Censura. Entrevista a la actriz Camila Sosa Villada

"El bello Indiferente", de Jean Cocteau, recorre la vida y música de Edith Piaf y Billie Holiday. Actualmente dirigida por Javier Van de Couter, en escena Camila Sosa Villada y Hervé Sagata, se puede ver en el Centro Cultural San Martín, viernes y sábados a las 21hs, y Domingos a las 20hs.

ID: ¿Cuál es el papel que más te gustó interpretar?

CSV: Hice un fragmento de Yerma en Carnes Tolendas, me encanta ese personaje. También el personaje de Nadia en Historia Clínica, un capítulo que se llamó El mismo amor, los mismos derechos, escrito y dirigido por Javier Van de Couter que trataba sobre la vida de Carlos Jáuregui. Igual con los personajes pasa lo mismo con el amor, uno considera al nuevo como el primer amor, aunque hubiera muchos antes.

ID: En una entrevista dijiste que querías despegarte de lo que la gente espera de vos. ¿Qué pensás que se espera de vos? ¿Cuáles son los principales obstáculos de tu carrera?

CSV: Mi nariz, mi manera de verlo todo al revés y de no poder transar con nada. Mi necedad. Mi profunda convicción de que hay otro camino que no es el más acostumbrado y que claramente no me está funcionando porque nunca llego a pagar el alquiler.

ID: A 3 años de la sanción de la ley de identidad. ¿Qué pensás que mejoró y qué pensás que todavía falta?

CSV: Creo que mejoramos como país. La idea de este país, al menos para la comunidad se hizo más amable, de repente se volvió un país maternal. Cambió la condición de l@s tr@ns frente al ámbito civil lo que en mayor o menor tiempo, abrirá la puerta a una condición que no cambió aún, que es la mirada de la mayoría sobre las minorías. Falta trabajo! Inclusión concreta al sistema laboral para lxs trxns.

ID: Sos una actriz respetada y un gran ejemplo de vida . ¿Cómo fueron tus inicios en el mundo artístico?

CSV: Empecé hace mucho con dos viejas amigas, a bailar y hacer sketchs en boliches de Córdoba, el grupo se llamaba Hembras. Luego en el Departamento de Teatro de la Facultad de Artes, allá en Córdoba, que es como el IUNA acá, hasta que en el 2009 presentamos Carnes Tolendas, que fue mi bautismo como actriz.

ID: ¿Qué pensás de los transfóbicos dichos de Lanata ? ¿Por qué pensás que tienen tanto espacio y difusión?

CSV: Lanata es un gordo malo que quiere a toda costa derrocar al actual gobierno y le pega con todo lo que puede. Al ser en este gobierno y no en otro, que se sancionaron leyes a favor de la comunidad, el pelotudo aprovecha y se da el lujo de sentenciar, de definir a los demás, con una autoridad que ni el mismo Lacan hubiera usado. Es sólo eso. Es un gordo cometravas que quiere pegarle al gobierno con lo que tiene a mano. Pienso que es un estúpido y una mala persona que predispone cada domingo, a un mal humor general tras la bandera de un periodismo independiente del que a veces dudo.

ID: Acerca de la censura en Facebook de aquella foto artística de la obra que protagonizás actualmente. ¿Qué se te viene a la cabeza con ese tipo de cosas?

CSV: La censura de la foto de El Bello Indiferente no es más que la idea de los demás de no tolerar otra idea de travestismo más que el que existe, prostitución y pobreza. No pueden creer que una travesti esté en el Centro Cultural San Martín y se dé el gusto de posar desnuda, con su cuerpo tal y como es, bajo un concepto artístico como lo es el de la foto que muestra a una mujer desnuda y armada con un cuchillo. Es el simple "no les da la cabeza y la tienen bien adentro". Es la idea de que hay personas a las que no le entran balas.

ID: ¿Qué nos podés contar de la obra El bello indiferente?

CSV: El Bello Indiferente es una película vista para hacerse en vivo. Un plano general de unos 50 minutos, dirigida con una meticulosidad y una obsesión que sólo un director de cine nato como Javier puede tener. Yo siento que actúo para un lente cruel. Donde correrse cinco milímetros de una posición puede perjudicarlo todo. Es también el diálogo entre ese método y esa tarea casi de orfebre del director con la fiebre de drama que me consume como actriz. Y es, sin exagerar, una de las razones más genuinas del drama: el amor no correspondido, la traición, y la idea de que el amor, a veces, también es una manera de intentar poseerlo todo del otro. Es además, la unión de Hervé, Javier y yo, que nos juntábamos a ensayar en la habitación del director al caer la tarde, cuando todos terminábamos nuestra tarea, sin tener idea de cómo íbamos a llevar a cabo el proyecto, pero sabiendo que íbamos a terminarlo.

ID: ¿Qué sentís cuando estas arriba de escenario?

CSV: Cuando estoy arriba del escenario entiendo la razón de mi vida.