Desde hace una semana Martín Orozco Sandoval, gobernador de Aguascalientes insiste al gobierno federal en reconocer la Industria Automotriz como rama esencial para la producción. Esto significa exponer la vida de miles de trabajadores.
Jueves 30 de abril de 2020
Recientemente el gobernador local, declaró que “se seguirá peleando” el reconocimiento de la Industria Automotriz como rama esencial de la producción. “Ahorita la Secretaría general del gobierno está haciendo un enlace con la Secretaria General del Trabajo y Previsión Social, con Hacienda, en Economía, para nombrar la cadena esencial de la parte automotriz”, declaró el mandatario.
El argumento central del gobernador, es que la cancelación de actividades del rubro, ha comenzado a impactar en la economía del estado. Para él, que los trabajadores sigan en la línea de producción no impactaría en su salud, ya que existen protocolos sanitarios de “primer nivel”.
De prolongarse el cese de labores en esta industria, y en diversas ramas de la economía nacional, producto de la contingencia sanitaria por el COVID - 19, las implicaciones se refractarán directamente en las aportaciones y participaciones federales, lo cual se traduciría en la cancelación de proyectos y programas de los siguientes meses, sostuvo Orozco.
A esto se suma la caída en los ingresos de la recaudación de impuestos locales, debido a la situación económica de las familias.
“Ahorita no estoy recaudando nada, la recaudación del estado va a bajar, sin duda, lo que ya queremos es que se acabe la pandemia para comenzar a hacer números”, así se refirió el gobernador panista a la situación en Aguascalientes. Para él la producción de los trabajadores y sus familias, que corren riesgo latente de contagio, son sencillamente números.
En Aguascalientes alrededor de 40 mil trabajadores dependen directa o indirectamente de esta rama económica y si bien es real que el cese de su producción seguramente impactará en programas y proyectos sociales, reactivar estos ingresos no puede pasar por exponer la vida de los trabajadores.
Aunque se presuma de protocolos dentro de la fábrica, la industria automotriz, al ser una de las que mayores cifras expresa en ganancias, podría perfectamente garantizar licencias a sus trabajadores con sueldos del 100%, si se trastocaran las ganancias de los multimillonarios accionistas, que seguro están viviendo la cuarentena en sus mansiones en cualquier país del mundo.
Incluso podrían garantizarse ingresos para salud y programas sociales, si se impusieran impuestos progresivos a sus grandes fortunas o si se dejara de destinar millones a la guardia nacional.
No podemos permitir que los trabajadores seamos siempre los que paguemos los costos de la crisis.
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Mariel Ochoa
Estudiante de la FCPyS