Alrededor de 150 trabajadores y jóvenes participaron de un emotivo acto donde se reivindicó el legado de León Trotsky y su vigencia para la lucha antiimperialista y por el triunfo del pueblo palestino.
La Izquierda Diario México @LaIzqDiarioMX
Domingo 22 de septiembre de 2024
En el sur de la Franja de Gaza, muchas familias como la de Ahmed al Zazaq buscan sobrevivir no solo al genocidio que está perpetrando Israel con el apoyo del imperialismo estadounidense y sus aliados, sino al desplazamiento, a las mareas que cubren las playas donde se refugian, al hambre. En Cisjordania, un grupo de periodistas dio a conocer al mundo entero la violencia de soldados israelíes contra cuerpos de palestinos caídos bajo sus balas. Son más de 41 mil las personas asesinadas en esta ofensiva del nefasto estado sionista, la mitad de las cuales son mujeres, niñas y niños.
Más de 12 mil kilómetros al oeste de Gaza, a los 84 años del vil asesinato de León Trotsky, el revolucionario sin fronteras, a manos de un sicario estalinista, en la casa que fue su última morada, devenida en museo, alrededor de 150 jóvenes, trabajadoras y trabajadores, se dieron cita. Eran jóvenes estudiantes de la UNAM y de la UAM, trabajadoras y trabajadores de la UNAM, que se cuentan entre los protagonistas del campamento por Palestina que se llevó a cabo en la universidad más grande de América Latina.
Participaron asimismo maestras y maestros que son parte de la Agrupación Magisterial Nuestra Clase y de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación, que recientemente lucharon por la abolición de la Ley del ISSSTE, por aumento salarial y de presupuesto educativo. Trabajadoras y trabajadores estatales que se organizan para enfrentar la precarización laboral, de la agrupación Queremos Trabajo Digno, también dijeron presente en el evento convocado por La Izquierda Diario México, el Movimiento de las y los Trabajadores Socialistas (MTS) y la Revista Ideas de Izquierda, donde se abordó la vigencia de la lucha contra el imperialismo, en especial por la liberación del pueblo palestino.
Flora Aco, trabajadora estatal despedida por luchar y reinstalada, ex aspirante a una candidatura independiente e integrante de la agrupación Queremos Trabajo Digno e Iker Sandoval, de la Agrupación Juvenil Anticapitalista, participante de la acampada por Palestina y estudiante de la UAM Azcapotzalco dieron poderosos mensajes denunciando el reaccionario papel del imperialismo estadounidense como aliado de Israel y por qué jóvenes, trabajadoras y trabajadores en todo el mundo se han involucrado en la lucha contra el genocidio del pueblo palestino.
Desde Caracas, Venezuela, Ángel Arias, sociólogo y militante de la Liga de Trabajadores por el Socialismo (LTS), y Suhey Ochoa, politóloga e integrante de la Agrupación Pan y Rosas, enviaron un combativo saludo al evento. Hizo lo propio Alberta Nun, desde Toulouse, Francia, dirigente de Revolution Permanente, de Pan y Rosas y reconocida activista por Palestina.
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Miriam Hernández, trabajadora universitaria y delegada de Biblioteca Central de la UNAM, exandidata anticapitalista al Congreso de la CDMX e integrante de la Agrupación Desde las Bases STUNAM y Samantha García, maestra de la Sección 9 de la CNTE-SNTE y delegada del comité delegacional y representante del comité de lucha Coyoacán e integrante de la Agrupación Nuestra Clase extendieron su saludo al evento.
Madeleine Freeman, estudiante, activista y editora de Left Voice, desde Estados Unidos, sostuvo que el genocidio en Gaza encarna la necesidad de enfrentar al imperialismo. "Son las balas estadounidenses las que matan a niños palestinos, las que destruyen escuelas y hospitales" denunció, y afirmó que demócratas y republicanos se han unido para apoyar al Estado de Israel.
Explicó que "ha resurgido el movimiento estudiantil en una escala que se ha comparado con el movimiento contra la guerra de Vietnam de los años 1960 y 1970, en el sentido de que representa una ruptura con la ideología de la hegemonía imperialista estadounidense. El movimiento estudiantil asomó la cabeza con un rugido desafiante en una segunda oleada del movimiento, con el surgimiento de una ocupación o campamento en el campus de la Universidad de Columbia en Abril, un bastión de la ideología neoliberal reaccionaria y el apoyo a Israel.... cientos de campamentos aparecieron en todo el país en solidaridad con Columbia." Los presentes escucharon también que "Las protestas universitarias mostraron la profundidad de la complicidad de Estados Unidos con el proyecto colonial sionista, exponiendo los vínculos económicos e ideológicos de las universidades con Israel."
