Milei se abraza a Caputo con la esperanza de que consiga más dólares con deuda externa y festeja el dato de inflación de abril como si fuese un gol. La farsa de la desaceleración de precios que siguen al alza a ritmos históricos licuando a su paso salarios, jubilaciones e ingresos populares. Una economía por entrar en recesión con alta inflación y mega endeudamiento. Tres millones de nuevos pobres. El FMI al acecho. La previa a la votación de la Ley Bases. Las mayorías trabajadoras tienen en sus manos la posibilidad de tirar abajo todo el plan de ajuste.
Lucía Ortega @OrtegaLu_
Martes 14 de mayo 21:23
El abrazo de Milei y Caputo el día de la asunción presidencial.
Un salvavidas de plomo. El presidente Javier Milei publicó en sus redes sociales una foto en la que se lo ve abrazándose a su ministro de Economía, Luis Caputo. Lo hizo en ocasión del nuevo dato de inflación del mes de abril, que fue de 8,8% mensual, y se refirió al mismo como un abrazo de "gol". Pero la foto también puede interpretarse como quien se abraza a un salvavidas, con poco para mostrar y mucha crisis por venir.
Uno de los principales motivos por los cuales Luis Caputo está frente al ministerio de Economía es su promesa de conseguir "dólares frescos" para estabilizar la economía. El endeudador serial, amigo del capital financiero, aquél que allá por el 2018 el propio Milei habia calificado de "irresponsable" y de haberse fumado "15 mil millones de dólares de las reservas", no tiene ese "logro" de conseguir un préstamo externo aún en su haber, lo que no quita que no haya emitido deuda pública en cuanto tuvo ocasión. Entre ella, el famoso "Bopreal", un bono a la medida de los importadores.
GOOOOOOOOOOOOL...!!! pic.twitter.com/lM5nSl37Xu
— Javier Milei (@JMilei) May 14, 2024
El festejo por una inflación elevada como si fuese un acierto en el rumbo económico encubre problemas muy profundos y la certeza de que, con cada día que pasa los bolsillos (flacos) empiezan a matar el relato y crece el malestar contra el Gobierno.
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- Inflación: de "robo" a "licuadora": El ministro Caputo es uno de los principales responsables de que la inflación haya tocado niveles del 25,5% mensual en diciembre pasado. El gobierno de Milei acusó a Massa de haber dejado una "inflación reprimida", pero aún si así fuera, su debut con liberación de precios incluyendo alquileres y prepagas, la suba del tipo de cambio más de un 300% y los tarifazos sólo empujó más hacia arriba la remarcación empresaria y la especulación.
Comparado con ese "hito" en la historia económica del país, el 8,8% de abril suena a una "mejoría". Sin embargo apenas implicó volver a los niveles de octubre del año pasado (8,3%), y representa casi el doble el promedio de inflación mensual que existe desde diciembre de 2016 (4,8%), cuando se inició el nuevo relevamiento de IPC. El propio Milei que criticaba el "robo" del impuesto inflacionario ahora festeja la "licuadora" sobre salarios, jubilaciones y partidas sociales y celebra el superávit fiscal apoyado en un ajuste brutal.
Por otro lado, la mentada "desaceleración" desde niveles estratosféricos tiene un componente de "inflación reprimida" mal que le pese a Milei. El dólar planchado y la suspensión transitoria de algunas subas de tarifas previstas buscaron llegar a este número de una cifra en abril para tener "algo" que mostrar. Milei y Caputo buscan tapar que entre los principales factores del dato hay otro más grave, la fuerte desaceleración de la industria, la construcción y el consumo a causa de los ingresos deprimidos.
Si el ritmo de inflación sigue así (8,8% mensual), a fin de año terminará en 224% anual, por arriba del 211% con el que terminó 2023. Si, en el mejor de los casos, el ritmo de inflación baja a un promedio de 5% mensual, terminará el año en un 144% anual. El Relevamiento de Expectativas de Mercado que realiza el Banco Central proyecta una tasa anual de 161,3%. Pero cualquier pronóstico es futurología, en tanto que no puede descartarse ningún cambio brusco, devaluación o corrida, y donde semana a semana se juega en las calles la pulseada contra el plan de ajuste.
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-Actividad económica: derrumbe industrial
Los últimos meses los indicadores de actividad están en rojo. Como explica Pablo Anino, técnicamente, cuando se conozcan los datos oficiales del INDEC correspondientes a la evolución del PIB durante el primer trimestre (enero-marzo) de este 2024, la economía será declarada en recesión al acumular dos trimestres consecutivos de retroceso".
