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Red Internacional
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Femicidio: El último eslabón de la violencia en el capitalismo

El último 8M, la fuerza de miles de mujeres, jóvenes y diversidades sexuales llenaron las calles a nivel nacional e internacional. Sin embargo, solo en lo que va del año, tenemos una cifra estremecedora de femicidios.

Viernes 10 de mayo de 2019

Según las cifras detectadas por el Ministerio de la Mujer y Equidad de Género, al 8 de mayo se han registrado 17 femicidios consumados y 35 femicidios frustrados, sin considerar una cifra que permanece en negro ya sea porque no fue categorizado como “femicidio” o porque simplemente no se denunció.

¿De dónde viene la violencia?

La reproducción de la violencia machista que termina en terribles casos como el reciente de Estefanía Martínez en Santiago o de una funcionaria municipal en Arica, tiene completa relación con la situación actual de las mujeres y diversidades sexuales en un sistema capitalista y patriarcal, donde el Estado y sus instituciones, como la justicia, son completamente incapaces de frenar la violencia. En este sentido, es clave problematizar el porqué de esta incapacidad, en donde el sistema capitalista tiene mucho que ver.

Para este sistema las mujeres y las diversidades sexuales tenemos un estatus social de segunda categoría, especialmente las que pertenecemos a la clase trabajadora, somos peor pagadas y estamos más sujetas al trabajo precario, y que podrá aumentar con las reformas que pretende este gobierno.

Adicionalmente, las instituciones del Estado también reproducen esta violencia, sea mediante la represión policial, en donde las mujeres y diversidades sexuales que luchan por sus derechos son reprimidas, con la Iglesia que se opone al aborto o a la adopción homoparental, o la misma justicia que reduce a la esfera de la responsabilidad de un individuo aislado un problema que es estructural.

Es clave preguntarse entonces ¿Quiénes son los responsables de que, a pesar del gran 8M, del mayo feminista y de las ‘multas’ por acoso (que es un proyecto recientemente aprobado), la cifra de femicidios sigue en aumento?

No está demás decir que la mayoría de los femicidios se producen con existencia de denuncias previas, que se resumían en ordenes de alejamiento o que formaron parte del ultimo eslabón de la violencia económica, precarizante y patriarcal.

El estado es responsable, junto con los empresarios y la iglesia de que se mantenga y se sostenga un sistema completamente desigual en desmedro de las mujeres y las diversidades sexuales.

En este sentido es clave avanzar hacia un plan de emergencia que como decíamos en esta nota“garantice de mínima, viviendas, refugios transitorios y casas de acogidas estatales costeadas mediante impuestos a las grandes empresas inmobiliarias, licencias laborales y que el Estado se haga responsable de crear planes de empleo para que las mujeres puedan trabajar y así independizarse económicamente de sus agresores”.

Esta exigencia al Estado va vinculada completamente al gobierno de derecha y los empresarios, quienes han volcado sus fuerzas y recursos en la ejecución de las reformas estructurales que apuntan a precarizar las condiciones de vida de la clase trabajadora (como la reforma previsional, que sostiene pensiones miserables; la reforma laboral, que disgrega la organización sindical) con las consecuencias que traerá para las mujeres y las diversidades sexuales, precarizandoles aún más.

Es preciso entonces, que con la fuerza del 8M, la mujeres, los jóvenes y la clase trabajadora tomemos la demanda por una ley de emergencia, incorporándola en nuestras discusiones y pliegos, para frenar las reformas precarizadoras, la violencia machista.


Fer Morales

Antropóloga Social y poeta Slam