El viernes 13 de abril, el alto tribunal de Estado Unidos emitió una “suspensión administrativa” hasta el miércoles para revisar más a fondo la decisión de un tribunal inferior que prohibió una semana antes el uso de mifepristona, un medicamento utilizado para interrumpir embarazos, uno de los métodos de mayor uso para este tipo de procedimientos en el país, que se prescribe junto a otro fármaco, el misoprostol.
Gloria Grinberg @GloriaGrinberg
Martes 18 de abril de 2023 12:49
El juez conservador deTexas, designado por Trump Matthew Kacsmaryk fue quien emitió la semana pasada el fallo que prohíbe la utilización del fármaco. No existe un antecedente judicial que anule este tipo de resoluciones médicas de la Administración de Alimentos y Medicamentos.
Mientras tanto, las clínicas y personal dicen que podrían utilizar sólo el misoprostol, pero el uso de un solo fármaco es un poco menos eficaz para interrumpir los embarazos.
La demanda para prohibir este medicamento de uso popular fue presentada por Alliance Defending Freedom (ADF), una asociación cristiana ultra conservadora de los Estados Unidos, cuyo fin es extender las prácticas cristianas en las escuelas públicas y en el gobierno; tiene su sede en Scottsdale (Arizona), con sucursales en Washington D.C. y Nueva York, entre otros. Su sede internacional, se encuentra en Viena, y opera en más de 100 países.
La ADF, también estuvo involucrada en el caso que llevó a la anulación de Roe v. Wade., cuyo fin es ilegalizar el aborto y atacar a las personas LGBTQ y las diversidades, atacando sus derechos y sus conquistas.
Este tipo de organizaciones siguen avanzando sobre los derechos de las mujeres y las diversidades, con un peso decisivo sobre la Corte Suprema de Estados Unidos, que anuló el fallo Roe Vs. Wade, y dio lugar a la anulación del derecho al aborto y a toda la reacción conservadora.
Mientras estos ataques siguen en curso, en varias regiones de Estados Unidos, se realizaron manifestaciones por el derecho al aborto durante el fin de semana.
En los últimos años se viene sucediendo un avance de los sectores más reaccionarios en contra de los derechos de las mujeres y de las diversidades, reflejado en uno de los ataques más importantes que fue la anulación del fallo Roe Vs. Wade. Ninguno de los gobiernos demócratas ni republicanos en los últimos 50 años quiso legalizar efectivamente a través de una ley con rango constitucional el derecho al aborto, y fue dejado en manos de la Corte Suprema, un organismo completamente antidemocrático, que corre distinta suerte según el gobierno de turno que son quienes eligen a los integrantes, en este caso, una corte conservadora puede ir en contra de los derechos conquistados en las últimas décadas.
Como señalan las organizaciones sociales que defienden los derechos de las mujeres y las diversidades, si bien en este caso la Corte Suprema falló de forma positiva, suspendiendo temporalmente la resolución del juez de Texas, los derechos deben defenderse en las calles así como se debe enfrentar la reacción conservadora.