Movimiento estudiantil. Estudiantes responden a rectora Devés: "No cerremos los ojos a la verdadera violencia de género"

Durante la mañana de este lunes 17 de junio un nuevo lienzo se presentó en el frontis de la casa central de la Universidad de Chile, respondiendo a las críticas y denuncias de las autoridades universitarias tras el lienzo anterior. "No cerremos los ojos ante la verdadera violencia de género", reza la frase junto a la imagen de la balanza de la justicia, pesando en un extremo a mujeres y niños palestinos masacrados por el genocidio del Estado de Israel contra el peso de una imagen de un político con un diario que enuncia "sátira política".

Recordemos que el sábado 8 de junio un gran lienzo apareció colgado en el frontis de la Casa Central, donde aparecía un dibujo de la autoridad universitaria recibiendo un beso del primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, emulando el mural que Dmitri Vrubel estampó en el Muro de Berlín en 1990 para reproducir el beso entre Leonid Brézhnev y Erich Honecker durante la celebración de los treinta años de la República Democrática Alemana. El lienzo iba acompañado de la frase: “A romper la relación sionista, 76 años de colonización, 80% de la población desplazada, 40.000 muertos en 8 meses”.

Las reacciones fueron inmediatas de parte de las autoridades universitarias, la prensa empresarial y oficial de los medios masivos de comunicación, como también desde el gobierno de Gabriel Boric a través de las declaraciones de la ministra de la Mujer y Equidad de Género, Antonia Orellana (CS), la ministra vocera de gobierno Camila Vallejo (PC) y el propio presidente, Gabriel Boric (CS).

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Sin embargo, las y los estudiantes movilizados junto a funcionarios y académicos no callaron su postura ante las acusaciones de sexismo y violencia simbólica. Se trata de la utilización del discurso feminista y de los estudios del género para desviar las demandas centrales de las y los estudiantes movilizados. Las y los estudiantes acusan el uso del poder de la rectora, quien hoy pasa por alto el genocidio palestino a través de la utilización de los convenios con las universidades de Israel.

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