Este sábado el Movilh convocó a una nueva marcha del orgullo en medio del ascenso de Kast en las encuestas. La convocatoria completamente despolitizada hace necesario un debate respecto de que estrategia se necesita para que triunfen las demandas de la comunidad LGBTIQ+.

Ιωαχειν Santiago de Chile
Martes 9 de noviembre de 2021
Para este sábado, la “burocracia cola” (movilh, iguales y otres “similares”) han convocado a nueva marcha del orgullo. La convocatoria llega bastante tarde si nos atenemos a un escenario político bastante complejo para la comunidad LGBTIQ+ dada la operación mediática que ha instalado un clima de ventaja para Kast en la carrera presidencial. Esto, por supuesto, ha generado que los ataques a la comunidad persistan y se mantengan en el tiempo, además de envalentonar a los elementos más rancios de la ultraderecha en su cruzada con la diversidad sexual. Más de alguno dirá, “más vale tarde que nunca”, pero el contenido de la convocatoria aparece completamente despolitizado, sin alusión alguna al avance de la ultra derecha que una enorme oportunidad para mostrar un repudio de masas a Kast y demostrar que el clima de ventaja a su favor es solo una construcción mediática.
Como esta marcha en realidad es un festival al aire libre y no una movilización, el día sábado marcharan estudiantes, profesionales y gente que no trabaje los sábados. Mientras el grueso del proletariado cola, ese que trabaja en comida rápida, retail, ubereats, en la industria del entretenimiento, bares, pubs, restaurantes no podrán asistir. Una curiosa forma de mantenernos en el closet por parte de la burocracia cola es que mientras se proclama los derechos de la diversidad en la calle , a luz pública, a plena luz del día , en la cotidianeidad se mantiene a los colas trabajando en silencio y ocultos en sus lugares de trabajo ( se estima que el 70% no revela su orientación en lugares de trabajo según un estudio de iguales del 2016) por que claro ¿Cuando el movilh ha buscado generar alianzas con la confech, con sindicatos, con organizaciones territoriales para efectivamente crear comisiones en los lugares de trabajo y estudio para organizar una paralización efectiva del proletariado cola? Nunca, porque para su trabajo de lobbismo parlamentario basta con el apoyo de los colas de clase media acomodada que les importa casarse y que su gimnasio les de descuento por ser “diversos”.
El Frente Amplio y el Partido Comunista, que dirigen esas organizaciones, al parecer usan la chapita de la diversidad sexual para las elecciones porque tampoco se los ha visto mover un dedo para movilizar para este sábado, más que para los destacamentos simbólicos que marcharan de manera rutinaria. Claro, el “miedo al fascismo” los ha comenzado a movilizar ahora que las encuestas dicen que no es descartable que Kast le gane a Boric, por tanto se sacan una convocatoria por la diversidad y la democracia aprovechando el pánico colectivo que en las mujeres y las disidencias genera la avanzada de Kast para recordarnos que entre el fascismo y los pusilánimes mejor elegir a estos últimos, redimiendo su responsabilidad de ser ellos quienes nos han llevado a esta situación. En estas condiciones, de ganar Boric ¿Frenará efectivamente a Kast o solo será un preludio de su mandato reaccionario?. Es por esto que el pánico es enemigo de la estrategia, y agitar el miedo como arma política puede servir a corto plazo pero sin oponer un programa y un plan de lucha difícilmente dará resultados a futuro.
En el bloque disidente de la marcha del sábado me parece que si bien hay una crítica a todo esto, lamentablemente no le achunta al punto. No hay ninguna exigencia a la burocracia cola y se actúa como si esta existiera en un mundo paralelo. Nos guste o no esta burocracia sigue hegemonizado a la mayoría del mundo, incluso cuando muchos trabajadores de la comunidad tienen problemas acuden a ellas primero antes que a nosotres. Entonces quedarse en una crítica al carácter festivo de la marcha me parece superficial, porque quienes han sufrido la humillación por años tienen todo el derecho a querer carretear y sentirse libres por un día. El tema es que podría haber sido un carrete contra Kast , exigiendo cupo laboral trans, plan de emergencia contra crímenes de odio, etc. Sin proponer esto a la burocracia del MOVILH difícilmente lograremos contraponer al movimiento contra su dirección y de esa manera abrir una brecha para que una dirección de combate saque a esos burócratas de sus sillones. Esta critica va sobre todo a nuestros aliades de Disidencias en Lucha MST+Independientes, que no sirve intervenir simplemente por una identidad sin buscar que la vanguardia de un movimiento tome en sus manos la lucha política contra la burocracia.
La ultraderecha quiere aplastar la bandera multicolor, porque fue un símbolo de la juventud en la rebelión. Por más que traten de montar colas fachos en sus franjas, en los días de octubre y noviembre en todas las marchas junto a las banderas negras y mapuche ondeaban las banderas de la diversidad, un símbolo de la juventud que lleva 30 años enfrentando a la moral conservadora que ha ayudado a sostener el régimen neoliberal en chile. Es por esto que odian a nuestra comunidad y desean aplastarla, porque saben que somos y hemos sido una chispa para despertar la conciencia subversiva de la juventud. Pero en vez de caer presas del pánico necesitamos pensar fríamente y con el corazón caliente de qué manera organizamos nuestra fuerza para revertir este escenario adverso. Reitero que el pánico es enemigo de la estratégia. Y finalmente la verdadera minoría es Kast y su séquito de reaccionarios.

Ιωαχειν
Editor y columnista de la Izquierda Diario