Jueves 7 de abril de 2016 00:00
No va a haber aumento de transporte”, dijo Guillermo Dietrich, actual Ministro de Transporte, el pasado diciembre. Pero al igual que su par en Energía, Juan José Aranguren, a pocas horas de la entrega a los fondos buitre, pactada en el Senado entre los bloques de Cambiemos y el FpV, este directivo de la macrista Fundación Pensar anunció un fuerte tarifazo en el sector con subas de hasta el 100%.
Otra medida contra el pueblo trabajador pensada y anunciada, esta vez, por un empresario de una de las cadenas más grandes del país: Dietrich S.A., que vende para Ford y VolksWagen. Su patrimonio hasta el año 2014 era de casi 9 millones de pesos, distribuidos entre inmuebles y acciones de sociedades en el rubro.
Economista egresado de la Universidad Católica, no vaciló en hacer uso de su poder como funcionario utilizando el helicóptero presidencial para ir hasta su country en Quilmes, mientras el pueblo trabajador viaja en condiciones indignas en el transporte público.
Y si a esto le sumamos el malestar que generó entre los empleados de Aerolíneas Argentinas por solicitar a la actual presidenta de la línea de bandera, Isela Constantini (ex CEO de General Motors), beneficios hacia su familia, saltan a la vista los privilegios de los que goza como parte de la casta política empresarial.
Mientras se orquestaban los aumentos de tarifa, el personal jerárquico de la operadora estatal SOFESE, que maneja la mayor parte de los trenes de pasajeros de la región metropolitana y de larga distancia, recibió un gran beneficio ya que el Ministro de Transporte aprobó sueldos de más de $200 mil.
Dietrich es fundador y líder del G25 junto a Esteban Bullrich, grupo macrista reclutador de gerentes del sector privado para ocupar cargos en los gobiernos; y es el ideólogo de la instalación de bicisendas y el Metrobus.
En relación a esto, se produjeron controversias sobre la aprobación de la propuesta presentada por la administradora de activos Puente Hnos. Sociedad de Bolsa S.A. para estructurar y ejecutar la operación de un crédito que se votó sin explicación, además de señalar negociados de Dietrich con Federico Tomasevich, presidente de Puente, alrededor del corredor de la avenida 9 de Julio, que habría incluido sobreprecios millonarios.
En noviembre de 2015 fue denunciado penalmente por contratar sin licitación a la empresa Mc Kinsey Argentina SRL (cuyo directivo, Francisco Ortega, proviene del G25) para “modernizar” los semáforos en un negocio millonario. La modalidad para favorecer amigos incluyó a Gustavo Mata y Trejo de AUSA, ya que su suegro estaba al frente de José Cartellone Construcciones Civiles S.A., encargado de la realización de gran parte del Metrobus.
Dietrich, junto a su par Aranguren, no dudó en descargar el plan de ajuste sobre el pueblo trabajador. Si durante el kirchnerismo las empresas levantaron fortunas por las dádivas de los millonarios subsidios, en la era de la CEOcracia macrista siguen enriqueciéndose gracias a esta casta política que gobierna para los intereses de los empresarios.