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Red Internacional
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QUIBORAX. La familia Fosk, los dueños de Quiborax: Polimetales, precarización laboral y abuso empresarial

Los trabajadores de Quiborax cumplen su primera semana de huelga indefinida ¿Contra quienes se enfrentan? La familia Fosk, y la cara de la impunidad del empresariado en Chile.

Camila Acuña

Camila Acuña Trabajadora Social y militante de Pan y Rosas

Lunes 7 de octubre de 2019

Ya se cumple la primera semana de la huelga indefinida de Quiborax, mientras los dueños de la empresa, la familia Fosk, se niega al aumento salarial de 17 mil pesos que piden los trabajadores.

Allan Fosk, la impunidad empresarial

La empresa Quiborax es la mayor productora de ácido bórico en Sudamérica, llegando a más de 100 mil toneladas al año. El ácido se obtiene a través del mineral de ulexita, el cual lo extrae del salar de Surire, en donde se encuentran unas de sus dependencias. Las comunidades han salido a repudiar la transgresión de los límites establecidos, en donde la empresa ha abarcado prácticamente el total del salar, siendo que sus límites demarcaban solo un 30% de ellos.

Esto trae como consecuencia problemas en la nidificación de las aves (flamencos, etc), como la posibilidad de poner en riesgo el agua de la zona.

En la ciudad de Arica, la empresa es la responsable de haber realizado las gestiones para importar relaves suecos dentro del país, los cuales ubico en el Cerro Chuño, produciendo daños irreparables para la vida y salud de más de 800 personas en la ciudad que se vieron afectados por la contaminación que desecharon los empresarios.

Aportes irregulares en la política

Allan Fosk, Gerente de Quiborax, es el claro reflejo del despotismo de la clase empresarial en Chile. En los diversos casos de aportes irregulares, en donde los empresarios financiaban las campañas de los políticos con el acuerdo en común de velar por sus intereses, el caso del ex Senador Jaime Orpis, fue uno de los más conocidos, en donde el ex parlamentario afirmaba que la empresa Quiborax era una de las empresas de las cuales él había recibido dinero.

Tenemos a empresarios que dicen que aumentar el 0,96% al sueldo de los trabajadores, puede traer la quiebra de la empresa, pero al mismo tiempo no ven problemas en gastar millones financiando a políticos que legislan a favor de sus intereses. Es la misma clase empresarial que se niega a la reducción de la jornada laboral, porque para ellos sus ganancias son más importantes que la vida de cientos de trabajadores y sus familias.

Lee la propuesta del Partido de Trabajadores Revolucionarios (PTR): “A organizar un gran movimiento por la reducción de la jornada laboral y contra el engaño de la flexibilidad del gobierno“.

Los trabajadores y trabajadoras de Quiborax, vienen de haber sufrido la represión policial, en donde 4 trabajadores fueron detenidos. Pero, las ganas de seguir luchando y resistiendo los ataques que envían los empresarios, muestran que si existe la fuerza para conquistar sus demandas, tanto el aumento salarial, como las mejoras en salud, bienestar y seguridad.

La necesidad de rodear de solidaridad esta lucha, haciendo un llamado desde los organismos tanto sindicales como la CUT, o el Colegio de profesores, como también de organismos estudiantiles como la federación de estudiantes de la universidad de Tarapacá, se vuelve una urgencia.

Para lograr la conquista de sus demandas necesitamos generar un gran movimiento que cuestione la precarización laboral y los sueldos de miseria, como también las extenuantes jornadas laborales, y la reducción de sus horas. Para que nadie mas siga perdiendo su vida en el trabajo.