Y conquistar una representación política de los trabajadores, las mujeres y la juventud en el Concejo.
Lunes 15 de mayo de 2017 13:02
Siendo una de las ciudades más importantes de la provincia, La Plata está atravesada por fuertes contradicciones sociales entre el centro y la periferia, entre lo que quieren mostrar como una ciudad de la clase media y lo que vive en sus márgenes. Entre ser una ciudad tradicional y prestigiosa y otra trabajadora, migrante y ultra-precarizada.
En el casco céntrico convive el desarrollo de torres de lujo, muchas de ellas vacías, porque son construidas para la especulación y donde se concentra un pequeño sector de familias acomodadas y el aglutinamiento de decenas de miles de trabajadores estatales, docentes y de servicios que sufren el deterioro de sus salarios, junto a miles de estudiantes y jóvenes que, obligados a trabajar por bajos salarios, terminan abandonando sus estudios.
Por otro lado, todo el oeste de la ciudad ha visto crecer cientos de quintas donde trabajadores inmigrantes sufren jornadas extenuantes y superexplotación en el mayor cordón frutihortícola del país. Terminan de configurar la ciudad grandes barrios obreros como Los Hornos, Villa Elvira, Tolosa, Ringuelet donde viven miles de jóvenes trabajadores que hacen funcionar comercios, industrias y talleres. Hacia el norte del Gran La Plata, las zonas de Gonnet, City Bell y Villa Elisa donde los coutrys, dormitorio de empresarios y políticos del régimen, contrastan con los barrios donde viven miles de familias trabajadoras. En todas estas zonas, el gobierno municipal actúa contratando y precarizando a los trabajadores municipales con salarios que están por debajo de la línea de pobreza.
Nada es lo que parece, en la ciudad capital de la provincia. Como vimos de manera terrible con el crimen social de las inundaciones de 2013, una muestra de hasta dónde llega la sed de ganancia capitalista y la complicidad estatal. Pero así también, del otro lado, su organización y tradición entre los trabajadores y jóvenes, la vuelven una de las ciudades más movilizadas y politizadas del país. La izquierda que está inserta en muchos lugares de trabajo, barrios y aulas va a pelear porque esta realidad que viven cientos de miles no sea utilizada por los partidos patronales, sino para buscar una salida de raíz que fortalezca la organización de los trabajadores, las mujeres y la juventud.
Una izquierda anticapitalista que da pelea en todos los terrenos
Las próximas semanas estarán marcadas por importantes peleas: la elección del gremio de los docentes, SUTEBA, donde La Marrón en la Lista Multicolor peleará por profundizar un rumbo combativo, independiente y democrático en uno de los principales sindicatos de la provincia. En el terreno de la pelea de las mujeres, este 3J habrá una nueva movilización por #NiUnaMenos, como continuidad de Un movimiento que crece, siendo más de 25.000 las y los que desbordamos las calles de la ciudad en cada movilización. En cada lugar de trabajo y estudio las compañeras de Pan y Rosas estarán dando la pelea porque el grito de NiUnaMenos se vuelva organización en las calles, pero también en los lugares de trabajo y estudio, profundizando la puesta en pie de Comisiones de mujeres e impulsando la implementación del cupo laboral trans.
Entre la juventud, un problema estructural atraviesa a la Universidad: solo 3 de cada 10 estudiantes logran recibirse. La mayoría no puede terminar sus estudios porque las patronales utilizan a los estudiantes como mano de obra barata en comercios y en el propio Estado. Los altos costos de los alquileres obligan a muchos a trabajar largas jornadas o abandonar sus estudios por la imposibilidad de costearlos. Por eso en muchas facultades la pelea porque “nuestra educación vale más que sus ganancias” forma parte del debate diario.
En los ministerios y entre los trabajadores estatales el peso adquirido por La Marrón en Juntas Internas y delegados es enorme. La política de descuentos y despidos, de Vidal y compañía, en muchas dependencias encuentra una férrea resistencia. Lo mismo en los hospitales, defendiendo a los trabajadores y la salud pública del pueblo trabajador. En las fábricas los planes de flexibilización y despidos de las patronales comienza a hacer que muchos trabajadores vean con simpatía la campaña de Nicolás Del Caño.
Todo este desarrollo de la izquierda y en particular del PTS en el Frente de Izquierda en la ciudad, es un capital muy importante para encarar la disputa por la representación política de miles de trabajadores, mujeres y jóvenes. Y es que si podemos recuperar nuestras herramientas de lucha, sindicatos, cuerpos de delegados, centros de estudiantes, de manos de los burócratas vendidos, también debemos pelear por tener una representación política propia. Una alternativa anticapitalista y de los trabajadores que se enfrente a los partidos patronales (PRO, PJ/FPV, FR) que se turnan en el gobierno para garantizar que los empresarios se la lleven en pala, y que los trabajadores y jóvenes paguemos los costos de sus crisis.
