IGLESIA CATÓLICA. Doble moral: nos niegan el aborto mientras se llenan de casos de abuso sexual

Desde que salió a la luz el caso Karadima, la Iglesia Católica se encuentra en una profunda crisis de legitimidad. Una olla a presión que luego de destaparse con este caso, dejó salir a la luz a mucho casos de abuso sexual a menores perpetuados por distintos religiosos a nivel nacional, reabriendo incluso casos como el del párroco Reinaldo Méndez, Hualqui, Concepción.

La iglesia católica hipocritamente de la mano con los empresarios es quien se ha opuesto a los derechos más sentidos por las mujeres, la diversidad sexual y el conjunto de la población, como el matrimonio igualitario, la adopción homoparental, la Ley de Identidad de Género, una educación sexual integral en los colegios y universidades, e incluso el acceso a un derecho reproductivo básico como es el aborto libre, legal, seguro y gratuito, negándoles el poder decidir a las mujeres sobre su maternidad.

Por ello cada día se hace más necesario la real separación de la Iglesia y el Estado ya que es esta misma la que no tiene vergüenza y deja de lado toda su moral conservadora cuando se trata de abusar de menores y además encubrir estos casos, guardando silencio, permitiendo a los responsables vivir en la impunidad. Se olvida de toda su predica contra la precariedad y la desigualdad social, mientras viven a costa del diezmo de la población, dejando a miles de mujeres en la calle y la pobreza obligándolas a ser madres, permitiendo junto con el Estado y sus empresarios que miles de mujeres arriesguen sus vidas al momento de tener que realizar un aborto clandestino, tratándolas de asesinas si deciden terminar con un embarazo, impidiendo además el acceso a una educación sexual laica para decidir y anticonceptivos gratuitos y de calidad para no abortar.