Mediante un comunicado, las y los estudiantes de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Concepción expresaron su repudio a lo dicho por parte de sus autoridades universitarias para desarticular las movilizaciones estudiantiles.
Sábado 15 de junio
A continuación, reproducimos el comunicado es la Federación de Estudiantes de la Universidad de Concepción:
A la comunidad universitaria de la Universidad de Concepción a la comunidad penquista, a la región del Bío Bío y a la sociedad plurinacional de nuestro Chile:
Desde la Federación de Estudiantes de la Universidad de Concepción (FEC) nos encontramos preocupados por el autoritarismo y el absoluto menosprecio que demuestran las autoridades universitarias al estamento estudiantil. Ni siquiera bajo la dirección de los sectores conservadores se había visto las actitudes autoritarias de la administración actual de la UdeC, supuestamente de tendencia progresiva.
Junto con al desconocimiento absoluto del resultado de la reforma de estatutos que buscaba avanzar tímidamente en la democratización de nuestra casa de estudio, surge el total desconocimiento de las decanaturas de las facultades y carreras movilizadas, hacia los representantes del estudiantado que son mandatados para la negociación.
Hace unos días fuimos testigo/as de cómo la decana de la facultad de medicina llegó una hora tarde a una mesa de negociación con el Centro de Estudiantes de Obstetricia, así como también intentó maniobrar en contra de la movilización por parte de la decana de la Facultad de Educación, en vez de buscar llegar a un acuerdo para resolver las problemáticas que aquejan a los estudiantes de su facultad.
Sin embargo, hemos quedado estupefactos/as con el artículo de la vicerrectora Paulina Rincón González, publicado por El Mostrador; quien no sólo equipara el genocidio del que son víctima los palestinos por parte del Estado de Israel con una acción particular de un grupo militante de la nación Palestina, sino que instrumentaliza el feminismo, los estudios del género y la lucha de las compañeras que han demandado igualdad desde las calles. Para ello, la ahora célebre vicerrectora de la UdeC, busca criticar y caracterizar como "violencia de género" una representación satírica realizada en la UCH por estudiantes en una movilización contra el genocidio palestino.
Por alguna razón, la autoridad de nuestra casa de estudios no considera las declaraciones del Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, quien ha calificado como "castigo colectivo" las acciones del Estado de Israel, o las numerosas veces que las Naciones Unidas han calificado como apartheid el régimen de ocupación de los territorios palestinos. No se consideran las declaraciones de Francesca Albanese, relatora especial de la ONU, quien califica de genocidio las acciones sionistas, así como los informes del Observatorio de Derechos Humanos, de Amnistía Internacional y la solicitud de fiscalía en la Corte Penal Internacional para que se dicte la detención del primer ministro de Israel Benjamín Netanyahu como criminal de guerra.
A pesar de su falso discurso feminista, no hace ninguna referencia a las decenas de miles de mujeres asesinadas desde el 7 de octubre en Gaza. Lo más contradictorio es que apela a relación con las universidades con Israel, pero nada se dice de las instituciones universitarias bombardeadas y destruidas por el ente sionista.
Todo esto nos hace preguntarnos ¿Cuáles son los intereses de la UdeC con el Estado de Israel que los hace capaces de defender el apartheid y un genocidio?
Nuestra sospecha es que debido al autofinanciamiento que deben buscar las instituciones universitarias en un contexto de educación mercantilizada, simplemente intentan legitimar la defensa de los financistas privados, o de otros Estados, en la medida de que aporten con recursos económicos en la institución. Esta situación lamentable hace que las autoridades de nuestra casa de estudios se vuelvan cómplices del genocidio en curso en medio oriente.
Por nuestra parte, exigimos que nuestra universidad transparente los convenios con el Estado genocida de Israel, y ponga fin a estos como forma de demostrar su compromiso irrestricto con la defensa de los Derechos Humanos. No podemos permitir que, bajo la lógica mercantil del autofinanciamiento de la institución, simplemente se haga la vista gorda del genocidio que se está realizando en Palestina. Repudiamos las actitudes negacionistas de la vicerrectora Rincón, así como su instrumentalización del movimiento feminista. Si la UdeC fuera una institución pública de verdad, podríamos adquirir esta información a través de la "Ley de transparencia", no obstante, por ser una Universidad Privada, no se acoge a esta iniciativa y debemos exigirlo solo a través de la presión del estudiantado.
Hacemos un llamado a las autoridades a estar del lado correcto de la historia, si no tarde o temprano esta los juzgará por su complicidad pasiva con el asesinato criminal y en masa de miles de civiles, mujeres y niños. Si las potencias occidentales no son capaces de imponer sanciones a Israel para que detenga la masacre, debido a que esto afectaría sus intereses geopolíticos, entonces es la sociedad civil la que debe tomar la iniciativa. Es por esto que apoyamos la iniciativa del estudiantado de la Universidad de Chile que cuestiona a su rectora por no dar el ejemplo y ser cómplice pasiva de los nuevos nazis del siglo XXI (sionismo).
Exigimos al gobierno de Chile romper las relaciones diplomáticas y comerciales con los supremacistas sionistas en el Estado de Israel.
Hacemos un llamado a las autoridades para que atiendan las demandas del estudiantado de la UdeC, puesto que estas reflejan problemas reales que deben ser atendidos de forma urgente. De la misma forma que exigimos respeto de estas autoridades hacia el estamento estudiantil si es que aún existe algún tipo de vocación democrática por parte de ellos.
Barrio Universitario, Junio 2024.