El gobierno pretende valerse del ambiente de unidad nacional que le entrega el ambiente ad portas del fallo de La Haya para dar por superadas sus crisis, sin embargo y, con un buen o mal resultado hará falta mucho más para retomar la iniciativa en la agenda.
Domingo 30 de septiembre de 2018
Este lunes la Corte Internacional de Justicia en La Haya decidirá la controversia marítima entre ambos países que les tuvo en contienda por casi 5 años.
Lo que demanda Bolivia es que se establezca que Chile tiene la obligación de negociar con el país trasandino, por lo que además exigen que se declare que Chile a incumplido esta obligación por más de 100 años y finalmente requiere una mesa para discutir sobre la salida soberana al mar para Bolivia.
Esta controversia ha sido utilizada por los gobernantes de ambos países para responder sus crisis. El gobierno de Sebastián Piñera pretende hacer de este fallo un hito político que le permita retomar la iniciativa.
Es por esto la agitada agenda del gobierno y de la derecha para este fin de semana a la espera del fallo. Mientras que el único que viajará a Holanda a presenciar al fallo será el líder del equipo jurídico Claudio Grossman, ya que ni siquiera el Ministro de Relaciones Exteriores, Roberto Ampuero, se hará presente en La Haya.
Sebastián Piñera, por su lado, visitó este sábado la ciudad de Antofagasta, en donde, desde el muelle Melbourne&Clark y con la asistencia de unos pocos adeptos declaró “Los países honorables cumplen los tratados que firman”, refiriéndose al tratado de 1904.
Posteriormente finalizará esta gira express en la ciudad de Arica para dar un último mensaje previo al fallo.
Lo propio hará la alcaldesa de Antofagasta, Karen Rojo, la cual está llamando a enarbolar banderas y a ver en vivo la transmisión del fallo a través de una pantalla gigante que dispondrá en el muelle visitado por Piñera.
Todos estos actos no tienen más que otro objetivo que poner a la derecha a la ofensiva, sacudir el estupor y los datos negativos en las encuestas y retomar la iniciativa en base al ambiente de unidad nacional que le otorga el fallo.
Sea como sea el resultado del litigio, los grandes beneficiarios son los empresarios, bien sabemos que el resultado de La Haya jamás comprometerá nos negocios empresariales, por lo que el Grupo Luksic conservará su negocio portuario y ferroviario en Antofagasta.
Sin embargo, por más esfuerzo que hagan Karen Rojo (quien tiene juicios complicados en su contra que amenazan posiblemente su permanencia en el municipio) o Sebastián Piñera por retomar la iniciativa, no basta un fallo en tribunales europeos para borrar la indignación y las injusticias que vivimos en el país como la crisis ambiental en Quintero o los despidos y cierres de distintas fábricas.