A casi un año de la desaparición forzada de los 43 estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, Guerrero, la cámara de diputados aprueba la propuesta del PAN para conmemorar uno de los más detestables crímenes de Estado, recordando el 26 de octubre como el "Día Nacional en contra de la Desaparición Forzada de Personas".
Viernes 18 de septiembre de 2015
El pasado 17 de septiembre, la Cámara de Diputados aprobó de manera unánime nombrar los días 26 de septiembre como Día Nacional contra la Desaparición Forzada de Personas. Morena lo aprobó bajo solicitud de que se incluyera un inciso que estipulara la creación de una Comisión Bicameral dedicada a los hechos ocurridos en Iguala, Guerrero. De esta manera, la propuesta fue enviada al senado en busca de su posible ratificación.
Conmemorar el crimen ocurrido el día en que comenzó la desesperación de familiares, amigos, compañeros, de los estudiantes de Ayotzinapa, que es una situación compartida por las miles de familias que han tenido que pasar por algo así en un país con cifras altísimas de desapariciones forzadas (más de 26 mil casos en los últimos 8 años), es muestra de la hipocresía de los partidos patronales y de las mismas instituciones de esta democracia asesina que han sido parte y cómplices de estos crímenes. Son los mismos que ahora pretenden hablarnos de su supuesta "sensibilidad" ante los miles de desaparecidos. Son el Congreso, la justicia patronal y los partidos que acompañaron a Peña Nieto en el Pacto por México y que entregan el país al imperialismo, los responsables de la situación en la cual aumentan incesantemente los desaparecidos.
La instauración de un día conmemorativo se hace en lugar de reconocer e impugnar al gobierno, que no ha tomado medidas serias en contra de los crímenes de lesa humanidad en México y no ha investigado o manipula la información habida de estos casos. Este hecho es una muestra más de la desviación de la justicia que el gobierno, principal responsable del crimen cometido contra los normalistas, parece pretender instaurar para apaciguar la falta de legitimidad que tiene ante la población.
La investigación basada en identificar el ADN de los restos encontrados en el basurero de Cocula, ha demostrado ser ineficaz e insuficiente para averiguar la verdad de lo ocurrido aquella noche del 26 de septiembre de 2014.
A casi un año del crimen cometido en contra de los estudiantes, aún se tienen versiones contrarias de lo ocurrido, no se sabe quiénes fueron todos los responsables. Sólo se detuvo a cuatro hombres: Reyes Landa, Jonathan Osorio Cortez, Agustín García Reyes y Felipe Rodríguez Salgado, durante la administración del antiguo procurador general de la República, Jesús Murillo Karam, que de acuerdo a las investigaciones realizadas por Proceso, se dice que en vez de criminales son albañiles que el gobierno torturó y ocupó como "chivos expiatorios".
Además, las investigaciones elaboradas por el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) de la CNDH, refutan una vez más la "verdad histórica" oficial y aportan nuevos elementos que apuntan a que el gobierno en conjunto con el ejército nacional, tiene más responsabilidad en el caso de lo que dice.
La investigación de las diversas hipótesis es esencial, así como el apoyo a los grupos de investigación independientes, como el Comité de Búsqueda de Familiares de Víctimas de Desaparición Forzada en el que participaba Miguel Ángel Jiménez Blanco, quien fue asesinado el pasado 9 de agosto. Las investigaciones no deben estancarse en la supuesta "verdad histórica" que el gobierno parece querer defender a toda costa.
El intento de declarar el 26 de septiembre como el Día Nacional en contra de la Desaparición Forzada es una artimaña más del gobierno para desviar el descontento y aminorar la enorme responsabilidad que tiene en el caso de la desaparición de los normalistas, es indignante y es un hecho impune que no podemos dejar pasar. Todos debemos salir a reclamar justicia por los 43 normalistas de Ayotzinapa y por todas y todos los miles de desaparecidos que el gobierno no está buscando.
Este 23, 24 y 25 de septiembre se llevará a cabo el ayuno 43x43 y el próximo 26 de septiembre debemos salir unidos en la marcha que iniciará a medio día desde los Pinos al Zócalo de la Ciudad de México, sólo organizados tendremos la fuerza para contrarrestar la masacre que el gobierno encubre en contra del pueblo.
¡Qué no falte ni uno más! ¡Si nos tocan a uno, nos tocan a todos! Porque #Fue el Estado: ¡Vivos se los llevaron y vivos los queremos!
Con información de SDP noticias, La Opción de Chihuahua y el Universal.