Cientos de estudiantes nos encontramos en Plaza de Mayo, para acompañar las clases publicas que impulsaron las gremiales docentes universitarias.

Brenda Hamilton Profesora de Historia (UBA). Integrante del Comité Editorial del suplemento Armas de la Crítica.
Sábado 25 de agosto de 2018
En nuestras facultades nos venimos organizando por el triunfo de la lucha docente y por la defensa de la educación pública en su conjunto. Esta semana hubo asambleas interclautros en el Ciclo Básico Común y también en las carreras de Filosofia y Letras de la UBA.
Desde la conducción del Centro de Estudiantes de Filosofía y Letras (CEFyL) queremos potenciar este movimiento que por abajo esta empezando a ponerse de pie nuevamente, tanto por el triunfo de la lucha docente como en defensa de la educación pública en su conjunto.
En ambos encuentros que hicimos estudiantes y docentes vimos que cuando nos unimos y coordinamos podemos forjar una fuerza imparable. Por eso llegamos a la conclusión de que era necesario en este momento impulsar asambleas interfacultades para pelear de conjunto en toda la UBA.
También abrir instancias desde los cursos y las bases de las facultades para que nuestra organización se fortalezca. La universidad de Buenos Aires es la más grande e importante del país. Cuenta con 300.000 estudiantes y miles de docentes.
Tratamos de imaginarnos hasta donde podríamos llegar si nos proponemos romper decididamente el cerco mediático, que hablando de cualquier otra cosa, trata de ocultar lo que el gobierno esta haciendo con nuestras universidades de la mano del FMI. Por eso llegamos a la conclusión de que teníamos que aprovechar la jornada de clases públicas del día de hoy, porque estudiantes de distintas facultades nos íbamos a reunir para bancar a nuestros docentes.
Refrendando lo que se habia votado en la asamblea del martes en el CBC de Filosofia y Letras, el miércoles el CEFyL voto llevar adelante las asambleas en Plaza de Mayo entre las distintas facultades. Eso nos permitió debatir, conocer las realidades de cada sede, y mantenernos en contacto. Allí votamos la consigna: "Plata para educación, no para la deuda externa ni para financiar a la Iglesia".
En ambos turnos, a las 13 y después a las 19, se propuso hacer acciones que vayan en el sentido de visibilizar la fuerza que tenemos, ganando las calles. Cuando terminaron las clases publicas, entre cientos de estudiantes votamos salir enfáticamente hacia el obelisco para que los medios no nos puedan seguir ocultando. A coro cantábamos "Ahora que estamos juntxs. Ahora que si nos ven. El ajuste del gobierno se va a caer, se va a caer. Estudiantes y docentes vamos a vencer, vamos a vencer."
Ahora nos queda la tarea de hablar con nuestros amigos y compañeros de cursada para ser millones el próximo 30 de agosto marchando a la histórica Plaza de Mayo, que es el centro nacional del poder político. Siguiendo organizados en cada una de las sede de la UBA en las comisiones de base y de difusión que ya estamos impulsando en muchas facultades. En Filosofia y Letras realizaremos una próxima asamblea el día martes, donde votaremos un nuevo plan de lucha para la semana, que incluye la propuesta de tomar la facultad en el marco de esta lucha que venimos llevando adelante.

Brenda Hamilton
Profesora de historia (UBA). Miembro del comité editorial del suplemento Armas de la Crítica.