Del fraude patriótico a la proscripción socialista. Una polémica con el Partido Obrero.
Jueves 21 de abril de 2016 20:05
EL PO en Gráficos perdió el rumbo, la compostura y la coherencia. En un balance "sacado", difundido estos días, se tira contra los obreros de Donnelley y WorldColor, y contra la Bordó y el PTS, por el "delito" de haber presentado una lista en el gremio. El PO no ingresó a la minoría del sindicato por primera vez en décadas. Los votos que le faltan podrían haberlos obtenido haciendo un frente con la Bordó. Esto propusimos desde la Bordó, pero ellos lo rechazaron. Lo que cualquier trabajador no enviciado por el faccionalismo saca como conclusión es que se debió haber hecho el frente y la oposicion de izquierda, unida, estaría festejando la obtención de congresales. Pero no. El PO tiene una solución mejor que unir los votos de la Naranja con la Bordó. Dicen que todo hubiera sido distinto si la burocracia no dejaba participar a la Bordó. Ahi sí, dicen, hubiéramos tenido una elección democrática y la Naranja hubiera entrado al Sindicato. Parece extraño pero es así. Del fraude patriótico a la proscripción socialista Su histórico balance –digno de la Historia tragicómica de la política nacional– dice que "en este caso el fraude empezó con la constitución de una Junta Electoral ’monocolor’, continuó con la habilitación de una lista, la Bordó-PTS, que no reunía las condiciones".
¡O sea que si la burocracia no habilitaba la lista Bordó la elección hubiera sido más democrática y transparente! Es la primera vez en la historia de la izquierda que un grupo dice semejante locura. Una "buena" resolución de la Verde negando la posibildad de presentarse a obreros que ocupan una fábrica hubiera puesto las cosas en orden. La Bordó proscripta y, ahí sí, reina la democracia. Para el PO esto hubiera sido una proscripción socialista. Los problemas estatutarios que se esgrimieron no son tales. Se les quería exigir que todos los obreros de Donnelley tuvieran que reempadronarse seis meses antes de la elección. Esto no tiene mayor sentido. Los compañeros tienen años, lustros y décadas de afiliados y no hay nada que explique porque hay que hacer un trámite de cambio de "razón social" con semejante anticipación. Pese a todo, se hizo seis meses antes del fin del mandato. Pero la Verde dijo que fue seis meses menos un día antes de la elección misma. En el marco de que se trata de una fábrica ocupada por sus trabajadores con todas las dificultades que eso implica, exigir esto era una canallada. En Donnelley se hicieron asambleas y se votó movilizarse. La Verde convocó a una reunión de las tres listas para definir el problema. Increíblmente el PO no fue. Ahora dicen que no fueron para no avalar la presentación de la lista Bordó ni para tirarse en contra de que los obreros participen. La verdad es que no fueron porque apostaron a la proscripción sin tener que ensuciarse, como lo demuestra ahora con su queja proscriptiva. Pero lo más trucho del balance es cuando dicen que la Bordó debería haber ingresado a la Naranja. Esa fue la insólita propuesta rechazada por los compa- ñeros.
En su momento dijeron, que les daban un lugar abajo de la lista Naranja. ¿Entonces en qué quedamos? Para ser parte de la Naranja había que levantar la proscripción y dejar que todos voten y puedan ser candidatos. Ahí deberían haber apoyado a los trabajadores de Donnelley y WC . Quizá incluso hubieran gritado que dejar afuera a los obreros de Donnelley era un despropósito, bla bla. O sea que si los obreros de Donnelley iban con la Naranja tenían derecho a votar y ser votados, pero si no acpetan sus condiciones.. proscripción (para que sea realmente democrático). El PO tiene unos principios, pero si no sirven, también puede tener otros. Marxismo... de Groucho, pero marxismo al fin. Para el PO, todo este problema demostraría que en realidad la Bordó no es parte del gremio. Que bonita concepción tienen "del gremio". O sea que tomar una fábrica y ponerla a producir bajo control obrero durante un año y medio es un temita menor. Ser un ejemplo para miles de gráficos sobre cómo enfrentar los despidos, no cuenta. Lo importante es si el reempadronamiento se hizo tomando en cuenta la fecha de la elección o la del fin del mandato de la directiva. ¡Muy bien ese apego estatutario! Atrás quedaron los tiempos libertarios donde los socialistas pedíamos derechos para los obreros. La gran demostración del alejamiento total del gremio para el PO es que solo fue una delegacion de Donnelley a la Asamblea General. ¡Perdón! Cumplimos en informar a los veedores y contralores de la moral de los trabajadores que ese día en Donnelley había que entregar trabajos sin los cuales no se cobra y se pierden los clientes. No son postergables como en otras ramas. Por eso ese día se hizo un corte con mas de cien compañeros, se denunció la asamblea por trucha en los medios y se envió una delegación. ¿Está muy mal? Como sea, frente a una asamblea de ese tipo. ¿Que debería hacer una corriente democrática? Denunciar a la burocracia por poner asambleas en horarios imposibles para los obreros que resisten los cierres. Pero no, los amables camaradas del PO decidieron denunciar a los obreros de Donnelley. Para cerrar el tema, el PO mientre descaradamente cuando dice que la Bordó no impugnó las urnas en cuestión, simplemente decimos que si se hubieran anulado todas tampoco hubiera alcanzado. El PO estuvo durante horas peleando por impugnar 10 urnas y lo hicimos en común. Sin embargo, cuando hizo lenta y torpemente las cuentas y no les dieron, cambio de línea y dijo que impugnaba toda la elección.
Giro a la clase obrera, con método de la FUBA
El PO perdió el rumbo. Creyó que ir al movimiento obrero era una rosca facciosa y que con eso alcanzaba. No sacaron la conclusion obvia de sus derrotas: el que guía su polí- tica por el intento de derrotar a otra corriente de izquierda, pierde la cabeza, la coherencia y no puede más que ir de error en error. Sin balance alguno, van con esa mala consejera al "movimiento obrero" poniendo al PTS como "enemigo principal". Guiados por tal principio en las elecciones de la Alimentación apoyan de forma indistinta a la Bordó o al PCR, que cuenta con candidatos “verdes (de Daer)”. Con tan noble espíritu, en el Neumático debilitaron la lista que ellos mismos encabezan al negar al resto de las agrupaciones opositoras la posibilidad de incorporarse a las Listas Seccionales o presentar lista propia para ser parte de un frente nacional. El objetivo es mostrar más cargos que el PTS y el resto de la izquierda, más allá del papel que se tenga en la lucha de clases y más allá de la fuerza sindical y política que se pueda organizar, conseguidos con rosca, maniobras y luchas faccionales. Como si un cargo pudiera reemplazar el peso real en la clase obrera. La verdad es que la entrada al movimiento obrero, es una cosa más compleja. Hay que ser parte de la lucha de clases real (Kraft, Lear, ¿les suena?), organizar sectores de vanguardia sindical y políticamente, y otras pequeñas tareas costosas y cansadoras pero sin las que todo intento de ir hacia la clase obrera no va a ser más que una parodia como la que se ve por estos días y en estos pagos.