La Organización de Naciones Unidas (ONU) declaró el 30 de agosto como Día Internacional de las Víctimas de Desapariciones Forzadas. En México, los datos son alarmantes, pues las cifras de las víctimas van en aumento.

Axomalli Villanueva @1quiahuitl
Viernes 30 de agosto de 2019 19:10
El informe especial realizado por la oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH) y la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), señala que en Latinoamérica la desaparición forzada de personas es una técnica de terror.
Esta es parte de la estrategia en contra de los llamados grupos subversivos o terroristas, una utilizada por las fuerzas armadas y de las fuerzas de seguridad, los servicios de inteligencia o, inclusive, de grupos paramilitares que actúan con la cooperación y la tolerancia del Estado.
Las desapariciones forzadas, que en su día fueron principalmente el producto de las dictaduras militares, pueden perpetrarse hoy día en situaciones complejas de conflicto interno, especialmente como método de represión política de los oponentes.
En México, los defensores de los derechos humanos y del medio ambiente, los parientes de las víctimas, los testigos y los abogados que se ocupan de los casos de desaparición forzada, son los principales blancos de esta situación. Otra punto de alarma es la impunidad que gozan quienes cometen las desapariciones forzadas.
El primer visitador de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Ismael Eslava Pérez, aseguró que la desaparición de personas en México no se ha detenido y por el contrario, sigue en aumento en todo el país, con cerca de 30,000 personas desaparecidas, 1,306 fosas clandestinas halladas y 3,760 cuerpos o restos encontrados a la fecha.
Expresó que es importante que la voluntad política -se vea reflejada en canalizar recursos necesarios para la búsqueda, localización, investigación y sanción de los responsables- de las autoridades federales, pero particularmente de las entidades porque ahí se concentra el mayor número desaparecidos.
Las cifras oficiales no son precisas, pues van desde 30 mil a más de 40 mil personas desaparecidas hoy en día. Sin embargo, lo que sí es un hecho, es que los números siguen en aumento y la impunidad persiste. La continuidad de la militarización, a través del despliegue de la Guardia Nacional creada por el gobierno de López Obrador, de la mano del crimen organizado se va convirtiendo en un factor determinante en esta situación.