También dijo que uno de los acontecimientos más alentadores en el movimiento pro-Palestina fue el surgimiento del movimiento obrero, en el que muchos miembros de las bases sindicales se organizaron para conseguir que sus sindicatos exigieran el fin del genocidio e incluso el fin del apoyo militar estadounidense a Israel.
Después de destacar la perspectiva que levanta Left Voice, y llamar a mantener y extender el movimiento internacional por Palestina, Maddie concluyó su discurso diciendo que "Esta lucha contra el imperialismo tiene muchos frentes; el genocidio en Gaza ha expuesto el rostro monstruoso de la intervención estadounidense, pero la lucha contra el imperialismo es la lucha contra la penetración imperialista estadounidense en América Latina y en todo el mundo. México y Estados Unidos están separados por las fronteras imperialistas, militarizadas donde miles de migrantes son perseguidos por la policía fronteriza, por MAGA y crecientemente por la política anti inmigrante de los demócratas y republicanos. Nosotros peleamos por la unidad de los trabajadores mexicanos, centroamericanos y del caribe con el proletariado estadounidense, multiracial y diverso para hacer realidad la consigna de que desde México hasta Palestina, todos los muros deben caer."
Yara Villaseñor, una de las fundadoras de la agrupación de mujeres y disidencias Pan y Rosas en México, referente del MTS, activista de distintos movimientos estudiantiles, socióloga y latinoamericanista, en su participación destacó que para Trotsky, "la lucha revolucionaria de los pueblos oprimidos del mundo era un motor fundamental de la revolución, no solo en sus propios países, sino a nivel internacional".
A su vez, señaló que "la perspectiva de unificar las luchas contra todo tipo opresión, desde el combate al patriarcado hasta la lucha contra el colonialismo, así como el combate por una democracia más generosa que permitiera mejores condiciones para la organización política y social de la clase trabajadora, eran, para las y los comunistas, parte de un solo embate contra los capitalistas y su orden social mundial, se trataba de la misma lucha entre trabajo y capital".
En su exposición, realizó un recorrido histórico de numerosas experiencias de trotskistas palestinos y judíos que en aras de unificar la lucha de la clase trabajadora, alentaron la confraternización entre pueblos, etnias y religiones:
"En los 40’s, cuando el estalinismo impulsó activamente a colonos judíos y su proyecto reaccionario para Palestina, lo que terminó en el apoyo a la fundación del Estado sionista de Israel en 1948, enviando armas para las milicias sionistas y su limpieza étnica, los trotskistas palestinos buscaron formar sindicatos de musulmanes, cristianos y judíos para ampliar su influencia sobre la clase trabajadora, militantes entre los que destacan Jabra Nicola o Yigael Gluckstein, mejor conocido como Tony Cliff. Entre los israelitas también hubo resistencia, y en los 60’s se fundaron grupos como el Matzpen o las Panteras Negras israelíes, que si bien no eran comunistas, buscaron siempre fortalecer los lazos de solidaridad entre trabajadores árabes y judíos desde una perspectiva antisionista".
Afirmó que "acabar con la opresión del pueblo palestino conlleva como condición necesaria la liquidación de las bases materiales del poderío israelí, así como del apoyo imperialista que lo sostiene. Esto no podrá lograrse sin la acción organizada de la clase trabajadora a nivel internacional" y llamó a "continuar la movilización y las acciones en defensa del pueblo palestino, y les invitamos a conocer, discutir y abrazar este gran legado revolucionario, cuya riqueza programatica y estratégica caracteriza y distingue la intervención de las organizaciones de la Fracción Trotskista por la Cuarta internacional, de la que forma parte el MTS".
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Al cierre del foro, desde la mesa y todas las personas del auditorio, que supieron encontrarse en las calles en numerosas movilizaciones, alzaron sus voces por el pueblo palestino, al tiempo que florecieron banderas rojas, blancas, verdes y negras. Su lugar estará también en las próximas movilizaciones contra el genocidio.
Por último, al cierre del evento, jóvenes raperes dieron nueva vida al legado teórico-político de León Trotsky, con originales rimas sobre la teoría de la revolución permanente y la ley del desarrollo desigual y combinado, haciendo resonar el ritmo combativo para encender el ansia de terminar con este sistema de explotación y opresión.
