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Red Internacional
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La deuda es con la educación. Frío en escuelas de Bahía Blanca: "Decidimos organizarnos familias, estudiantes y docentes"

La falta de calefacción se hace sentir en las aulas, las y los estudiantes toman la delantera. Busquemos una salida de conjunto, fortaleciendo las asambleas y la unidad de trabajadores, familias y estudiantes para enfrentar el ajuste. Testimonios de la movilización e ideas para organizarnos desde abajo.

Jueves 8 de junio de 2023 22:07

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A principio de marzo, la ola de calor desnudaba la crisis edilicia de las escuelas de la provincia, ahora entrando a junio, nuevamente las escuelas muestran sus falencias. Los primeros descensos térmicos del año fueron dejando al desnudo la implacable política de recortes que el gobierno de Kicilof impone sobre las escuelas bonaerenses.

La semana pasada, los estudiantes de la Media 6 tuvieron que ser evacuados de la desvencijada escuela, incluso una alumna tuvo que ser asistida por haber aspirado monóxido de carbono. A esto se suman otras problemáticas que cruzan a casi todas las escuelas de la ciudad: falta de agua potable, edificios inadecuados, ventiladores que caen del techo, tanques de agua tapados, o incluso las viandas que reciben en mal estado o con poco valor nutritivo. Todos síntomas de la crisis educativa. Es que en los últimos tiempos las escuelas se han convertido en caja de resonancia de la crisis que anida en la sociedad.

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En muchas escuelas el frío y los problemas de gas no dan tregua: el ejemplo de la Técnica 3

La semana pasada estudiantes, docentes, papás y mamás de la EEST 3, del barrio Noroeste, comenzaron a organizarse. El detonante fue el no funcionamiento de las 6 calderas. El frio en los talleres se hizo sentir. Pudimos ver alumnos con mantas sentados en sus bancos o en el propio taller. Así, los primeros en decir basta fueron alumnas y alumnos. Salieron de sus aulas espontáneamente, e impulsados por el hartazgo, realizaron una sentada en el SUM de la escuela.

Esto desató la búsqueda de respuestas, incluso de otras demandas como el problema de las viandas. Sin respuesta a sus demandas, parte de los chicos y chicas buscaron sacar el conflicto a las calles. Establecieron alianzas con estudiantes de otras instituciones, entre ellos de la Secretaría de DDHH del Centro de Estudiantes de Humanidades de la UNS y convocaron a los medios locales para contar la realidad de la escuela.

Luego se sumaron el cuerpo docente y las madres y padres, y junto a los estudiantes confluyeron en un espacio de autorganización democrática, en una asamblea escolar, donde se problematizó las deficiencias. Ante la evidente muestra de bronca, desde el Consejo Escolar local, comenzaron a llegar 10 caloventores. Una solución totalmente inadecuada ya que no podía ser soportado por las instalaciones eléctricas, porque al conectarse todos juntos saltaba la llave térmica.

Desde la agrupación de docentes La Marrón estuvimos presente desde el principio. Ayudamos a la organización de los alumnos y padres. Fuimos a la asamblea con la convicción de sacar el conflicto a las calles, buscando confluir con otras escuelas con similares problemáticas para unificar los reclamos con la acción que impulsaban ATE y el Suteba local.

El miércoles 7 de junio, los más decididos, estudiantes, familias y docentes marchamos en esa jornada de protesta al Consejo Escolar local bajo la bandera “CON HAMBRE Y FRIO NO SE PUEDE ESTUDIAR. LA DEUDA ES CON LA EDUCACION”.

Llevamos todas sus demandas al consejo escolar, donde fuimos recibidos por la presidenta Lorena Misevich, referenciada en Juntos por el Cambio, mientras los consejeros escolares del Frente de Todos se escondían en sus oficinas. Nos ofrecieron distintas explicaciones y promesas de arreglos, así como la asistencia de caloventores, mientras se realizaran las tareas de arreglo de calderas. Una de las alumnas le decía a Misevich lo incomible que son las viandas que les dan y le decía: “…no le puedo decir a mi mamá que me de 200 pesos todos los días para comer porque labura todos los días y cobra 35 mil por mes…”.

Por la tarde, nos volvimos a reunir en una segunda asamblea para socializar la experiencia vivida. Luego de un rico intercambio, la comunidad educativa decidió suspender las clases hasta el viernes 16 y marchar nuevamente hasta el consejo escolar.

El ejemplo de la técnica ya se expandió a otras escuelas. Por estas horas, los alumnos del instituto Avanza buscan replicar la experiencia y coincidir en espacios. Están dadas las condiciones para avanzar y unir las luchas.

La salida es por izquierda. Hay que unir todas las luchas

Lo que pasa con la EEST 3 de Bahía Blanca es solo la punta del iceberg que dejan entrever el ajuste en curso que este gobierno del Frente de Todos implementa, y ni siquiera cumple el 6 % del presupuesto en educación y para ahorrar y cumplir con los pagos de la deuda con el FMI.
Si a esto le sumamos los salarios pulverizados por la inflación, las inacabables jornadas de trabajo de 12 o 14 horas que tienen que cumplir papas y mamas por un miserable salario... las condiciones de vida a las que se ven empujadas las familias en las barriadas de Bahía llevan a un punto límite de la bronca.

Entretanto, las centrales obreras, los sindicatos y el SUTEBA provincial, están más preocupados en hacerle la campaña electoral a Kicillof o al FdT que en defender a trabajadores y docentes, a pibas y pibes en las escuelas y al pueblo pobre en general. No podemos seguir peleando en luchas parciales, poniendo todo nuestro esfuerzo mientras desde arriba nos dividen. Necesitamos unificar todos estos reclamos buscando unir por abajo lo que las burocracias separan por arriba. Se hacen necesarios ámbitos de debates que incluyan a toda la comunidad educativa, familias, docentes, auxiliares y estudiantes para organizarnos y pelear una salida colectiva.

Por eso desde La Marrón impulsamos asambleas por escuela y poner en pie una gran campaña de afiches con la consigna “CON HAMBRE Y FRIO NO SE PUEDE ESTUDIAR. LA DEUDA ES CON LA EDUCACIÓN”, y así tender un puente con la comunidad educativa- Y la perspectiva de preparar una unidad más amplia en Encuentros de trabajadores ocupados y desocupados para poner fin a este ataque.

¿Cuántas horas trabajan los padres, madres o docentes? ¿Cuántos trabajos tienen? ¿Hace cuánto buscas un trabajo con derechos?

Las condiciones de las y los trabajadores han venido empeorando con todos los últimos gobiernos. Nuestra propuesta es generar un millón de puestos de trabajo con derechos, con un salario mínimo que cubra la canasta familiar, como plantea Myriam Bregman, precandidata a presidenta del PTS en el FIT-U.

Se puede hacer, si en las principales empresas del país se implementa la reducción de la jornada laboral a 6hs sin reducir el salario, afectando sus enormes ganancias. Se repartirían así las restantes horas de trabajo entre quienes no tienen empleo, trabajan de manera informal o precaria. Hay que terminar con el trabajo sin derechos y con los salarios que no alcanzan. Para eso buscamos organizar desde abajo la fuerza social y política que pelee en las calles una salida por izquierda.

Con el avance de la técnica y de la ciencia, hoy se puede garantizar trabajar todos y todas y tener tiempo libre, derecho a estudiar, a pasear, a pasar tiempo con la familia, y no tener que dejar la vida en el trabajo.

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