El hijo de la presidenta de la República es investigado por presuntos delitos de estafa y emisión de boletas falsas.
Domingo 3 de diciembre de 2017
Fotografía: Agencia Uno
El fiscal regional de O’Higgins, Emiliano Arias investiga a Sebastián Dávalos Bachelet por presunta estafa y boletas falsas. Esto, tras la querella interpuesta por el empresario Gonzalo Vial Concha, quien denuncia haber pagado cerca de mil millones de pesos a Caval por informes posiblemente plagiados.
El 13 de abril de 2015, Dávalos reconoció que realizó labores paralelas para la Dirección General de Relaciones Económicas Internacionales (Direcon) y para la sociedad en la que es parte su esposa Natalia Compagnon, en el primer semestre de 2012.
La declaración del pasado 29 de noviembre del socio de Caval, Mauricio Valero, en la que señala que las glosas de las boletas emitidas por el hijo de la presidenta, por 10 millones de pesos, fueron determinadas como asesorías comunicacionales por orden de Compagnon, según lo que consignó El Mercurio este sábado.
Todo esto ocurre en circunstancias que la nueva defensa del hijo de la presidenta, solicitara su sobreseimiento en la causa principal, por negociación incompatible, tráfico de influencias, uso de información privilegiada y cohecho, delitos por los que no ha sido formalizado.
A días de la segunda vuelta presidencial, un flaco favor le hace el hijo de Michel Bachelet a la Nueva Mayoría, pero también al conjunto de las instituciones, que han se han visto fuertemente deslegitimadas. Así se expresó con la alta abstención en la primera vuelta y que podría profundizarse en el balojate que enfrenta al Chile heredado de la dictadura, de la transición pactada, de la medida de lo posible, dejando fuera de la contienda las consignas que demanda la clase trabajadora, los estudiantes, la juventud, las mujeres o el pueblo Mapuche.
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