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Red Internacional
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Libertad inmediata. Julian Assange está "en muy mal estado" de salud antes de la nueva audiencia de apelación

Assange fue acusado por Estados Unidos de espionaje por difundir en 2010 más de 700.000 documentos clasificados que muestran las brutalidades que cometieron en Irak, Afganistán y Guantánamo entre otros. Por eso antes Trump como ahora Biden piden la extradición a Londres para juzgarlo en EE. UU. Organizaciones internacionales piden su inmediata liberación.

Lunes 25 de octubre de 2021 12:38

Foto de archivo

La compañera de Julian Assange, Stella Moris, afirmó este lunes que el fundador de WikiLeaks se encuentra "en muy mal estado" de salud antes de la revisión, el miércoles, por los tribunales británicos de la apelación estadounidense contra el rechazo de su extradición.

"El sábado pasado vi a Julian en la prisión de Belmarsh", cerca de Londres, indicó Stella Moris durante una conferencia de prensa, y añadió: "Se lo veía con muy mal aspecto", informó la agencia de noticias AFP.

"Esperamos que ya sea el fin" de todo esto, señaló Moris, también abogada de Assange, antes de la audiencia prevista para miércoles y jueves.

"Julian no sobreviviría a una extradición, es la conclusión de la magistrada", prosiguió Moris, considerando "aterradora" la posibilidad de revertir la decisión de no concretarla.

Assange fue acusado por Estados Unidos de espionaje por difundir en 2010 más de 700.000 documentos clasificados sobre las actividades militares y diplomáticas, sobre todo en Irak y Afganistán, que revelaron actos de tortura, muertes de civiles y otros abusos.

Entre los miles de documentos militares y diplomáticos filtrados por Wikileaks figuraba un video en que se veía cómo helicópteros de combate estadounidense disparaban contra civiles en Irak en 2007, matando a una docena de personas en Bagdad, incluidos dos periodistas de la agencia de noticias Reuters.

Assange está recluido en una prisión londinense de alta seguridad desde su detención en abril de 2019 en la Embajada de Ecuador, donde vivió refugiado siete años.

De ser declarado culpable en suelo estadounidense, podría ser condenado a 175 años de cárcel, en un caso descrito por sus defensores como político y un atentado a la libertad de expresión.

La directora de las campañas internacionales de la ONG Reporteros sin Fronteras (RSF), Rebecca Vincent, destacó que el actual presidente estadounidense, Joe Biden, perdió la ocasión de "distanciarse de sus antecesores" y solicitó que se retiren urgente los cargos de acusación contra Julian Assange.

El redactor en jefe de WikiLeaks, Kristinn Hrafnsson, consideró "impensable que el Tribunal Superior londinense llegue a otra conclusión que no sea confirmar" la denegación de la extradición.

Pese a que en enero una jueza británica rechazó la solicitud de extradición por el “riesgo de suicidio” que presentaría Assange, Estados Unidos quiere revertir este fallo y comenzó a exponer en agosto sus principales alegatos.

Las revelaciones en el portal digital WikiLeaks expusieron crímenes de guerra estadounidenses en Irak y Afganistán, archivos sobre las detenciones extrajudiciales en la prisión de Guantánamo (en la isla de Cuba) y cables diplomáticos que desvelaron abusos de derechos humanos en todo el mundo. Su divulgación mostró solo una parte de los crímenes de guerra de los que no solo Estados Unidos, sino también las principales potencias, hacen uso de forma cotidiana en las guerras que libran o respaldan alrededor del mundo.

Estados Unidos quiere usar a Assange como caso testigo para amedrentar a quienes se atrevan a hacer públicas sus aberraciones. La exigencia de su libertad inmediata y sin cargos, es de primer orden no solo para preservar la libertad de expresión y el derecho de información, sino para la propia defensa de todas y todos aquellos que enfrentan y denuncian cada día las brutalidades imperialistas alrededor del mundo.