El año pasado, ENAP alcanzó el valor de 575 millones de dólares en utilidades, sin embargo, no garantiza las condiciones laborales al personal si consideramos las protestas del año pasado y esta huelga de hambre.
Viernes 19 de mayo de 2023
En marzo, la directiva de Enap despidió de manera injustificada a siete trabajadores de la refinería en Hualpén. Entre los trabajadores despedidos, se encuentran tres que son parte del Sindicato Petrox. Dos integrantes de aquel Sindicato decidieron realizar una huelga de hambre exigiendo que ENAP reintegre a sus compañeros de manera inmediata a sus funciones. Afirman "que llevamos casi dos meses buscando espacios de diálogo, encontrar algún mecanismo de conversación, y al no poder hacerlo, ni con la empresa ni con las autoridades de Gobierno, tomamos esta decisión".
Uno de los que pusieron en pie esta huelga de hambre, quien también es el presidente del Sindicato Petrox, Iván Montes, en conversación con el medio El Resumen, comenta que "el hilo se cortó por lo más delgado. Aquí hubo responsabilidades de ejecutivos que no realizaron bien sus funciones en la refinería y, tras algunas evaluaciones y para mostrar un poco de gestión en estas falencias, despidieron a estos trabajadores. Los despidos tienen un origen espurio".
Por otro lado, el gerente del personal, Fernando Santibañez, afirma que "como primera acción hemos notificado este hecho a toda la comunidad, recordándoles lo que en numerosas ocasiones hemos explicado al sindicato en nuestros trabajadores y trabajadores, que la desvinculación de las personas aludidas se dio por una reestructuración en la empresa".
Hace un año, 500 trabajadores subcontratados de ENAP en Hualpén se movilizaron exigiendo una mesa de diálogo con la directiva de la refinería debido a que la propia empresa les impuso un acuerdo macro, en que se destaca la imposibilidad de negociar mejoras en las condiciones de trabajo. Sin embargo, la empresa nunca respondió. Por otro lado, luego de que el Gobierno de Boric mandara a la fuerza policial a reprimir las manifestaciones, el propio gobierno decidió ser el mediador en este conflicto, representada por la delegada presidencial Daniela Dresdner. Sin embargo, en la práctica, de a entender que la propia refinería estatal de por si no garantiza las condiciones laborales para realizar las funciones si consideramos este antecedente y los despidos ocurridos en marzo, a pesar que el año pasado la refinería alcanzó un valor de 575 millones de dólares en utilidades, 61% mayor al años anterior, por lo que las ganancias se queda en la directiva a costa de los trabajadores en tiempos de inflación.