×
×
Red Internacional
lid bot

TEATRO. Inundación de lesbianas y fetos zombies al acecho

¿Ciencia ficción feminista? ¿Teatro de lesbianas para lesbianas? La Izquierda Diario conversó con Magda De Santo, autora y directora de la obra que se encuentra en cartel en el CC Rojas.

Lucía Simone

Lucía Simone @LululuSimone

Domingo 29 de mayo de 2016

Foto: Uly Zilioto

Recién finalizada la obra y todavía “procesando”, sentadas en algún escalón de la escalera del Rojas, Magda cuenta cómo pensó la obra, de dónde surge, qué busca. Habla un poco de sus influencias, de la relación con su activismo lesbofeminista, una visión del mundo y de los vínculos entre las mujeres, de la militancia de las mujeres: de las ideologías que nos atraviesan y tensionan nuestro sentir, nuestras aspiraciones y la forma en que nos relacionamos.

Pero Inundación propone un mundo pequeño y apenas real para que en su aire coloreado preguntas importantes floten alegre y despreocupadamente. El apocalipsis se aproxima en forma de rutinas de kick-boxing, pócimas verdes flúo y hordas de fetos zombies organizados.

Con ironía y mucha imaginación, sin ninguna solemnidad, la historia se abre paso.
Una podría pensar que el mundo de Inundación está desintegrándose, pero no. En un extremo, se sostiene por el humor agudo y la mirada cariñosa que surge de la honesta auto-reflexión.

En algún escalón de alguna escalera del CC Rojas, charlamos con Magda De Santo.

* * *

La obra la escribí el año que fue la inundación en La Plata, en el 2013. Venía laburando ya sobre ese texto, con la idea de zombies, como que estaba un poco enganchada con los zombies porque había visto la primer película de Romero del 67 que me pareció muy teatral que pasa todo en un departamento. Estuve investigando sobre zombies, escribiendo. Todavía no se armaba del todo el universo. Fue la inundación de La Plata, esa experiencia me atravesó personalmente: estuve ahí cerca físicamente en un departamento con una amiga que tenía un bebé. Y con esa situación con 2 metros de agua, dije: "Es acá. Lo quiero hacer acá".

Estuve laburando en el texto casi un año, un poco menos. Le di algunas vueltas. También estaba atravesada por mi militancia lesbofeminista. En un punto junté los universos y salió el texto.

Después pasaron como 3 años más. Tenía ganas de montarla pero también tenía inseguridad. Me parecía que no para todo público, que era muy de gueto, que no la iba a entender mucha gente. Entonces Maruja me convocó para este ciclo que se llama Proyecto familia. Le dije "mira yo tengo un texto que es muy sacado, es un delirio". Lo leyó y dijo "sí de una, vamos con esto". Lo metimos en el ciclo y ahí salió la incorporación del Rojas para producir la obra. Estamos desde febrero ensayando acá, con el amparo del Centro Cultural que está buenísimo que impulse este tipo de obras.

Foto: Alejandra Del Castello

Esta es la segunda función, cómo fueron los comentarios, tuviste alguna devolución después del estreno. ¿Qué pasó con el temor que mencionabas a que sea muy para el gueto?

No, eran más mis inseguridades. Pensaba que era quizás un lenguaje no accesible a todo el mundo, o el tipo de chistes que era solo para otras lesbianas. Después me hice cargo y dije, “bueno, sí”. Un segundo gesto fue decir ‘estoy haciendo teatro de lesbianas para lesbianas con nuestras problemáticas con nuestras tensiones’. Un poco la obra, en forma muy paródica y graciosa, intenta mostrar esas tensiones que tenemos a veces las activistas que queremos ir un poco más allá cuando se trata de cuestiones emocionales o afectivas… querer ir un poquito más allá y las cuestiones mínimas no las tenemos resueltas. No tenemos casa o, como en este caso, robó un bebé y lo quiere criar sin género y le parece lo más revolucionario pero de base es un robo.

Foto: Alejandra Del Castello

Y afuera el apocalipsis…

Sí. La cosa apocalíptica está un poco inspirada en una novela de Joanna Russ que se llama El hombre hembra que es del setenta y pico, de ciencia ficción. A mi me gusta mucho la ciencia ficción en general y hay muy poca ciencia ficción feminista. Hay dos o tres referentes, Ursula Le Guin... y pará de contar. Entonces estaba un poco también el desafío de generar una ciencia ficción feminista-lesbiana-local. Me parece que todavía falta mucho tránsito. Construir nuestras propias ficciones. Decime si me pongo muy filósofa porque a veces se me filtra la academia: quería generar mujeres fuertes pero que a la vez el relato no fuera de trascendencia, o sea, que no haya alguien que supera, una heroína que supera. Mucho más acá, y sufriendo acá y sin poder trascender demasiado. Me preocupan también ciertas apropiaciones de autores varones del discurso feminista que montan heroínas. A mi me gustan esas heroínas, y aunque siempre está bueno ver mujeres fuertes, guerreras, me da la sensación de que son personajes masculinos en cuerpos de mujeres. Es como sería una superheroína en la cabeza de un tipo: sin ninguna de las contradicciones ni otras variables que se nos juegan a las mujeres lesbianas. Me interesaba construir esos otros arquetipos y fue muy difícil la verdad. En términos de actuación, por ejemplo no teníamos en quién basarnos. Era un poco Sarah Connor… pero tampoco. Fue difícil encontrar esa singularidad porque no tenemos referentes.

¿Querés agregar algo?
No, está bien. No tengo nada para decir. (Se ríe).

Más información

Inundación tiene funciones todos los jueves de mayo, junio y julio a las 21:00 hs. en la Sala Biblioteca del CC Rojas . Las localidad son limitadas y las entradas pueden comprarse previamente por internet -

Inundación forma parte del Proyecto Familia coordinado por Maruja Bustamante que nuclea distintas obras en torno a algunas preguntas. La familia como el comienzo de todo. ¿Por qué no reflexionar sobre la institución más antigua y poderosa de la Humanidad? ¿Qué familia tengo? ¿Qué familia elijo? ¿Qué familia quiero? ¿Qué familia es posible en el tercer milenio?

Hacen Inundación:

Elenco: Camila Donato, Eleonora Schajnovich, Ximena Seijas.
Diseño de vestuario y escenografía: Isabel Gual
Realizadora de vestuario: Florencia Dawoser
Diseño de iluminación: Sandra Grossi
Diseño sonoro: Franco Calluso
Diseño gráfico video: Fernanda Guaglianone
Fotografía: Uly Zilioto
Dirección de movimiento: Brenda Lucía Carlini
Producción ejecutiva: Brenda Lucía Carlini
Dramaturgia y dirección: Magda De Santo