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Red Internacional
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Ciencia. Estudio revela por primera vez cómo el LSD modifica la actividad cerebral

Investigadores del Imperial College de Londres, junto a la fundación Beckley han publicado este estudio que rompe una barrera de 50 años de prohibición al estudio del LSD.

Jueves 21 de abril de 2016

Para el revolucionario estudio, 20 voluntarios evaluados como sanos física y psicológicamente, fueron inyectados aleatoriamente con placebo o 75 microgramos de LSD, y luego su actividad cerebral fue medida con scanners.

Los resultados han demostrado cómo la substancia activa numerosas partes del cerebro y no solo eso, sino que además interconecta funciones que normalmente no se tocan.

El ejemplo más claro de esto es cómo la visión, normalmente controlada desde el córtex visual, ahora se conectaba con muchas más áreas, generando patrones visuales parecidos a los del estado de sueño, así como la posibilidad de recibir estímulos visuales aún con los ojos cerrados, es decir, ver lo que se imagina.
El estudio abre la puerta a un nuevo campo de comprensión sobre los efectos de las substancias psicodélicas y su acción sobre el cerebro, que los científicos comparan con el estado de una mente infantil, más plástica y libre de restricciones, en donde el cerebro también se ve mucho más activo.

El LSD, sintetizado por primera vez en 1938 por el químico suizo Albert Hoffman, quien buscaba derivados del hongo del cornezuelo del centeno o ergot para ser utilizados en la industria farmacéutica, ya tenía un historial de uso en psiquiatría, con resultados exitosos en el tratamiento de adicciones y depresión. En la década de los ’50 y ‘60 los laboratorios Sandoz presentaron el LSD como una droga apta para diversos usos psiquiátricos. Muchos psiquiatras y psicoanalistas de las décadas de 1950 y 1960 vieron en ella un agente terapéutico muy prometedor y una sustancia revolucionaria que podía facilitar la comprensión sobre el funcionamiento de la conciencia.

Esta revolución de la neurociencia, sin embargo, se vio truncada en 1966 cuando el LSD fue prohibido definitivamente, ilegalizando todos sus usos, tanto medicinales como recreativos y espirituales. La sustancia fue tipificada con la categoría de "Schedule 1" (la misma categoría que según la DEA tiene la heroína, el ecstasy, la metaualona –los famosos “quaaludes”- y el peyote). Es decir, se considera de alta probabilidad de abuso, que no se puede considerar segura bajo supervisión médica, además de aseverar que la sustancia no posee interés científico o médico, por lo que se prohíbe también su uso experimental.

En Estados Unidos, esta prohibición fue un antecedente de lo que sería la "Guerra contra las drogas" del gobierno de Nixon, que tras una campaña de desinformación, acabó con casi 30 años de uso del LSD en psiquiatría.

El LSD, sin embargo, no cumple ninguna de las tres características para ser tipificado en la categoría “Schedule 1”: Es una sustancia que no provoca adicción, y su propio efecto genera tolerancia (una segunda dosis inmediata no causará efecto), no existe una LD50 (dosis letal) conocida para el ser humano y no hay ningún caso registrado de sobredosis en 78 años desde su descubrimiento. Por último, su potencial científico y médico está altamente demostrado en investigaciones durante las décadas de los ’40, ’50 y ’60, así como los de una nueva generación de científicos que están estudiando alucinógenos como la Psilocibina y el LSD en el tratamiento de la depresión y la angustia en pacientes con cáncer terminal.

Actualmente, la llamada “guerra contra las drogas” se ha transformado en la política represiva más costosa de los EE.UU., que ha disparado las tasas de población carcelaria, y los propios agentes que la impulsaron, como John Ehrlichman (jefe de políticas de interior del gobierno de Nixon), reconocen en la actualidad que la “guerra” fue una excusa para criminalizar a la población negra y a la juventud hippie. Declaraciones que sólo confirman denuncias de personas como Matthew Fogg, ex agente de la DEA, quien denunció que entre sus instrucciones estaba en no implementar la "guerra contra las drogas" en barrios blancos.

Leer estudio completo [aquí-http://www.pnas.org/content/early/2016/04/05/1518377113.full]

*Fuente: LaIzquierdaDiario.cl