Este miércoles 17 en la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA, estudiantes se suman a las colectas solidarias de todo el país, para las y los afectados por los incendios, y convocan a trabajadores a sumarse a partir de las 18hs.
Martes 16 de marzo de 2021 09:39
Las noticias y los videos se viralizaron por todas las redes, viendo arder hectáreas enteras de tierra y bosques nativos. Cientos de casas se convirtieron en cenizas, ahorros de toda la vida quemados bajo los colchones, familias enteras que perdieron todo, y territorio recuperado por los pueblos originarios siendo arrasado por las llamas. Inmediatamente, se organizaron colectas solidarias en muchas ciudades de la provincia de Chubut, así como en Neuquén, y en distintas provincias del país, o ejemplos como en Mendoza, donde el FITU se puso a la cabeza de la colecta solidaria.
En la Ciudad de Buenos Aires, desde la secretaria general del Centro de Estudiantes de la Facultad de Filosofía y Letras de la UBA; convocan a una colecta solidaria, para hacerles llegar las donaciones a las familias que perdieron todo en los incendios. La convocatoria será para este miércoles 17 de marzo, a partir de las 18hs en la Facultad, e invitan a sumarse a trabajadores y trabajadoras a esta colecta.
“Donde hubo fuego, negocios quedan”, se puede leer por las redes sociales, y desde las cuales se levantan imágenes devastadoras, mientras se le adjudica la responsabilidad al gobierno provincial y nacional por esta catástrofe evitable, denunciando desde la subejecución del presupuesto del Plan Nacional de Manejo del Fuego, hasta el ajuste con respecto al presupuesto 2021, que fue de más del 30%.
Mientras tanto, los medios masivos de comunicación aprovechan para criminalizar a los pueblos originarios y lanzar sin carpa todo su discurso reaccionario, que no extraña de los amigos de los terratenientes. También el gobierno nacional aprovechó para desplegar su orientación punitivista y de responsabilidad individual, aunque las causas de que los incendios se conviertan en desastres medioambientales y sociales están arraigadas en una matriz productiva, que sólo tiene ganancias para los dueños de las tierras y las multinacionales.
Una de las denuncias más fuertes de algunos sectores y organizaciones ambientalistas, es por el pago de la deuda. Una cosa es segura: tanto el ajuste de los presupuestos que podrían prevenir estos desastres, como la falta de infraestructura de las zonas afectadas, y la precariedad de las condiciones de vida de las familias trabajadores, siendo que el fuego principalmente arrasó en zona de tomas y asentamientos populares, son recursos que sistemáticamente fueron a parar al pago de la deuda, que todos los gobiernos insisten en pagar.
El pueblo trabajador viene denunciando y enfrentando los ajustes del gobierno nacional y su programa, discutido y consensuado con el FMI, para pagar la estafa desde la dictadura hasta la campaña electoral de Macri.
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Al frente de esta pelea, por enfrentar la avanzada extractivista, la precarización, los despidos, la desocupación y la pobreza, se ven mujeres al pie de la lucha, organizadas, plantadas, enfrentando las patotas sindicales como la UOCRA,al frente de los piquetes contra la megaminería, pero también las vimos desde el comienzo de la pandemia, siendo la primera línea contra el covid-19. También las luchadoras de Guernica, combatiendo la emergencia habitacional, enfrentando la represión del gobierno de Axel Kicillof y Sergio Berni, o como hoy luchan las docentes junto a las familias, por una vuelta a clases realmente segura. Las estudiantes, muchas trabajadoras precarizadas de las aplicaciones, como de CallCenter, o empleadas de casas particulares, vienen siendo protagonistas de paros internacionales de repartidorxs, y apoyando las distintas luchas.
Desde distintos gremios y agrupaciones estudiantiles, desde La Plata, o como desde La Marrón de docentes de Chubut se le exigen a los centros de estudiantes y sindicatos que se pongan a la cabeza de organizar una gran colecta para la Comarca Andina. Muchos de ellos, aún callados, mantienen una tregua con el gobierno nacional y gobiernos provinciales, conteniendo la bronca y la tristeza por aquellos que lo perdieron todo, pero también por las condiciones de vida que nos impone el ajuste, la deserción estudiantil, la desocupación y la precarización.
Este miércoles seamos protagonistas, estudiantes y trabajadores, de una muestra de solidaridad para todas las familias trabajadoras afectadas y los pueblos originarios, exigiendo la responsabilidad del Estado, y una respuesta urgente para estas familias y pueblos afectados.
