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Red Internacional
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RESEÑA // DOCUMENTAL. ¡Hasta el último el trago… corazón!

Un documental con protagonismo de Chavela Vargas y seis grandes artistas mexicanas frente a la cámara de Beto Gómez. Usan el terreno de la música para hablar auténticamente de las vivencias de las oprimidas, yendo del drama hasta la sátira.

Domingo 17 de abril de 2016

Han pasado ya diez años desde que Chavela Vargas, quien hoy cumpliría 97, Lila Downs, Iraida Noriega, La Negra Graciana, Astrid Hadad, Chayito Valdés y Eugenia León, pronunciaron esta “declaración de amor a la vida” realizada a fines del 2005, que aquí rescatamos.

El proyecto fue producido con acotado presupuesto por la Universidad del Cine de Guadalajara y se presentó mundialmente en el Festival de Cine de la misma ciudad en 2006. No tuvo lugar en la comercialización de las salas de México recién hasta el 2009 (en tan solo algunas pocas), por lo cual la difusión que alcanzó y la información que se puede rastrear online son escuetas. Hay sí disponible una entrevista en la que el director, natal de Sinaloa, cuenta cómo surgió esta idea tras regresar a su país luego de 14 años de vivir afuera: “siempre he creído que los hombres siempre seremos niños cubriéndose atrás de las piernas de una mujer”. La afirmación se entenderá mejor a medida que transcurra el documental, pero hay que buscarle el sentido en la tradición que dejaron mujeres de la Revolución Mexicana, como La Soldadera, “es decir, mujeres de armas tomar” (dirá Chavela Vargas). Un norte marcado que es hasta la actualidad muy fuerte en las propias mexicanas y de las que también son expresión las que aparecen en este recorrido íntimo y musical.

Más aún, a la luz de esta década transitada en el continente, el resultado parece también una denuncia muy particular sobre los obstáculos que enfrentan las mujeres para VIVIR: no solo pensar en que no las maten, como muestran los femicidios en Ciudad Juárez, sino así, en mayúsculas, vivir para realizarse mucho más allá de las imposiciones sociales.

Si la autenticidad con la que se expresan los personajes elegidos por Beto Gómez conmueve lágrimas, nadie más que Chavela Vargas podría encargarse de ello a los pocos minutos de darle “play”; pero asimismo nos irán diciendo en casi una hora y media de relatos entramados que sobreponerse y rearmarse tiene mejor sabor.

Las capas de la cebolla

Las siete cantantes, con sus particularidades nos meten en un recorrido sobre las experiencias de su niñez entre cocinas, trabajo en el campo algunas, e historias familiares que las condicionaron, otras. Cantar ha sido para ellas, cuentan, el primer alivio cuando la vida se inundó con los tropiezos cotidianos.
Entre muchas historias y anécdotas bien distintas, desde los desafíos de una sociedad en la cual “las mujeres no valen sin hombres” (como contará Lila Downs), el documental irá tejiendo una trama colectiva a través de los relatos individuales de todas.

Eugenia León, autodefinida niña provinciana, lo va a sintetizar con una metáfora muy elocuente: “Si la vida era una cebolla, yo quería descubrir que había debajo de cada capa”. Y así van abriendo la puerta a los sentimientos que las atravesaron en relación al amor, la vida y la muerte, los miedos y los sueños más tempranos. Si por momentos la pantalla hará que para una mujer sea difícil no identificarse en algunos de esos sentimientos, esto será sin dudas un logro del trabajo de dirección que hace Beto Gómez, que no te deja escapar de principio a fin, incluyendo una sorpresa muy agradable (una cantante muy muy joven), mientras va habilitando fragmentos de las canciones de todas estas mujeres.

“Me dijo – te voy a enseñar a cantar en tierra de hombres- y canté”

Chavela Vargas – La llorona, seguirá siendo la más picante. En pocas palabras resume los desafíos que tuvieron para realizarse como artistas, un lugar facilitado aún hoy a los hombres: “Soñaba con el paraíso. Y México me lo enseñó a patadas ¡el macho de América! y así y todo me hice mujer y más fuerte […] llegando a donde yo quería llegar de verdad”. Es inspiradora escucharla sobretodo contando sin pelos en la lengua su durísimo enfrentamiento al “Indio” Fernández en su propia casa, una figura muy respetada del cine y de la cultura mexicana.

El trabajo recorre reflexiones de todo tipo y color, algunas se animarán a hablar de la propia sexualidad y de cuestionar la censura a la sensualidad femenina cuando no es la que la sociedad manda.

Pero principalmente se trata de un documental por la pasión de cantar, en una búsqueda permanente por conocer la belleza de la vida.
Esa que para las mujeres cuesta lo que vale: en el corazón de la cebolla, tanto sabor como la música genuina de todos los géneros que hay en América Latina; de los que son parte estas seis grandes personalidades retratadas.

Ficha técnica

Título original: Hasta el último trago… corazón!
Año: 2005
Duración: Largometraje 120 min.
País: México
Director: Beto Goméz
Reparto: Chavela Vargas, Lila Downs, Astrid Hadad, Eugenia León, Iraida Noriega, Chayito Valdez y La Negra Graciana.