En la madrugada del sábado pasado, la fábrica de plásticos ubicada en la zona oeste de la ciudad se prendió fuego. No hay heridos pero entre los obreros reina la incertidumbre por su fuente de trabajo y la inseguridad a la que están expuestos. Denunciaron también que el 70% de los trabajadores están tercerizados y trabajan 12 horas por día.
Martes 28 de abril de 2015 15:42
El sábado a la madrugada se incendio la fábrica de plásticos Gemplast, ubicada en Av. Las palmeras y Pte. Perón. Se perdieron maquinarias, insumos y las oficinas administrativas, solo se pudo rescatar un depósito que contiene la producción acabada. Si bien no hubo heridos, reina la incertidumbre alrededor de la situación de los trabajadores.
El incendio comenzó alrededor de las 4 de la madrugada mientras un grupo reducido de 20 operarios trabajaban en la planta y se expandió dentro de un radio de 20 mil metros cuadrados. Para extinguir el fuego intervinieron 22 dotaciones de bomberos.
Si bien los operarios pudieron salir ilesos, uno de ellos declaró a La Izquierda Diario: “Deci que no estamos en temporada alta porque somos muchos más y te dan 45 minutos de descanso en el turno noche, y los compañeros por ahí aprovechan para dormir y descansar un ratito. ¿Vos te imaginas? Esto hubiera sido una masacre”. En la temporada alta la fábrica llega a concentrar alrededor de 500 obreros, luego son despedidos un sector de trabajadores tercerizados, como ocurre cotidianamente en las fábricas de la ciudad de Rosario.
Gemplast de la firma Germinelli S.A, está ubicada en los márgenes de la ciudad de Rosario y la ciudad de Perez. Actualmente tiene 350 operarios y según los trabajadores, alrededor del 70% está tercerizado. Además la planta tiene dos turnos de 12 horas cada uno, rotando semana tras semana en turno noche y turno día.
“No quedaron registros de nosotros”, fue la expresión preocupada de uno de los operarios. Además de la maquinaria y la materia prima, el siniestro también arrasó con las oficinas administrativas de recursos humanos, es decir, que la información alrededor del personal como recibos de sueldo o la antigüedad de cada obrero quedó en cenizas. Mientras las patronales de Gemplast exigen al Estado que intervenga a través de subsidios, entre los trabajadores reina la incertidumbre, debido a que la patronal no se comprometió a garantizar la vuelta al trabajo.