La escuela tiene ya 68 años de historia de los cuales, 39 son de lucha por un espacio apropiado para formación que ofrece. Al día de hoy, ninguno de los gobiernos que han pasado, dieron respuesta reclamo.
Miércoles 13 de julio de 2016 17:44
Ayer, en el marco de la jornada de lucha de docentes y estatales, estudiantes de la Escuela de Danzas Clásicas de La Plata se sumaron a la manifestación que culminó en la Dirección General de Cultura y Educación (DGCyE). Desde La Izquierda Diario conversamos con Mauro Spezia, estudiante de esta institución, quien nos contó cuáles son los motivos por los que se sumaron a la medida.
"Nosotros nos plegamos a la lucha docente y también a la de los estatales, reclamando algo que ya lleva años y años en esta situación. Concretamente estamos acá peleando por un edificio en el que podamos estudiar dignamente y donde también los docentes puedan laburar sin tener que estar maniobrando para ver cómo meter a más de 30 pibes, que además tienen que bailar, en un aula de 4 x 3. Esto en el caso de tener aulas, porque tampoco nos alcanzan las aulas para cursar. Hay clases que se dan en la cocina, o en la biblioteca directamente. Necesitamos una solución real para una escuela que ofrece tres carreras de formación en Danza y que además forma a futuros formadores. Entendemos que dejar pasar que la formación docente se encare de esta manera tan precaria es avalar la precarización laboral de los docentes de hoy y también un modo de asumir a futuro, un trabajo precarizado cuando nosotros estemos laburando como docentes".
Sería raro tener que aclarar que la danza sucede en el espacio, sin embargo, pareciera que para las y los responsables políticos de la educación, esto no es tan claro. Actualmente, la Escuela de Danzas Clásicas ofrece tres carreras de formación docente con inserción en los niveles primario, secundario y terciario. La conforman más de cien docentes, decenas de auxiliares y preceptores y más de mil estudiantes de todas las edades. Cada año, al comenzar las inscripciones, se abren listas de espera harto numerosas ya que el edificio no da abasto para contener a los propios inscriptos.
"Este año arrancamos repartidos en cinco edificios que nos ceden algún salón, de los cuales dos se dieron de baja. Esto representa el problema de estar repartidos en edificios que impiden el cruce y el intercambio entre los propios estudiantes y también entre los docentes. También es un problema que perdamos el tiempo de ir de un edificio al otro para cursar. Una clase de movimiento, con todo lo que implica, no termina jamás cumpliendo con las dos horas mínimas de duración pautadas curricularmente", agregó Mauro.
¿Cómo piensan planificar este tipo de medidas?
"Este año se volvió a poner en pie la Coordinadora de Terciarios. Desde la escuela estamos participando, desde ya. El 25 de Agosto, vamos a movilizar sacando a la calle todo lo que hacemos puertas adentro de la escuela, para visibilizar este problema. Que se pueda poner de manifiesto lo que nosotros hacemos y que esa especificidad requiere espacio para no poner en juego nuestros cuerpos. Por todo esto, nosotros como futuros trabajadores de la educación opinamos, y por eso estamos acá, que la lucha por la defensa de lo público y del trabajo es nuestra lucha también. Tenemos un marco común. Estamos todos alcanzados por estas medidas de ajuste que se profundizan con este gobierno. Por eso, opino que el camino es unificar para generar estrategias fuertes para poder doblegar esta visión de mundo que nos quieren imponer que es del beneficio para pocos. Creo que los estudiantes tenemos que estar siempre en coordinación con los docentes, con los estatales, con los laburantes porque somos parte de esa clase también y el ataque es para todos nosotros".
¿A quiénes va dirigido el reclamo?
"El Estado y quienes gobiernan, son los responsables del vaciamiento de la educación y de la salud. Creo que este es un plan sistemático de vaciamiento de la educación. No solo sucede acá. También lo vemos en Chile donde la educación es privada. O en México donde se está intentando imponer una política de ajuste también y de reforma educativa a fuerza de muertos y represión".
A días de haber renovado el entusiasmo y la fuerza para volver a poner en pie la Coordinadora de Terciarios, los estudiantes redoblan su espíritu combativo en defensa de la educación pública.