Todo indica que el PRI y el PAN irán juntos en las elecciones de junio 2023 ante la creciente fuerza de Morena en el estado, en un momento en donde importantes dirigentes de aquellos partidos se han sumado al proyecto de la 4T.
Jueves 17 de noviembre de 2022
El proceso electoral del 2023 en el Estado de Coahuila pasa por un momento especial. En una coyuntura inédita, la izquierda institucional se posiciona como favorita para ganar las elecciones por primera vez en la entidad.
Según una encuesta reciente de El Financiero, el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) ocupa el primer lugar en las preferencias electorales coahuilenses con el 37 por ciento, muy por encima del PRI y el PAN, que ocupan el segundo y tercer lugar con 28 y 16 por ciento, respectivamente.
Por su parte, de cara a los siguientes comicios, al menos dos de los aspirantes a candidatos del MORENA -Ricardo Mejía Berdeja y Fernando Salazar- han declarado que de ser ellos los próximos gobernadores, mientras que Miguel Ángel Riquelme será investigado por irregularidades en los manejos financieros de la entidad.
Y es que la entidad encabeza la lista de los estados con más observaciones en el informe sobre las finanzas públicas del 2021 presentado el mes pasado por la Auditoria Superior de la Federación (ASF). Las autoridades coahuilenses no fueron capaces de aclarar el destino de 1.900 millones de pesos, lo que representa casi el 20% del total de dinero gastado con anomalías en todo el país.
Al respecto, el sector salud, la Universidad Autónoma de Coahuila (UAdeC) y la Administración estatal representaron de conjunto un “hoyo negro” del erario: Riquelme no supo explicar el destino de mil 291 millones de pesos que debieron dirigirse a mejorar la estructura de salud; tampoco ha podido acreditar el uso correcto de unos 693 millones de pesos para la UAdeC; ni menos comprobar el incremento del 37% del dinero gastado en pago de nómina que no había sido aprobado.
Diásporas
Importantes grupos del Revolucionario Institucional se han escindido para pasar a formar parte del proyecto político de Ricardo Mejía Berdeja, el subsecretario de Seguridad del Gobierno Federal que se coloca como favorito del partido oficial para encabezar Coahuila.
Pero el tricolor no es el único que sufre desbandadas de la alianza en el estado. Desde el 2018, Acción Nacional enfrentó una diáspora que lo debilitó en las elecciones locales del 2020, pasando hasta el tercer lugar de las votaciones. Luis Fernando Salazar, Alberto Rosales y Rodolfo Walls son sólo algunos de los nombres que han abandonado el partido para ensanchar las filas de MORENA, además de decenas de militantes y cuadros políticos.
Todo parece indicar que al partido blanquiazul le está saliendo muy cara su alianza electoral con el PRI, pues muchos de sus integrantes no aprueban su subordinación al grupo Moreira-Riquelme, que ha desfalcado a la entidad con escándalos como la deuda de Moreira, o el elefante blanco en que convirtió la construcción del Metrobus en Torreón. Además, el PAN deberá ceder que el PRI escoja al próximo candidato, bloqueando las aspiraciones de algunos cuadros políticos panistas.
Ante este escenario complicado para el priísmo y el panismo coahuilenses, los consejos políticos estatales de Coahuila de ambos partidos ratificaron aprobar coaliciones electorales durante el proceso del 2023.
Del otro lado de la cancha, tanto Mejía Berdeja como Fernando Salazar -dos de los precandidatos- se sumaron a la 4T una vez que MORENA ganó las elecciones en el 2018. Un día antes del resultado electoral, ambos personajes militaban a favor del principal contrincante de Andrés Manuel, Ricardo Anaya.
Tránsfugas
La gran cantidad de tránsfugas que están saltando a Morena puede ser una señal de los compromisos que este partido está contrayendo con los viejos personajes y grupos que históricamente han desfalcado a Coahuila con el objetivo de llegar al poder. Esto sobre todo es evidente en el proyecto de Mejía Berdeja.
Por eso, en nuestra opinión como socialistas, más que una transformación en Coahuila, lo que estaría ocurriendo sería una reconfiguración de los grupos de poder tradicionales, dónde los clásicos caciques regionales estén negociando la conservación de sus feudos a cambio de apoyo político.
Ante los partidos que defienden los intereses de los empresarios, las y los trabajadores necesitamos construir nuestro propio partido político, de izquierda, anticapitalista, independiente de las instituciones del régimen y los partidos del Congreso, que no tenga ningún compromiso con líderes empresariales y políticos para pelear por la expropiación de las tierras de los Tricio y grupo Lala que dejan sin agua a la Laguna.
Desde La Izquierda Diario Coahuila te invitamos a seguir y profundizar en estos debates en la zona lagunera, con miras a construir una herramienta política para pelear por la expropiación sin indemnización, de los grupos mineros que funcionan bajo régimenes esclavistas y sin condiciones laborales seguras; para lograr el no pago de la megadeuda de los Moreira en el estado, la cual es ilegal, ilegítima y espuria; para luchar por la democratización de los sindicatos y por la disolución de los "GATES" y de todo el aparato represivo.