El pasado miércoles se realizó una asamblea en el Hospital Lucio Molas de Santa Rosa, donde se discutieron las múltiples situaciones de vulnerabilidad que sufre el personal de las diferentes áreas de la salud. Guardias impagas, trabajadores que no han cobrado su salario desde hace 5 meses, suspensión de vacaciones, corte de licencias, diversos tipos de contrato en negro, contratación de estudiantes de enfermería por falta de personal son los/algunos de los temas más importantes que se trataron.
Viernes 18 de junio de 2021 14:36
En la mañana del miércoles 15 de junio se llevó a cabo una aplaudida en las instalaciones del Hospital Lucio Molas. Trabajadoras y trabajadores de todas las áreas de la salud se manifestaron marchando por las instalaciones, aplaudiendo y portando carteles con reclamos. Muchos llevaban máscaras, por miedo a las reprimendas que pudieran recibir por su condición de precarizados. A continuación, celebraron una asamblea donde alrededor de cincuenta trabajadores y sindicalistas (ATE, SITRASAP y UPCN) discutieron sobre las diferentes situaciones que atraviesa cada sector.
El tema más resonante, y sobre el que se viene trabajando, es el reclamo para legislar sobre la reducción de la edad jubilatoria. En un petitorio impulsado por una delegada de ATE, y está circulando desde hace algunas semanas, se exige una jubilación a los 55 años para hombres y mujeres que trabajen en salud. Los argumentos –que cuentan con validación científica- refieren a la realización de tareas riesgosas, penosas y al envejecimiento precoz que conlleva dicho trabajo. Es una demanda histórica de los sistemas de salud de todo el país. En la asamblea, dirigentes de todos los sindicatos acordaron acompañar el reclamo y llevarlo a los diferentes lugares de trabajo.
Otro de los temas más mencionados en las intervenciones de la asamblea refiere a las múltiples formas de precarización que sufren las y los trabajadores de la salud. Es un problema estructural del sector, que se arrastra desde el menemismo y nunca fue abordado de manera integral por ningún gobierno desde entonces. En la provincia el gobierno implementa diversas formas de contratación precaria, como por ejemplo el artículo sexto sobre el que se habla con mayor detalle [en esta nota->En la mañana del miércoles 15 de junio se llevó a cabo una aplaudida en las instalaciones del Hospital Lucio Molas. Trabajadoras y trabajadores de todas las áreas de la salud se manifestaron marchando por las instalaciones, aplaudiendo y portando carteles con reclamos. Muchos llevaban máscaras, por miedo a las reprimendas que pudieran recibir por su condición de precarizados. A continuación, celebraron una asamblea donde alrededor de cincuenta trabajadores y sindicalistas (ATE, SITRASAP y UPCN) discutieron sobre las diferentes situaciones que atraviesa cada sector.
También se habló de problemas con las guardias que ejercen las y los trabajadores. Los principales problemas se vinculan no solamente a la falta de pago de las mismas, hecho de por sí grave, sino también al acomodo de la patronal que otorga guardias numerosas a sus subordinados, demostrando que hay una distribución sumamente desigual. Como varios indicaron en la asamblea, el hecho mismo de que se discuta sobre las guardias es una estrategia del gobierno para contraponer a los propios trabajadores entre sí y que compitan por las mismas, lo que además desnuda que el salario que se recibe es insignificante y que deben recurrir a trabajos por fuera de la jornada laboral para poder llegar a fin de mes. Además, se trajo a colación que no existe un monto fijo para lo que se cobra por las guardias y queda a juicio de la patronal. Con esto queda demostrado que no se reconoce de igual manera el trabajo de un camillero que el de un enfermero. Como se afirmó, las guardias funcionan como una “caja negra”, donde nadie sabe cuánto cobran los demás por ese trabjo extra: el monto que se cobra se mantiene en secreto y las guardias por acomodo son mejor remuneradas que las de los trabajadores de a pie.
En la asamblea se hizo presente una docente de la carrera de Enfermería. Pidió la palabra para explicar la situación de las y los estudiantes, que durante la pandemia fueron convocados a trabajar porque el personal de la salud resultó insuficiente. Actualmente, al menos 120 estudiantes de la carrera de Enfermería se encuentran realizando trabajos para la salud pública. Realizan prácticamente el mismo trabajo que los demás, pero se los contrata para “tareas de servicios generales y mantenimiento”. Muchos de ellos han tenido que postergar sus estudios porque entre las horas de trabajo, las guardias y la necesidad de ingresos que supuso la inflación y la crisis económica de la pandemia, no encuentran tiempos para continuar la cursada. Insistió en la necesidad de que se legisle para que automáticamente se incorpore como trabajadores en blanco a quienes se vayan recibiendo, porque el personal la situación de salud es de colapso, porque el personal es insuficiente y porque el ritmo de trabajo es sumamente desgastante y ya está presentando secuelas en las y los trabajadores de todos los sectores. Esto se agrava con el hecho de que desde el gobierno decidieron suspender las vacaciones de invierno.
Por último, se acordó continuar con la organización para poner en pie un verdadero plan de lucha. Se continuará con asambleas para todos los sectores de la salud, y un delegado propuso que se realice un plenario provincial para determinar de qué manera proseguir ante el conflicto. Se tomó como referencia la conquista del 57% para todos los trabajadores estatales de Neuquén gracias a la lucha durante dos meses, con huelgas, cortes de ruta y muestras de solidaridad de toda la comunidad. Desde ATE aseguraron que representarán a todos los trabajadores y trabajadoras de la salud, y que es necesario que en cada área de trabajo se exija a los representantes de los diferentes gremios que reivindiquen los reclamos y lo que se acuerde en la asamblea. Es fundamental que, en una situación tan crítica como la que se está atravesando, el gobierno reconozca verdaderamente la importancia de las trabajadoras y los trabajadores de la salud, que son quienes están en la primera línea de acción contra la enfermedad, y otorgue inmediatamente el pase a planta permanente en todos los sectores.