A un año de las elecciones presidenciales, la campaña electoral eleva su tono. Esta mañana cruzaron declaraciones varios de los presidenciables.
Viernes 17 de octubre de 2014 12:47
Foto: Cedoc
El kirchnerismo ha lanzado una nueva etapa de su ya conocido método de asustar con el “peligro de la derecha” y de “retroceder de lo conquistado.” Busca que se acepten como mal menor sus políticas y hacer campaña electoral contra la oposición, disimulando a la vez su propio giro a derecha.
Este nuevo giro electoral provocó esta mañana el cruce retórico de varios dirigentes políticos, incluidos varios de los candidatos a presidente.
A primera hora de la mañana, era el Jefe de Gabinete Jorge Capitanich quien inauguraba las polémicas del día, acusando al jefe de Gobierno porteño Mauricio Macri de tener “una clara actitud demagógica”, luego de que el líder del PRO afirmara que en caso de llegar a la presidencia mantendría la Asignación Universal por Hijo y la estatización de YPF. Capitanich señaló también que “la contradicción política para el 2015 va a ser democracia versus corporaciones” y que el electorado tendrá que elegir entre “proyecto nacional y popular o neoliberalismo acérrimo”.
Por su parte, Daniel Scioli, en su ubicación discursiva cada vez más cercana a la presidenta, negó hoy que el kirchnerismo esté agitando el "miedo" con vistas a lo que puede pasar si pierde en las elecciones del año próximo. "Es el reino del revés, los que agitan el miedo son los que a principios de año estaban diciendo que el país se iba al diablo, que iba a haber hiperinflación, que nos íbamos a quedar sin reservas, que no íbamos a acordar con Repsol ni con el Club de París, que iba a haber elecciones anticipadas", sostuvo. También planteó: "¿Quién está sembrando miedo cuando se lanza un satélite de estas características?", en referencia al ARSAT-1.
Quien recogió el guante con ironía desde la oposición fue el pre-candidato presidencial por el FA-UNEN Julio Cobos, acusando hoy a Cristina Fernández de que fue ella quien derogó durante su gestión la "seguridad", el "poder adquisitivo", el "diálogo y la tolerancia", la "calidad educativa" y la "soberanía energética". La Presidenta, finalizó el diputado nacional en su comunicado, "intenta derogar la realidad, reemplazándola con un relato que la choca y la niega permanentemente. Lo importante, no podrá derogar la esperanza y la ilusión de miles y miles de argentinos que quieren una Argentina mejor y en paz".
Por su parte, el dirigente del Frente Renovador Sergio Massa optó por hacer declaraciones contra el clima de división que él ve en el país, al indicar que cuando culmine el gobierno de Cristina Fernández “la Argentina dividida y del sectarismo va a quedar en el pasado, vamos a una democracia de acuerdos", expresó el legislador en diálogo con radio La Red. A su vez, y en el marco de las polémicas que atraviesan al FA-UNEN por acercamientos de algunos de sus dirigentes a Massa, reiteró que el Frente Renovador que conduce continuará "convocando a radicales, peronistas e independientes para construir la idea de una Argentina unida".
