Frente a la crisis diplomática con el país vecino, el pasado 31 de marzo, el ex Ministro de Defensa, Jorge Ledezma, fue destituido y reemplazado por el ex candidato a gobernador de Santa Cruz, Reymi Ferreira.
Juana Runa Militante de la LOR-CI y de Pan y Rosas
Jueves 2 de abril de 2015
La destitución se produjo mientras Ledezma entregaba ayuda humanitaria para el norte chileno que quedó virtualmente arrasado por las intensas lluvias y aludes que se produjeron en el desierto de Atacama. Esta ayuda consistía en la entrega de 13 mil litros de agua llevados desde Bolivia a Chile en un avión militar. Durante la entrega el representante boliviano lucía un chaleco con una leyenda alusiva al reclamo marítimo boliviano, que decía “el mar es de Bolivia”. Esta actitud evidentemente provocó malestar en los círculos políticos chilenos que cuestionaron el “aprovechamiento” de una situación de crisis humanitaria por parte de la autoridad boliviana.
Inmediatamente Evo Morales pidió disculpas a las autoridades y al pueblo chileno por la actitud del ministro a la que calificó de autónoma “Lamentamos mucho lo que ha pasado, no es parte de decisión del Gobierno nacional, quiero decirles nuevamente acá no hay ministros autónomos, aquí es un equipo político y trabajamos de forma conjunta, aquí no se toman decisiones personales”.
Como se recordará Bolivia tiene una demanda planteada en la Corte Internacional de Justicia de la Haya (CIJ) exigiendo al Estado chileno establecer relaciones para discutir una salida soberana al pacífico, así como el cumplimiento de los tratados internacionales que según el gobierno boliviano no se estarían cumpliendo como es el caso del paso fronterizo de Tambo Quemado donde empresarios bolivianos, choferes de transporte pesado afirman sufrir el acoso, la retardación y la obstaculización del paso por parte de las autoridades fronterizas chilenas.
