La reelección a la Alcaldía de Gerardo Espíndola del Partido Liberal, vino acompañada de diez despidos hasta la fecha y denuncias por persecución política a militantes y ex dirigentes sindicales dentro de la municipalidad de Arica.
Domingo 6 de junio de 2021
Desde hace una semana comenzaron a realizarse una serie de despidos en la I. Municipalidad de Arica que luego de la reelección a la Alcaldía, continúa con Gerardo Espíndola, militante del Partido Liberal a la cabeza. Las denuncias que se han hecho escuchar, apuntan a que existe persecución política al interior de la Municipalidad para quienes no compartan la línea de Gerardo. “Puede desvincularme, está en su derecho, pero lo que acuso es su constante persecución política contra mi persona y por pensar diferente”, “por enfrentarme a él cuando fui dirigenta del Sindicato de trabajadores a honorarios”, menciona Jenny Orellana, trabajadora municipal e integrante del Partido Humanista.
El problema de fondo es que el Alcalde no puede “estar en el derecho” de desvincular ni despedir a nadie, porque lo primordial para cualquier trabajador, es su legítimo derecho al trabajo. La falsedad de Espíndola al plantearse como opositor de la constitución de Pinochet, es que mantiene a sus trabajadores en el subcontrato y contratos miserables como el de honorarios, donde sus derechos laborales son muy reducidos. El subcontrato que no le molesta en mantener a Espíndola, es una herencia de la dictadura y validado en la ilegítima constitución de 1980.
Todo esto no es nuevo para el Partido Liberal de Vlado Mirosevic y Gerardo Espíndola, que recién comenzando la pandemia, se mostraron a favor de la mal llamada "ley de protección del empleo", que obligó a los trabajadores suspendidos a socorrerse con sus propios ahorros del seguro de cesantía. Una ley que las empresas utilizaron a su favor, donde han realizado más de 750 mil suspensiones a nivel nacional, y más de 25 mil son de Arica.
¡A defender el derecho al trabajo!¡Fin a los despidos de Espíndola!
Es necesaria la máxima solidaridad con los 10 trabajadores que hasta el momento han sido despedidos o desvinculados en la municipalidad de Arica. Hasta el momento el Partido Humanista en una declaración ha repudiado las decisiones de la Alcaldía, pero solo plantean tomar “acciones legales”, que es necesario, pero completamente insuficiente si queremos conquistar la reintegración de todas y todos los trabajadores municipales despedidos. El Sindicato de honorarios de la Municipalidad debe ponerse a la cabeza de esta lucha, por defender el derecho al trabajo, llamando a solidarizar a trabajadores, pobladores y estudiantes. Al mismo tiempo es inaceptable que todos y todas las Concejales no tomen medidas para impedir esta situación que afectan a los trabajadores.
Para Camilo Jofre, del Partido de Trabajadores Revolucionarios (PTR): “En medio de la pandemia es terrible que existan despidos en la Municipalidad, porque son echados a la calle, trabajadores y sus familias. Tenemos que consagrar el derecho al trabajo, pero esto lo ganaremos en las calles y es hoy cuando tenemos que dar la pelea para conquistarlo. Junto con el fin a los despidos, el paso a planta permanente de todas y todos sus trabajadores para que gocen de todos sus derechos laborales.”
La nueva llegada de Espíndola debe mantener alerta y unidos a sus trabajadores, que ya evidenciaron otros conflictos laborales como el de áreas verdes, donde los trabajadores y trabajadoras fueron los únicos afectados. La lucha por acabar con el subcontrato y el precarizado contrato de honorarios, es una lucha que se mantiene completamente vigente y que tenemos que abrazar si queremos acabar con los abusos que sufren los trabajadores.
