Desde Vidal hasta Santilli, los referentes de la alianza ganadora de la elección aprovecharon su victoria sobre el kirchnerismo, intentando tapar las internas que tienen y las varias complicaciones de una fuerza política que no cierra las heridas del desastre que dejó hace dos años.
Lunes 13 de septiembre de 2021 01:57
Casi dos millones de votos fue la distancia que le sacó la derecha de Juntos al Frente de Todos en las elecciones primarias de este domingo. Un resultado que todos los sectores de la coalición intentaron aprovechar para mostrar fortaleza. Tal vez quien mejor parado queda después de este primer tramo electoral sea Horacio Rodríguez Larreta. Pero a pesar del triunfo, quedan varias contradicciones que no se pueden ocultar.
"Un basta al atropello y al abuso", fue la definición que hizo María Eugenia Vidal sobre el resultado de la elección. La ex gobernadora bonaerense, ahora candidata en la Ciudad de Buenos Aires, hizo un discurso en el que destacó que "7 de cada 10 porteños eligieron un camino distinto".
Sin embargo, la frase se podría usar en su propia contra. Dos de las grandes incertidumbres preelectorales giraban en torno a cuál iba a ser el resultado que consiguieran López Murphy, en la interna dentro de la alianza, y Javier Milei, presentándose por fuera. Ambos se ubicaban abiertamente a la derecha respecto de una Vidal que hizo una campaña más "de centro", aunque radicalizando el discurso en el último tramo.
En los próximos días habrá que analizar qué significa el voto a esos dos espacios políticos en términos ideológicos y de composición, pero los números concretos muestran que entre ambos, y sumando el pequeño porcentaje de la lista encabezada por Adolfo Rubinstein le sacaron casi un 29% a su espacio. En total, la candidatura de Vidal quedó en un 32,93%. Si se usaran sus palabras contra ella, se podría decir que casi 7 de cada 10 porteños no la eligieron.
Pero las contradicciones no terminan en el histórico bastión del cambiemismo, porque en la Provincia de Buenos Aires Facundo Manes, el candidato "outsider" promovido por el radicalismo, se quedó con más del 40% de los votos de la interna frente Diego Santilli.
Más contradicciones se vieron en Córdoba, donde Mario Negri, apadrinado del mismísimo Mauricio Macri, perdió por muy amplio margen contra la lista de Luis Juez y Rodrigo De Loredo.
De conjunto, la elección expresó un descontento muy grande con el Gobierno Nacional, que llegó en el 2019 con la promesa de terminar con el ajuste macrista y revertir el desastre en el que había quedado el país, pero no cumplió -ni de cerca- las expectativas.
Sin embargo, sería errado entender el resultado como un apoyo ciego a Juntos. En la memoria de millones, las heridas abiertas entre 2015 y 2019, por el profundo ajuste y el desastre político, económico y social que dejó su gobierno, no están cerradas.
