A pesar de ser la entidad con mayor letalidad en todo el país (20.74 %, siendo que la nacional es de 11.58 %), el gobierno de Javier Corral se muestra incompetente ante la grave situación sanitaria que enfrentan ciudades como Chihuahua (capital), Ciudad Juárez y Parral.
Jueves 4 de junio de 2020
En el estado de Chihuahua las autoridades locales optaron por el desarrollo de un protocolo de seguimiento, más que de identificación real. Es decir, solo dimensionan el problema a partir de las denuncias públicas o anónimas que reciben y no en su gravedad total.
Desde el primer registro positivo por Covid-19 en el estado de Chihuahua, denunciamos la ausencia y escasez de “Pruebas” o “Test” que detecten la enfermedad, desde el Movimiento de los Trabajadores Socialistas (MTS) y la Red de Periódicos de la Izquierda Diario hemos venido exigiendo #PruebasMasivasyGratuitas.
No obstante, las autoridades de salud en Chihuahua insisten en evasivas, repitiendo que sí existen suficientes pruebas “PCR”, así llamadas, para toda la población en el estado, lo cual contrasta con alguna de su propia información, por lo que dista de ser creíble.
Propias organizaciones y organismos del gremio médico han insistido en la ausencia de pruebas, así como insumos, equipo y medicamentos efectivos para la misma pandemia.
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A la pregunta de ¿Cómo van el rastreo de contagios Covid-19 en el estado de Chihuahua y sus municipios? Para las autoridades locales resulta una cuestión casi imposible de responder, incluso reconociendo la presión política lograda por las protestas y denuncias de contagios positivos de Covid-19, que incluyen defunciones de parte de las y los trabajadores del Sector Salud y de la Industria Manufacturera principalmente.
En Redes Sociales y una vez del conocimiento público, las denuncias fueron retomadas por medios locales presionando a las autoridades, quienes tuvieron que aceptar un tardío manejo de las cifras y la crisis sanitaria por Coronavirus; reconocieron mayores contagios y muertes por Covid-19, que los ofrecidos en sus conferencias de prensa digitales.
Trascendieron los cuestionamientos de la prensa, no así las respuestas de parte de las autoridades estatales.
Se le preguntó al vocero oficial de la Secretario de Salud sobre cuántas pruebas planean hacer en las Maquiladoras, a lo que respondío “No se trata de un número como meta, se trata de las que se necesiten y de acuerdo a la capacidad y a la demanda de las mismas por el desarrollo de la misma pandemia. No, no se trata de llegar a un número concreto”. Sobre si tienen capacidad y recursos para cuántas pruebas, refirió: “Tenemos recursos para las pruebas necesarias, no nos hemos visto limitados en ellas. No ha llegado alguien a solicitar una prueba y que le digamos que no hay”.
Como se aprecia, el vocero oficial de la Secretaría de Salud, responde frases más allá de los datos y cantidades específicas, además rechaza que se haya negado en alguna ocasión la realización de pruebas “PCR” a la población en general.
¡Solo en mayo se registraron 37 defunciones y más de 400 contagios!
En datos oficiales al 3 de junio y 11 horas, las cifras ascienden a 2,140 casos positivos, 362 decesos y 544 personas recuperadas. Ciudad Juárez encabeza con 1,330 contagios y 294 fallecimientos, Chihuahua capital le sigue con 560 positivos y 47 personas fallecidas y finalmente el tercer municipio más afectado es Hidalgo del Parral con 68 casos confirmados y 2 defunciones.
La gravedad ha sido definida como un “Homicidio Industrial”. Solo en el sector maquilador existen denuncias que rebasan las centenas en defunciones por Covid-19, compañeros y familiares se han encargado de desmentir las cifras oficiales, así como el hecho de que la Industria Maquiladora en el estado de Chihuahua en realidad no ha cesado sus actividades, a pesar del decreto federal de finales de marzo, en donde se ordenó detener las actividades económicas no esenciales y garantizar al 100 % el salario de las y los trabajadores para respetar “la Sana Distancia”.
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Revertir las medidas gubernamentales y mitigar los daños de la Pandemia
Con el regreso a la “nueva normalidad”, impuesta por las presiones del vecino país del norte y la oligarquía nacional, resulta indispensable no olvidar que la pandemia del Covid-19 es un problema de salud pública, por lo que es necesario dar una respuesta de conjunto y no pretender mitigarse a partir de paliativos y acciones individuales, como se ha venido promoviendo desde los aparatos de comunicación oficial, sea de la administración panista de Javier Corral o desde los ayuntamientos de la capital Chihuahua y la fronteriza Ciudad Juárez.
Incluso avanzada en su parte más crítica la pandemia del Coronavirus en Chihuahua, es necesaria la centralización del Sector Salud, incluyendo hospitales públicos y privados, como se hizo en España en respuesta a los brotes de contagio.
Con la creación democrática de Comités Obreros de Higiene y Seguridad al interior de los sindicatos y secciones, donde también se incluya a trabajadores y trabajadoras subcontratados y con esquemas contractuales precarios (como son la vigilancia e intendencia, servicios de comedores y transporte); aunado a la centralización de los Servicios de Salud en el estado de Chihuahua que deberá garantizar el equipo e insumos necesarios para las y los trabajadores de la salud, podremos enfrentar la pandemia anteponiendo nuestros intereses colectivos a los particulares.
El enfoque de las burocracias y autoridades se ha centrado en peleas partidarias que se disputan la administración de los recursos que se destinan a combatir la pandemia y/o a cualquier otro programa.
Una segunda tarea inmediata será la de diseñar y aplicar una estrategia que implemente pruebas masivas y gratuitas en la población en general para poder así poder dimensionar la magnitud del problema de manera más precisa.
La aplicación masiva y efectiva de las pruebas “PCR” en la mayoría de la población en el estado de Chihuahua, solo puede ser realizada y garantizada por el personal de la salud, lo cual requiere basificar a todas y todos los trabajadores y no solo al 30%, como prometió la administración actual del PAN. Es preciso recontratar al personal de salud que, en meses y años previos, fueron despedidos a raíz de los recortes y reformas privatizadoras al sector, derivado de las políticas Neoliberales de últimas décadas en los gobiernos del PRIAN-PRD.
¡Basta de ver a la Salud como una Mercancía y no como un Derecho!
Es imprescindible luchar por que se cancele el decreto que colocó a los sectores de la construcción, la minería, industria automotriz y aeroespacial como actividades esenciales, así como que se garantice el 100% del salario de las y los trabajadores para poder extender la cuarentena hasta que se contenga la pandemia.
Para las empresas que no respeten y obedezcan el cese de actividades, así como no garanticen el 100% del salario de sus trabajadores, deberán imponerse medidas y sanciones que vayan hasta la expropiación y el control obrero de sus instalaciones y bienes materiales.
Es evidente que las autoridades locales están más preocupadas por la obtención de recursos económicos para las elecciones electorales del próximo año 2021, que por la salud y vida de miles de familias trabajadoras que sostienen día a día al estado de Chihuahua.