empoderarse de los espacios, de luchar por sus condiciones laborales, creíamos que era una instancia muy propicia porque la universidad antiguamente también tenía una conexión más fuerte con el rubro de los trabajadores. Quizás hoy día se ha perdido, pero en ese tiempo la organización de los trabajadores era muy fuerte. Además creemos que toda instancia es positiva para hacer memoria histórica, más aún cuando la Casa Central simboliza un espacio importante de núcleo de movilización y en particular la crisis que hoy está sufriendo la universidad.
Quizás tiene que ver con la poca apertura que está viviendo hoy la sociedad, y la crisis de la universidad estructural responde a una crisis de país, porque la Universidad de Chile siempre tiene un doble de lo que sucede a nivel país. La extrema burocratización, la falta de un proyecto que tenga sentido y que se relacione con las demandas sociales. Esta segmentación en pequeños feudos que responden a sus necesidades locales sin una vinculación total, todo eso que sucede en la Universidad de Chile, sucede en el país también y es importante remecer al país ante esto.
¿Qué rol cumple el teatro para ti en las movilizaciones?
El teatro siempre es político, y nos permite distanciarnos de la realidad y observarla. En la realidad tú estás viviéndola entonces no tienes perspectivas del tiempo, ni de los sucesos que ocurren, ni de nada. El teatro te permite observar esa realidad, y también aprender del pasado, de las experiencias que no resultaron y valorar lo que si sucedió, para mí el teatro es una expresión muy poderosa que no solo permite la valoración del interprete o del creador de la obra , sino que también permite la posibilidad de pensarse distinto, imaginar que pueden suceder cosas distintas, y de viajar en el tiempo, de pensar que pueden ir hacia el pasado, hacia el presente, y tener contacto con una obra artística.
Dentro de las movilizaciones es muy importante, porque uno a veces se va en asamblea en asamblea, discusiones, análisis, como una cosa muy intelectual, muy racional, y el teatro te permite observar imágenes, sensaciones, un universo completo.
¿Cómo se vienen las movilizaciones para ti?
Este año para mi está sucediendo algo histórico, al menos para mí, de Basta Ya!. Hay un colapso de estas estructuras, que ya no da para más. Entonces se comienza a colar por distintos lados. En el caso de los profesores yo tengo un contacto directo porque estudié pedagogía, ejercí la docencia y sé lo que se habla cuando se habla del régimen laboral, de las condiciones, el sueldo, etc, etc, y me extraña que no haya sucedido antes porque es un asunto de explotación hacia los profesores, de desvalorización de su rol en la sociedad, de falta de apoyo desde el gobierno, desde todo el sistema. Qué bueno que por fin se organicen y dejen de tener miedo a ser despedidos, a lo particular que puede suceder con una persona, esta vez que se comiencen a pensar como un gremio nuevamente y hablen desde ahí .Esa es la forma de poder reivindicar la profesión docente y mejorarla porque los profesores son muy importantes, son una base de la sociedad. Los profesores no tienen una opción de reflexión o mejoramiento, porque tienen una jornada laboral que te supera, de 44 horas en aula. Los estudiantes se sienten parte de esas demandas también, saben que la educación gratuita no solo involucra a los estudiantes.
¿Qué le dirías a la gente?
Dejar de ser ingenuos, hay cosas que no van a cambiar, y hay cosas que si van a cambiar, tenemos que enfrentarnos a los problemas de manera activa, y no solo como un lugar de queja o de conformismo. Si no crear instancias de cambio a nivel micro y macro. Quizás no va ser una lucha que se gane hoy día, pero creo que hay algo y ese germen hay que trabajarlo y desde ahí ver cambios profundos.