La izquierda tiene que estar en el Congreso y en el Concejo
Nos preparamos para encarar una fuerte campaña. Es una pelea política contra Cambiemos y sus CEO´s ajustadores, y también contra la confusión que siembra el PJ y el FPV, que busca aparecer como opositor, tratando de capitalizar las masivas movilizaciones contra el macrismo, mientras vota el paquete de leyes ajustadoras en el Congreso Nacional. Para dar esta pelea ponemos nuestros mejores recursos. Por eso, proponemos a Nicolás Del Caño en la provincia de Buenos Aires como precandidato a Diputado Nacional y a Christian Castillo, como precandidato a Senador. Peleamos porque nuestra vida vale más que sus ganancias, para trabajar todos –ocupados y desocupados- 5 días a la semana, 6 horas al día, sin rebaja salarial y con un salario igual a la canasta familiar de piso.
En La Plata este peso, tradición y estructuración de la izquierda en la vida política de la ciudad hay que pelear para que esté también en el Concejo Deliberante. Se plantea una dura pelea política con Cambiemos y el intendente PRO, Julio Garro, que comenzó con recortes y despidos a los municipales. Con El PJ/FPV, que (con listas comunes o compitiendo en las PASO) terminarán en octubre integrando listas que van desde la decana de Periodismo Florencia Saintout, hasta los inundadores hermanos Bruera, pasando por el aval del ex intedente menemista Julio Alak. Ni hablar de la alianza del massismo con los “progresistas” que propone un armado común de quienes hasta ayer se reconocían con posiciones irreconciliables, una bolsa de gatos.
Dentro de las fuerzas de la ciudad muchos posan como independientes, como Patria Grande, mientras se suman al operativo “vamos a volver” del peronismo y no denuncian la completa complicidad del PJ y el FpV con el macrismo, sin cuya imprescindible ayuda el PRO (con minoría en ambas cámaras) no podría hacer pasar el ajuste. Sin ir más lejos el fallo reaccionario del 2x1 pudo salir gracias a que todos los bloques patronales votaron a los jueces de la impunidad.
Este año el Frente de Izquierda peleará por ingresar en el Concejo Deliberante, donde propondremos la candidatura de Luana Simioni, delegada general de ATE-IOMA y dirigente del PTS. El FIT en elecciones anteriores quedó a poco menos del 1% de entrar al Concejo, este año la voz de los trabajadores, las mujeres y la juventud tiene que estar. Las bancas conquistadas por el Frente de Izquierda serán (como lo son en el Congreso y la legislatura) un punto de apoyo para el desarrollo de las peleas contra el ajuste, por la organización independiente los trabajadores y la juventud, por las demandas del movimiento de mujeres, contra los negociados del transporte y la especulación inmobiliaria, para enfrentar la precarización que es el único destino que los empresarios (con la complicidad de la intendencia) ofrece a miles de jóvenes y trabajadores. Por eso, la Izquierda tiene que estar, para hacer fuerte esta pelea en las calles, en los gremios, en los barrios y en las facultades y colegios, y que también se escuche con fuerza en el Concejo.
Cientos de comités de apoyo a la candidatura de Nicolás del Caño y Luana Simioni
“Nuestra vida vale más que sus ganancias” es una campaña que está demostrando tener un tremendo eco en sectores de la juventud y los trabajadores. En el capitalismo nuestra vida vale, solo en la medida mínima y necesaria, para la ganancia de los empresarios. No queremos resignarnos a que este sea el destino “natural” para millones. Como desafiadores de este orden de cosas, luchamos porque esta realidad impuesta cambie radicalmente.
Peleamos por la organización consciente de miles. Al servicio de este fin ponemos todas nuestras fuerzas en esta campaña. Para eso, nos proponemos un esfuerzo enorme, en primer lugar llegar a cada rincón de la ciudad con las propuestas de campaña, con proyecciones, charlas, actos, agitaciones y volanteadas, para que decenas de miles conozcan nuestras ideas y propuestas. A su vez, queremos proponerles a cientos de compañeros que den un paso al frente en la militancia en esta campaña, poniendo en pie en cada lugar de trabajo, barrio, hospital, escuela, fábrica y facultad de nuestra ciudad comités de campaña con los compañeros y compañeras que simpatizan con las ideas del PTS en el FIT y se sumen a hacerlas propias y trasmitirlas a todos sus conocidos, amigos y familiares.
Los locales del PTS/FIT en la zona de Plaza Moreno, de Plaza Rocha, Tolosa, Los Hornos, en Berisso y Ensenada abrirán sus puertas para reuniones, actividades y debates de campaña. Todas las iniciativas son bienvenidas, la imaginación y propuestas de cada uno para potenciar la campaña son imprescindibles.
Comenzar por conseguir cientos de aportes financieros para hacer grande esta campaña
Para hacer una campaña de esta escala también necesitamos del aporte económico de cientos de compañeros. No contamos con los recursos ni aparatos de los partidos patronales que son financiados por grupos empresarios y utilizan los recursos del Estado para sus propios intereses. Somos un partido diferente a todos las demás, actuamos y nos financiamos mediante nuestro esfuerzo militante. Para potenciar con todo esta campaña necesitamos del aporte de cientos de compañeros que todos los días nos encontramos y compartimos decenas de peleas en el trabajo o los lugares de estudio, porque queremos hacer una campaña histórica a la altura de nuestros desafíos, les proponemos que nos ayuden con su participación activa y también con su aporte económico para costear volantes, carteles y todos los materiales imprescindibles para que nuestras ideas y esta pelea lleguen a miles de trabajadores y jóvenes en toda la región.