Otro de los indicadores es la contracción de la actividad de la construcción medida en despachos de cemento, de un 36% interanual en el mes de abril.
Por su parte, en marzo, el índice de producción manufacturero retrocedió 6,3 % con relación a febrero y 21,2 % con relación a marzo del año pasado. No hay sector industrial que no haya mostrado caídas pronunciadas. Esto tuvo su correlato en la industria y en el comercio, donde empiezan a sentirse los despidos y la falta de empleo. Los datos recientes empleo registrado muestran una pérdida de 63 mil puestos de trabajo entre diciembre y febrero.
-Pobreza: 3,2 millones de nuevos pobres
Según estimaciones de la Universidad Di Tella entre enero y marzo de este año hay 3,2 millones de nuevos pobres, un efecto directo de la motosierra y la licuadora de Milei. Totalizan así 11 millones de nuevos pobres desde que el FMI pisó el suelo argentino en el año 2018 con el préstamo stand by de Mauricio Macri.
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Hasta la BBC realizó un crudo informe para mostrar el aumento de la pobreza bajo el gobierno de Milei. La periodista Ione Wells, quien la semana pasada entrevistó al presidente, realizó una crónica audiovisual con testimonios desde comedores sociales, que a pesar de recibir cada vez más gente en situación de vulnerabilidad, sufren el impacto del ajuste ante la no entrega de alimentos. El gobierno respondió esta semana con el allanamiento persecutorio de organizaciones sociales y referentes políticos de comedores en barrios populares.
- Salarios: pulverización del poder de compra
El costo de la Canasta Básica Total (CBT) que mide la línea de pobreza subió 67% y la Canasta Alimentaria 55% en los cuatro meses de gobierno de Milei. De esta forma, un hogar compuesto por dos adultos y dos menores necesitó en abril $828.158 para no ser pobre.
Según el Índice de Salarios del INDEC, en el período noviembre 2023-marzo 2024, la caída del poder de compra llegó a del 12 % entre los trabajadores formales del sector privado y 21 % entre los trabajadores formales del sector público. La mayor caída en los formales se verificó en diciembre y luego se moderó. Entre los informales el retroceso es del 27 % con caídas importantes luego de diciembre.
En el caso del Salario Mínimo, Vital y Móvil, al que van atadas muchas prestaciones entre ellas los planes sociales Potenciar Trabajo, entre noviembre de 2023 y abril subió nominalmente 38,9% frente a una inflación que acumuló 107%. Perdió en total un 58% de poder adquisitivo desde 2015.
Jubilaciones: un ataque en toda la línea
En el caso de las jubilaciones, que merecen un párrafo aparte, no sólo se debe contar la pérdida brutal de poder de compra con la inflación y la licuación de los bonos que perciben las jubilaciones mínimas y los haberes más bajos tras, sino también el cambio en la fórmula de movilidad por medio de un DNU, con el que buscan sacar una nueva tajada para "atar" los aumentos a la inflación y evitar cualquier recuperación, por mínima que sea.
Ahora también se agrega el intento de un nuevo saqueo con la eliminación de la moratoria previsional previsto en la Ley de Bases. Sin esta modalidad, 9 de cada 10 mujeres en edad de jubilarse no podrán hacerlo, pero tampoco 7 de cada 10 varones.
Frente a este panorama, de una inminente recesión junto a una inflación que pulveriza los salarios y las jubilaciones, es necesario dar una fuerte respuesta organizada y desde abajo. El paro del 9 de mayo fue contundente a pesar de la actitud de los dirigentes sindicales. Hay fuerzas para pelear y recuperar todo lo perdido en estos años.
La semana que viene se tratará en el Senado el proyecto de Ley Bases y de reforma fiscal. Las centrales sindicales de la CGT y las CTA no pueden repetir el escenario de su tratamiento en Diputados en donde se llamaron a silencio, deben convocar a un nuevo paro general activo, con una gran movilización al Congreso, para rechazarlo porque implica un duro golpe a la clase trabajadora. Este debe ser el inicio de un plan de lucha hasta derrotar el plan del gobierno de Milei, rechazando el conjunto de la ley y por la anulación del mega-DNU y el protocolo de Bullrich. Solo la huelga general podrá derrotar el plan de conjunto.
Lucía Ortega
Economista UBA. Coeditora de la sección de Economía de La Izquierda Diario.