La justicia chilena acaba de dejar libre a Francisco Toledo Puente, quién estaba condenado con una pena irrisoria por su responsabilidad en el asesinato de Rafael Vergara Toledo.
Domingo 19 de febrero de 2017
Francisco Toledo Puente estaba detenido en Punta Peuco, pero fue dejado en libertad condicional por el Tribunal de Alzada, tras cumplir escasos años seis años de pena, de una condena irrisoria de siete.
En la misma línea que viene implementando la justicia, otro violador de los derechos humanos queda libre.
Esta política viene siendo avalada por la derecha y sectores de la Nueva Mayoría, que están intentando imponer un nuevo punto final para los crímenes de lesa humanidad.
Los hermanos Rafael y Eduardo Vergara Toledo fueron ejecutados el 29 de marzo de 1985 por una patrulla de carabineros. En su momento, los carabineros usaron la excusa de un enfrentamiento, como era habitual en los montajes que creaba la dictadura para intentar esconder sus crímenes. A Eduardo lo mataron de un tiro en el corazón, mientras que Rafael, herido, es subido a un furgón, donde lo ejecutan.
La familia ha denunciado una vez más a la justicia y el régimen, por la impunidad del caso. Sienten dolor e impotencia, también rabia. Están cansados y hastiados de una justicia que jamás llegó, que es una burla. Señalan que la justicia continúa siendo la misma desde la dictadura y que todos los gobiernos posteriores han intentado salvaguardar a los militares y la policía.
Critican también las desigualdades de la justicia, que deja libre a los poderosos, y condena a los pobres.
