Hace una semana que salió la convocatoria para la postulación de candidatos a ocupar la rectoría de la Universidad Nacional Autónoma de México, varios personajes han externado su gusto por tomar este cargo, entre ellos, la Directora actual de la Facultad de Filosofía y Letras, la Dra. Gloria Villegas Moreno, quien a pesar de intentar mostrar una cara de humanista, en su administración de la FFyL, demuestra que su postulación va más que en sintonía con la antidemocracia Universitaria.
Viernes 2 de octubre de 2015
El “recuento de los daños”, en su administración
Han pasado 7 años desde que la Dr. Gloria Villegas asumió su cargo actual y los escándalos, problemas y confrontaciones con la comunidad no tardaron en explotar. Innumerables demandas han sido protagonistas tanto por trabajadores, como académicos y estudiantes durante toda su administración, y de la misma manera han sido ignoradas.
Desde el deterioro físico del espacio de la Facultad, pasando por concesiones a privados sobre el comedor y las fotocopias, hasta el incumplimiento de pagos a los trabajadores que asciende a más de medio millón de pesos según los propios trabajadores de la Facultad, son el sello con el que su mandato en la FFyL se ha presentado.
Esto sin contar, que el año pasado durante las multitudinarias jornadas de movilización que cimbraron el país, donde cientos de jóvenes se organizaban en asambleas en sus escuelas, se descubrió una cámara profesional con número de serie de propiedad de la Universidad, grabando una asamblea de los estudiantes, la cual no sólo tenía grabaciones de ese año, sino, que tenía un registro detallado de reuniones y activistas, al menos de 4 años antes.
Y agregando el grave caso del acoso político y posterior asesinato de Carlos Sinuhe Cuevas, estudiante y tesista de la Facultad, cuya persecución política y policiaca al interior de Ciudad Universitaria y los pasillas de Filosofía y Letras era sabida por toda la administración sin que se hiciera algo al respecto, con la velada presencia de policías vestidos de civiles al interior de la Facultad y con mensajes en volantes masivos que amenazaban de muerte a Carlos, hasta que el 26 de octubre de 2011 hicieron efectivas las amenazas, sin que Villegas o su equipo dijeran nada al respecto.
El humanismo de dientes hacia afuera
Pese a que la FFyL es reconocida por su conciencia crítica, humanística y social, la Dr. Villegas, ha demostrado todo menos eso. Desde el profundo desprecio que su administración tiene a la base trabajadora, en especial a los bibliotecarios, con tratos déspotas, invasión de su materia de trabajo e intento de acceso exclusivo a ciertos materiales donados por profesores eméritos tras su fallecimiento; hasta la persecución política a estudiantes de izquierda y la exclusión laboral a profesores de izquierda, por haber participado en su época de estudiantes de procesos de movilización como el de a exigencia de un comedor subsidiado.
Esto es aun más claro en los posgrados, donde sólo un selecto grupo de proyectos “académicamente correctos” son aceptados. Las plazas de base se les niega a la gran mayoría de los y las profesoras, aun cuando son estudiantes de doctorado y pos-doctorado, por el simple hecho de la política de precarización laboral que implicó la reforma laboral y que la rectoría y la administración de FFyL no ha tenido problemas en aplicar.
Las “alternativas” sin alternancia
Pesé a que muchas personas ya han presentado formalmente su candidatura a la rectoría y muchas solo han expresado su deseo por hacerlo, como es el caso de la Dr. Gloria, todos tiene acuerdo en la aplicación de las reformas estructurales dentro de la UNAM, así como la continuidad de la antidemocracia que representa la Junta de Gobierno y la figura del Rector, así como el inquisitorio Tribunal Universitario que mientras encubre acosadores, tiene es su haber más de 300 expulsiones políticas.
Es de primer orden que los estudiantes, trabajadores y académicos democraticen el proceso de toma de decisiones de la Universidad, donde es escandaloso que ni siquiera se tanga voto universal para la elección de directores y funcionarios, donde no es clarificado bajo que méritos el Rector tiene voto plenipotenciario para elegir a la Junta de gobierno. Pero más allá de luchar por el voto universal, tenemos que luchar por un gobierno tripartito de mayoría estudiantil que tome el rumbo de la universidad y que la ponga al servicio del pueblo pobre y trabajador desapareciendo la reaccionaria figura de rector.