Ayer se anunció que mañana lunes se retomaría el diálogo, seguido del fin de la huelga de hambre. El Gobierno retrocede de su “congelamiento” del diálogo, pero no es seguro que ese retroceso signifique un avance para los trabajadores.
Nicolás Miranda Comité de Redacción
Lunes 4 de abril de 2016
Se caldean los ánimos, falla la ofensiva del Gobierno
La semana terminó con la prepotente ofensiva del Gobierno “congelando” el diálogo, anunciando los descuentos y nuevas querellas, todo acompañado de una dura represión en las calles, que incluyó la detención del vicepresidente nacional de la CUT Nolberto Díaz, en la jornada de movilizaciones del viernes 1.
Es fue otro día de movilizaciones a pesar de esa política del Gobierno. Hubo corte de la ruta C-35 que une Copiapó con Tierra Amarilla, a la altura de La Florida; corte de la ruta-5 que une Copiapó con Tierra Amarilla en el sector de El Polvorín, y del a Candelaria; nuevas marchas en Copiapó, con concentración frente a la Intendencia, que concluyó nuevamente con represión y 5 detenidos incluido Nolberto Díaz.
El rechazo a la represión es creciente entre la población.
Además. El mismo viernes, uno de los huelguistas de hambre sufrió una descompensación.
La ANEF de Valparaíso declaró su solidaridad con sus pares de Atacama, ya anunciaron que mañana lunes discutirán una posible paralización en solidaridad.
El ambiente se fue caldeando más y más, la ofensiva del Gobierno no logró su objetivo.
Aumenta la presión
Distintas voces se suman a la preocupación por esta situación.
En el Gobierno se vuelven a mostrar divisiones. El Seremi de Gobierno, Jorge Hidalgo llamó a todos a dejar la violencia de lado e iniciar una etapa de conversación. El Gobernador de la Provincia de Copiapó Mario Rivas, denunció que Carabineros tiene orden de actuar solos. El Intendente Miguel Vargas, en medio de los rumores sobre su renuncia, se acercó a la Catedral para hablar con los huelguistas de hambre. Nuevamente la diputada DC Yasna Provoste demandó al Gobierno una solución y retomar el diálogo. La derecha busca sacar provecho y la UDI con su diputado Ward presentaron un proyecto de ley por el “Bono Atacama”.
Un buen indicador de lo serio de la situación, es que la Iglesia decidió intervenir. En una carta con la firma del obispo de Copiapó monseñor Celestino Aós, el secretario Canciller y párroco de la Catedral Rodrigo Herrera, y el asesor de la pastoral de los trabajadores Guido Castagna, llaman a retomar las mesas de diálogo.
Un retroceso del Gobierno
Después de su prepotente ofensiva, fracasada como vimos porque solo caldeó más los ánimos, y sumó presiones en contra de sus propias filas y aprovechamiento de sus opositores de derecha, el Gobierno debió retroceder.
Después de visitar a los huelguistas de hambre el Intendente anunció que retomaría el diálogo, y aquellos decidieron terminar con su huelga de hambre.
¿Se abren una posibilidad de llegar a acuerdos?
No es seguro.
¿Echando paños fríos?
El Gobierno, no dio señal alguna de cambiar sus propuestas originales.
La dirigencia da algunas señales como echando paños fríos para enfriar las cosas.
El dirigente de la ANEF Luis Santoni realizó dos afirmaciones que llaman la atención. Una, “explicar” al Intendente, al afirmar en entrevista al diario El Chañarcillo que “cuándo los cargos son designados lamentablemente no pueden hacer nada, al final sirven como correos de información desde los central a lo regional. Entonces el tema es que las autoridades no tiene autoridad y ahí está el problema del centralismo y lamentablemente él debe hacer ese trabajo y en este momento llevarse todas las burlas y pedidas de su cargo”.
La otra, una movida compleja. “Como organización debemos hacer un mea culpa en el sentido que nuestra idea siempre desde el día uno ha sido la lucha por que Atacama reciba los beneficios que se firmó en el protocolo de Atacama. El Bono es un tema anexo y que sólo compete a los funcionarios públicos”, señaló el presidente de la ANEF Atacama.
Es cierto, y permite seguir ganando nuevos aliados en la Región, pero puede perder el motor del Bono que sostienen día a día los miles de trabajadores públicos.
¿Cómo conseguir todas las demandas del protocolo de Atacama y atraer nuevas fuerzas? Sumarlas a la movilización, llamando desde asambleas de base a que llamen a paralizar y movilizarse las organizaciones estudiantiles como la FEUDA con un paro estudiantil indefinido; a los sindicatos mineros como la CTC; a los sindicatos portuarios como la Unión Portuaria; a los sindicatos de los trabajadores industriales, del comercio y los servicios; a los pescadores artesanales.
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