La localidad hoy fue noticia nacional por la alta tasa de positividad en los test de COVID 19. También advierten la presencia de la cepa Manaos. Con un 90% de ocupación de camas de terapia y trabajadores de la salud desbordados, el distrito entra en el peor de los escenarios.
Viernes 16 de abril de 2021 19:47
Los móviles nacionales de TN y C5N se acercaban en horas de la mañana a Florencio Varela, alertados por el récord en la tasa de positividad exhibido. Según informaban, los datos cargados por el gobierno en el portal "Sala de situación" indicaban que entre el martes 6 de abril y el lunes 12 se hicieron 2.496 test, resultando de ellos 2.351 casos positivos, lo cual arroja un 94% de positividad. Además, advertían la presencia de un caso positivo infectado con la cepa de Manaos.
Rápidamente, el intendente Andres Watson salió a desmentir en una entrevista en FM Delta la información publicada, tomando como variable de análisis el día anterior. "El porcentaje de positividad fue del 53% en el día de ayer, con 352 casos sobre 700 hisopados, pero varía entre el 50 y 60% máximo".
Se tome una medición u otra, en ambos casos estamos hablando de un índice de positividad preocupantemente alto, teniendo en cuenta que recién estamos en el mes de abril, sin las olas de frío invernales que agravarán necesariamente la situación.
Estos datos alarmantes son, lamentablemente, los de gran parte del AMBA. Los datos indican que, en total, en 18 de los 35 distritos la positividad esta presentando porcentajes por encima del 50%, en una muestra clara de que la falta de testeos es hoy un problema de primer orden.
El Hospital "Mi Pueblo" de Florencio Varela cuenta con solo seis camas de terapia intensiva para 500.000 habitantes. En el día de hoy han agregado una cama más a terapia, quizás para no tener que informar ya un %100 de ocupación.
Ante esta situación extrema, las autoridades están planteando derivar pacientes al UPA, decisión que se toma meses después de que los gobiernos nacional y provincial hayan vaciado el hospital modular del distrito, dejando en la calle a los trabajadores de la salud tercerizados y precarizados que ahí se desempeñaban. Esos hospitales modulares, en verano, fueron reacondicionados como oficinas de funcionarios.
Lejos de estar "relajados", los trabajadores de la salud hoy se encuentran desbordados, arriesgando sus vidas todos los días por salarios que en muchos casos no les permiten cubrir la canasta familiar. Como vienen denunciando desde hace meses, el estado les está negando el derecho a hacer uso de sus licencias, obligándolos a seguir trabajando sobre cargados de tareas después de un año durísimo. Lamentablemente, el Hospital "Mi pueblo" ha tenido que contar varias muertes de trabajadores por COVID 19 en el último año.
Sin ningún plan de inversión en salud pública a la vista, sin testeos suficientes, sin la mínima intención de crear puestos de trabajo en el sistema sanitario, los gobiernos apuestan al discurso de la "responsabilidad individual" como única salida. Lo plantean mientras los grandes empresarios de la salud privada y las farmacéuticas siguen haciendo negocios extraordinarios con el estado gracias a la pandemia. Mientras tanto, el número de casos y fallecimientos crece día a día, millones de trabajadores viajan hacinados en el transporte público a sus trabajos, aumentan todos los días los precios de los productos básicos y crecen los despidos.
En un distrito en el que tres de cada cuatro trabajadores son precarizados, informales o desocupados, el sistema de salud pública en el contexto de la pandemia cumple un rol central. Se torna urgente un plan de test masivos, liberación de las patentes para un plan de vacunación para la mayoría de la población, presupuesto para infraestructura en los hospitales, camas, respiradores, salario igual a la canasta familiar e incorporación de personal al sistema sanitario.
Los sindicatos tienen que romper su integración al gobierno y organizar a las y los trabajadores por estas demandas. Los esenciales en lucha de Neuquén, que se organizan en defensa de la salud pública, hoy están mostrando el camino.
Los gobiernos nacional, provincial y municipal ya dieron sobradas muestras de cuales son sus prioridades. Solo los trabajadores coordinando en unidad con otros sectores en lucha podrán llevar adelante estas demandas urgentes, que hacen nada menos que a la vida de millones.
En el AMBA, el Encuentro de Coordinación de las Luchas que se llevará a cabo este sábado 17 de abril en Madygraf es el punto de apoyo para esa coordinación. Allí participarán, junto a los esenciales de la salud, comisiones internas de fábricas, tercerizados, precarizados, trabajadores despedidos que luchan por su reincorporación, familias que pelean por tierra y vivienda, docentes y estudiantes, entre tantos otros.
Te puede interesar: En MadyGraf.17 de abril: Encuentro de Coordinación de las Luchas del AMBA
