El actor se refirió a los problemas sociales y el rol de quienes asistían a la ceremonia de los Premios Oscar
Martes 11 de febrero de 2020
Durante esta nueva jornada de los Premios Oscar 2020, Joaquín Phoenix tuvo un discurso marcado por el cuestionamiento a problemas sociales tales como; los derechos de los animales, el medio ambiente,la desigualdad de género, la discriminación hacia la comunidad LGTB y el racismo, dando cuenta de las contradicciones y problemas estructurales de una sociedad capitalista.
El actor fue altamente aclamado por la crítica, ganando su nominación al Oscar como mejor actor, en un film complejo como lo fue “Joker” (2019), donde la interpretación del personaje expresa un sentimiento que atraviesa a la generación actual, al vivir en una sociedad capitalista, en uno de sus momentos más decadentes, donde la juventud parece afrontar un futuro sin opciones, con altas tasas de desempleo e inseguridad laboral, jornadas extenuantes y una crisis medioambiental que avanza.
El trabajo artístico del actor en este último año no ha estado tan alejado de sus pensamientos sobre los problemas que atraviesan a la sociedad, es en esta tónica que en la ceremonia de los Oscar expresó su preocupación, problematizando que “estamos hablando de la lucha contra la idea de que una nación, un pueblo, una raza, un género o una especie tienen el derecho de dominar, controlar y usar y explotar a otro con impunidad”.
También cuestionó el rol de quienes participan de estas instancias, ‘’una de las mejores oportunidades que tenemos los que estamos aquí, es que podemos usar nuestra voz por los que no la tienen’’. Haciendo un llamado a los artistas de esta industria a pronunciarse en contra de la desigualdad y las miserias de este sistema.
El actor que con su interpretación en Joker, se ha convertido en un símbolo para las movilizaciones en latinoamérica y el mundo, cuestionó el control de los empresarios sobre los recursos naturales y la explotación animal, apuntando a la responsabilidad que tienen los empresarios “Nos sentimos con derecho a inseminar artificialmente a una vaca y cuando da a luz, le robamos a su bebé, aunque sus gritos de angustia son imposibles de confundir. Y entonces le robamos la leche que está pensada para su ternero y la ponemos en nuestro café y nuestros cereales, aun cuando los partícipe de este evento son grandes empresarios, dueños y patrones de las industrias ganaderas, que no hacen más que seguir promoviendo la destrucción del medio ambiente y la explotación de los animales”.